La Java A3vida y su pasión por el hip hop
24 de junio de 2013
Yudith Moreno Álvarez, La Java A3vida, como muchos la conocemos, es una joven rapera que rompió sus barreras hace 7 años y se entregó a la cultura hip hop sin miedos y con muchos deseos de triunfar.
“Fue en diciembre del 2006, en la ‘Poesía Sin Fin’ con el grupo Omni Zona Franca. Así sin estar preparada ni nada, estaba cantando con un rapero y me dijo: “Dale que te vas a presentar”. “¿Hoy?”, le pregunté. Y me dijo: “Sí, hoy”. Entonces yo fui pal baño con una hoja y empecé a escribir y salí a la luz pública. A la gente le gustó aquello que yo hice, que fue improvisado. A partir de ese momento yo dije: “¡Ahora no hay quien me pare con esto!”
A3vida fue el mejor adjetivo que esta versátil rapera encontró para nombrarse. “Porque empecé muy tarde en la cultura hip hop y por tanto para mí, es un atrevimiento todo lo que hago”. Pudo llamarse La Java Asesina como un amigo rapero le recomendó, pero tal calificativo resultó muy agresivo para quien llena su mundo de auras espirituales. “Me gusta mucho el tema espiritual, el tema social, pero principalmente lo espiritual. Hago un llamado a las personas a dejar un poco lo que es el ego y esa manera del querer llegar a ser artista, quiero transmitir ese deseo de ser alguien de una manera sana, y también impartirle mensajes a la sociedad. Me gusta mucho el tema del amor, pero más que todo me gusta abordarlo de una manera espiritualmente bailable, un mensaje con sabrosura y por supuesto, tocar el tema de la mujer que siempre va estar presente en cualquier disco que yo haga, porque soy mujer y pienso que debo defender el derecho de nosotras en sentido general”.
Tenía sólo 15 años cuando descubrió su pasión por la música negra americana en los “bonches”, donde se reunían los “moñeros”, como antiguamente se llamaban. “Un día caminando por la calle Obispo estábamos buscando una discoteca que se llamaba La Peseta, e iba con un grupo de amiguitas que estudiamos en la secundaria. Y al lado de La Moderna Poesía, la librería, había un pasillo donde estaban poniendo a Mariah Carey, y yo le dije a las muchachitas, ‘vamos entrar pa’ allá adentro que esa música a mí me gusta cantidad’, y cuando llegué ahí y vi aquellos negrones vestidos de trajes y la gente bailando el soul y el break dance, aquel baile que se estilizaba en aquel tiempo, yo me sentí identificada, como si yo siempre hubiera escuchado ese tipo de música, y ya, ese fue el enganche hasta el sol de hoy”.
Imponiéndose y con mucho esfuerzo, la Java A3vida cuenta en su aval con dos discos. El primero terminado en el 2012, se titula Capichi, nombre que también lleva el tema que hasta hoy se considera el hit de la rapera. Su segundo disco lo terminó hace algunos meses y se llama Conectá.
Resulta inusual que dentro de la cultura hip hop un artista practique más de un elemento, sin embargo osada como ha demostrado ser, desde hace poco tiempo, La Java está incursionando en el mundo de las mezclas y los vinilos, demostrando que puede ser también una excelente DJ. “Me gusta muchísimo, y llegué a sentir temor que me convirtiera más en DJ que en rapera, porque siento mucha pasión por las dos cosas. Hoy por hoy estoy más definida y sé que me gusta más rapear, pero no pretendo bajo ninguna circunstancia dejar de ser DJ. Quiero seguir estudiando y preparándome porque me encanta ‘ponchar’ música, para mí es algo especial”.
Sin embargo, pese a su perseverancia, La Java A3vida siente la necesidad, como otras raperas, de tener más espacio para presentar su arte. “Hay muchos raperos que están establecidos y no le prestan atención a lo que hacen las mujeres, independientemente de las necesidades materiales que están presentes. Lo principal para resurgir es que se le abran las puertas al movimiento de rap femenino para poder mostrar que lo hacemos, es algo que necesitamos. Incluso estoy hablando de otros géneros musicales que no saben y no les interesa. No le abren las puertas al trabajo de las raperas que es de tremendo sacrificio, pero también creo en la voluntad independiente de cada una para crecerse y lograr visibilidad, es como dicen las palabras sagradas de Dios, ayúdate que yo te ayudare”.
Cuando le pregunté a la Java A3vida como se veía en el futuro, me dijo sin pensar: “Yo no creo en el futuro, pero sí creo en el ahora y pienso seguir luchando, pienso seguir haciendo hip hop. Yo dije que aunque no perteneciera a ninguna empresa ni llegara a una dimensión alta, estoy preparada para rapear y ‘ponchar’ música aunque sea en un parque. Y es lindo mostrar lo que tú haces, y yo en la existencia del hoy, dentro del trabajo que practico como ser humano, pienso tener un espacio para practicar el hip hop porque lo amo, es mi vida”.
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24 de junio de 2013
Yudith Moreno Álvarez, La Java A3vida, como muchos la conocemos, es una joven rapera que rompió sus barreras hace 7 años y se entregó a la cultura hip hop sin miedos y con muchos deseos de triunfar. “Fue en diciembre del 2006, en la ‘Poesía Sin Fin’ con el grupo Omni Zona Franca. Así sin estar preparada ni nada, estaba cantando con un rapero y me dijo: “Dale que te vas a presentar”. “¿Hoy?”, le pregunté. Y me dijo: “Sí, hoy”. Entonces yo fui pal baño con una hoja y empecé a escribir y salí a la luz pública. A la gente le gustó aquello que yo hice, que fue improvisado. A partir de ese momento yo dije: “¡Ahora no hay quien me pare con esto!”
A3vida fue el mejor adjetivo que esta versátil rapera encontró para nombrarse. “Porque empecé muy tarde en la cultura hip hop y por tanto para mí, es un atrevimiento todo lo que hago”. Pudo llamarse La Java Asesina como un amigo rapero le recomendó, pero tal calificativo resultó muy agresivo para quien llena su mundo de auras espirituales. “Me gusta mucho el tema espiritual, el tema social, pero principalmente lo espiritual. Hago un llamado a las personas a dejar un poco lo que es el ego y esa manera del querer llegar a ser artista, quiero transmitir ese deseo de ser alguien de una manera sana, y también impartirle mensajes a la sociedad. Me gusta mucho el tema del amor, pero más que todo me gusta abordarlo de una manera espiritualmente bailable, un mensaje con sabrosura y por supuesto, tocar el tema de la mujer que siempre va estar presente en cualquier disco que yo haga, porque soy mujer y pienso que debo defender el derecho de nosotras en sentido general”.
Tenía sólo 15 años cuando descubrió su pasión por la música negra americana en los “bonches”, donde se reunían los “moñeros”, como antiguamente se llamaban. “Un día caminando por la calle Obispo estábamos buscando una discoteca que se llamaba La Peseta, e iba con un grupo de amiguitas que estudiamos en la secundaria. Y al lado de La Moderna Poesía, la librería, había un pasillo donde estaban poniendo a Mariah Carey, y yo le dije a las muchachitas, ‘vamos entrar pa’ allá adentro que esa música a mí me gusta cantidad’, y cuando llegué ahí y vi aquellos negrones vestidos de trajes y la gente bailando el soul y el break dance, aquel baile que se estilizaba en aquel tiempo, yo me sentí identificada, como si yo siempre hubiera escuchado ese tipo de música, y ya, ese fue el enganche hasta el sol de hoy”.
Imponiéndose y con mucho esfuerzo, la Java A3vida cuenta en su aval con dos discos. El primero terminado en el 2012, se titula Capichi, nombre que también lleva el tema que hasta hoy se considera el hit de la rapera. Su segundo disco lo terminó hace algunos meses y se llama Conectá.
Resulta inusual que dentro de la cultura hip hop un artista practique más de un elemento, sin embargo osada como ha demostrado ser, desde hace poco tiempo, La Java está incursionando en el mundo de las mezclas y los vinilos, demostrando que puede ser también una excelente DJ. “Me gusta muchísimo, y llegué a sentir temor que me convirtiera más en DJ que en rapera, porque siento mucha pasión por las dos cosas. Hoy por hoy estoy más definida y sé que me gusta más rapear, pero no pretendo bajo ninguna circunstancia dejar de ser DJ. Quiero seguir estudiando y preparándome porque me encanta ‘ponchar’ música, para mí es algo especial”.
Sin embargo, pese a su perseverancia, La Java A3vida siente la necesidad, como otras raperas, de tener más espacio para presentar su arte. “Hay muchos raperos que están establecidos y no le prestan atención a lo que hacen las mujeres, independientemente de las necesidades materiales que están presentes. Lo principal para resurgir es que se le abran las puertas al movimiento de rap femenino para poder mostrar que lo hacemos, es algo que necesitamos. Incluso estoy hablando de otros géneros musicales que no saben y no les interesa. No le abren las puertas al trabajo de las raperas que es de tremendo sacrificio, pero también creo en la voluntad independiente de cada una para crecerse y lograr visibilidad, es como dicen las palabras sagradas de Dios, ayúdate que yo te ayudare”.
Cuando le pregunté a la Java A3vida como se veía en el futuro, me dijo sin pensar: “Yo no creo en el futuro, pero sí creo en el ahora y pienso seguir luchando, pienso seguir haciendo hip hop. Yo dije que aunque no perteneciera a ninguna empresa ni llegara a una dimensión alta, estoy preparada para rapear y ‘ponchar’ música aunque sea en un parque. Y es lindo mostrar lo que tú haces, y yo en la existencia del hoy, dentro del trabajo que practico como ser humano, pienso tener un espacio para practicar el hip hop porque lo amo, es mi vida”.
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