El Prof3 propone: talento, inteligencia y poder
1 de julio de 2013
La producción de espectáculos musicales amerita algo más que un “colchón” económico, requiere también de conocimientos y “vista larga”. Además, no es lo mismo producir para La Habana, capital que atrae a sus escenarios a los provincianos y a los de más allá, que organizar un concierto para un municipio del oriente cubano, por ejemplo.
Rayner Luis Palacios Elers, El Prof3, reconocido productor de la escena musical underground en Santiago de Cuba, considera que “para poder conquistar a un público más o menos fiel, –es lo mismo que para lograr casi todo en la vida–, se necesita: uno: talento, dos: inteligencia y tres: poder. Estos tres aspectos deben ir muy relacionados entre sí como un sistema, pues, faltándote uno puedes conquistar o alcanzar un objetivo, pero mantenerlo se convertiría en lo más delicado”.
Él estuvo en la producción de aquellos espacios en los que el hip hop calentaba la llamada capital del Caribe en los años 90, cuando se hacían peñas como K-bildazo Hip Hop en el Cabildo Teatral, Santiago Rap en el Ateneo Cultural Antonio Bravo Correoso, y las Peñas de Rap en la Casa del África, en el Reparto Vista Alegre. Hoy en día todos los sitios están deteriorados y sus puertas cerradas para estos encuentros, que antes garantizaban noches plenas y auténticas. En la Casa del Joven Creador, que en aquella época estaba donde ahora, en el reparto Vista Alegre, era seguro escuchar rock, trova, música electrónica, y también “moña”, los fines de semana. “Para entonces sólo hacía falta: el talento. Sin embargo, hoy si no tienes poder, llámese dinero, relaciones institucionales, tecnología, etc., no puedes siquiera realizar un encuentro comunitario de mínimo o pequeño alcance”.
Aunque verdaderamente siempre hay un público para todo, no importa la cantidad. Por ejemplo, Tragedy, una de las bandas de rock de Santiago de Cuba, mantiene una peña con frecuencia mensual en la Pista Pacho Alonso, y los seguidores del rock que no tienen que ser cien, siempre van y no sólo disfrutan del grupo, que sigue sentando una base peculiar del género, sino que también ven sus videos preferidos, tanto los cubanos como los internacionales.
Asimismo El Prof3 conoce del “toma y daca” que se establece entre las instituciones: “precisamente en este asunto es donde se ve lo de la inteligencia y el poder. Lo primero, el sistema cultural está institucionalizado, y tienes que conocer cómo trabajan éstas, mostrar qué pueden ellos utilizar de ti y tú utilizar de ellos”.
El Prof3 ha producido espectáculos donde no sólo la música es la protagonista. “Para mí todo es cultura. Es verdad que la mayoría de las veces lo que está en el centro es la música, pero los espectáculos son para personas que ven, escuchan, bailan, critican. Y el objetivo tanto del artista como de los productores, es convertir en adeptos a ese público de lo que está disfrutando en el escenario. En mi estilo de trabajo yo combino la mayor cantidad de manifestaciones artísticas que puedo usar en ese momento, siempre teniendo en cuenta que lamentablemente hay un gran por ciento del público que está acostumbrado a lo banal y a lo más fácil. Lo ideal es hacerle entender lo contrario”.
Rayner sueña con seguir produciendo espectáculos con las mismas facilidades que tienen algunos proyectos de occidente, que él mismo ha apoyado. Pero su idea es que como mismo se produce el éxodo de los orientales a la metrópoli, los de occidente sientan la necesidad de disfrutar y participar de los espectáculos y eventos de esta parte de la Isla. El Prof3 sabe la fórmula para sus anhelos: talento, inteligencia y poder.
Comentarios Dejar un comentario
1 de julio de 2013
La producción de espectáculos musicales amerita algo más que un “colchón” económico, requiere también de conocimientos y “vista larga”. Además, no es lo mismo producir para La Habana, capital que atrae a sus escenarios a los provincianos y a los de más allá, que organizar un concierto para un municipio del oriente cubano, por ejemplo.
Rayner Luis Palacios Elers, El Prof3, reconocido productor de la escena musical underground en Santiago de Cuba, considera que “para poder conquistar a un público más o menos fiel, –es lo mismo que para lograr casi todo en la vida–, se necesita: uno: talento, dos: inteligencia y tres: poder. Estos tres aspectos deben ir muy relacionados entre sí como un sistema, pues, faltándote uno puedes conquistar o alcanzar un objetivo, pero mantenerlo se convertiría en lo más delicado”.
Él estuvo en la producción de aquellos espacios en los que el hip hop calentaba la llamada capital del Caribe en los años 90, cuando se hacían peñas como K-bildazo Hip Hop en el Cabildo Teatral, Santiago Rap en el Ateneo Cultural Antonio Bravo Correoso, y las Peñas de Rap en la Casa del África, en el Reparto Vista Alegre. Hoy en día todos los sitios están deteriorados y sus puertas cerradas para estos encuentros, que antes garantizaban noches plenas y auténticas. En la Casa del Joven Creador, que en aquella época estaba donde ahora, en el reparto Vista Alegre, era seguro escuchar rock, trova, música electrónica, y también “moña”, los fines de semana. “Para entonces sólo hacía falta: el talento. Sin embargo, hoy si no tienes poder, llámese dinero, relaciones institucionales, tecnología, etc., no puedes siquiera realizar un encuentro comunitario de mínimo o pequeño alcance”.
Aunque verdaderamente siempre hay un público para todo, no importa la cantidad. Por ejemplo, Tragedy, una de las bandas de rock de Santiago de Cuba, mantiene una peña con frecuencia mensual en la Pista Pacho Alonso, y los seguidores del rock que no tienen que ser cien, siempre van y no sólo disfrutan del grupo, que sigue sentando una base peculiar del género, sino que también ven sus videos preferidos, tanto los cubanos como los internacionales.
Asimismo El Prof3 conoce del “toma y daca” que se establece entre las instituciones: “precisamente en este asunto es donde se ve lo de la inteligencia y el poder. Lo primero, el sistema cultural está institucionalizado, y tienes que conocer cómo trabajan éstas, mostrar qué pueden ellos utilizar de ti y tú utilizar de ellos”.
El Prof3 ha producido espectáculos donde no sólo la música es la protagonista. “Para mí todo es cultura. Es verdad que la mayoría de las veces lo que está en el centro es la música, pero los espectáculos son para personas que ven, escuchan, bailan, critican. Y el objetivo tanto del artista como de los productores, es convertir en adeptos a ese público de lo que está disfrutando en el escenario. En mi estilo de trabajo yo combino la mayor cantidad de manifestaciones artísticas que puedo usar en ese momento, siempre teniendo en cuenta que lamentablemente hay un gran por ciento del público que está acostumbrado a lo banal y a lo más fácil. Lo ideal es hacerle entender lo contrario”.
Rayner sueña con seguir produciendo espectáculos con las mismas facilidades que tienen algunos proyectos de occidente, que él mismo ha apoyado. Pero su idea es que como mismo se produce el éxodo de los orientales a la metrópoli, los de occidente sientan la necesidad de disfrutar y participar de los espectáculos y eventos de esta parte de la Isla. El Prof3 sabe la fórmula para sus anhelos: talento, inteligencia y poder.
Comentarios Dejar un comentario
- No hay comentarios en este momento.