Cimarrón: una historia de raperos
22 de julio de 2013
De ti las decisiones
Porque de mí dependen las canciones
De ti depende analizarlas, de ti comprenderlas, captarlas
Yo te hablo con las palabras
Ese es mi trabajo
Tú escoges como usarlas
(Fragmento del tema: “Depende de ti” de Cimarrón)
Ellos desaparecen y vuelven, de momento nadie sabe de su existencia y de pronto alguien los menciona porque van a estar en una presentación en Santiago de Cuba, en Camagüey, en Palma Soriano donde viven. Se hacen llamar Cimarrón* y pronto van a cumplir 10 años.
Antes de actuar en una de las actividades del Festival del Caribe de este año 2013, estaban escondidos detrás de un bohío que levantaron los artistas del proyecto ENNEGRO**, maquillándose, pintándose de blanco las caras y ajustándose los collares. Uno de ellos, el que se hace llamar Negro Fino, tiene un interesante bastón de madera oscura con el que marca sus poemas y líricas.
El más fuerte, Negro-Negro, se presenta como nieto de haitianos, por eso se convierte tan fácil en una especie de espíritu escapa’o que se fugó del monte. El silencioso se llama Negro de la Fe. Tres veces negros. “Como sus raíces”, responden.
Les gusta sorprender al público, se rodean de velas encendidas, buscan tocadores de batá, alzan una vasija repleta de raíces y ron, echan humo de tabacos al cielo, y hasta montan un bembé o una ceremonia vudú.
Y la gente se detiene a escuchar, son cimarrones que viven en el interior, son de provincia, orientales, del monte, a más de 30 kilómetros de la capital del Caribe. Para poder actuar en Santiago tienen que pernoctar en casas de sus amigos, y por supuesto, de alguna manera compartir sus cuotas de comidas.
Andan siempre con una grabadora para coger sus improvisaciones, dicen, porque son muy intuitivos. Y le agregan el sonido de los batá, a veces del grupo Me Congó, porque han crecido con ellos como amigos. Así buscan su beat, el golpe, bum bum, el tempo de un tema. En otras ocasiones lo hacen desde su propio rapeo o dramatización: “¡Queeé cará!, como mimo yo vine, como yo menvoy, ¡hum!... é pa´ vé si utede tan cuento deso, ¡nojotro!, toitico, toitico... étamo rodea ‘o... ¡hum! y no ‘é de agua… toavia étamo siendo perseguió, ¡cará! ¡eeeeeeé veddá! qué nojotro entoavía etamó econdío de lo perro jibaro y de lo mayorá…”
Algunos reconocen en su tema “Sueño”, las alusiones a Malcom X, a Big Pun, al cacique Hatuey, Tupac Shakur, pero cuando rapean en “Vengo”: “yo vengo del palenque como José Dolores, capitán de cimarrones”, es difícil para muchos identificar con precisión dónde está eso o quién es ese hombre. Todos corean “drume negrita, que yo voy a comprá vieja cunita”, porque el poema es conocido, como mismo repiten en coro un repetido estribillo: “todos los santos bajan de la loma, a bailar bembé, todos los orishas vienen de lo alto, a bailar bembé”.
Si antes aprovechaban y en los Festivales del Caribe se colaban en las guaguas, en los albergues o en los comedores, con la delegación del grupo portador de la Comunidad de Barrancas para poder actuar, ahora los invitan porque ya no son muchachos, ahora son artistas jóvenes conocidos.
Aprovechan el tiempo que les deja esa primera actuación y terminan con un tema en el que hablan del “basurero de autoestima y de sentimientos”, y en la que piden “arrímate al basurero de las glorias perdidas”. Y se despiden dejando escapar un grito: “¡Ten cuida´o negrón!”
*Cimarrón: Proyecto hip hop radicado en Palma Soriano, Santiago de Cuba. Sus integrantes son Yasbel Enrique Rivera Garbey/Negro Fino es, director del grupo y líder. También es el máximo creador de la poética. Maikel Despaigne González/ Negro-Negro, líder y oponente de Negro Fino. Y Jans Antonio Chaveco Reyes/Negro de la Fe, en el coro.
**Taller y Proyecto Sociocultural-Medioambiental radicado en Palma Soriano, defensor de la cultura cubano-haitiana.
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22 de julio de 2013
De ti las decisionesPorque de mí dependen las canciones
De ti depende analizarlas, de ti comprenderlas, captarlas
Yo te hablo con las palabras
Ese es mi trabajo
Tú escoges como usarlas
(Fragmento del tema: “Depende de ti” de Cimarrón)
Ellos desaparecen y vuelven, de momento nadie sabe de su existencia y de pronto alguien los menciona porque van a estar en una presentación en Santiago de Cuba, en Camagüey, en Palma Soriano donde viven. Se hacen llamar Cimarrón* y pronto van a cumplir 10 años.
Antes de actuar en una de las actividades del Festival del Caribe de este año 2013, estaban escondidos detrás de un bohío que levantaron los artistas del proyecto ENNEGRO**, maquillándose, pintándose de blanco las caras y ajustándose los collares. Uno de ellos, el que se hace llamar Negro Fino, tiene un interesante bastón de madera oscura con el que marca sus poemas y líricas.
El más fuerte, Negro-Negro, se presenta como nieto de haitianos, por eso se convierte tan fácil en una especie de espíritu escapa’o que se fugó del monte. El silencioso se llama Negro de la Fe. Tres veces negros. “Como sus raíces”, responden.
Les gusta sorprender al público, se rodean de velas encendidas, buscan tocadores de batá, alzan una vasija repleta de raíces y ron, echan humo de tabacos al cielo, y hasta montan un bembé o una ceremonia vudú.
Y la gente se detiene a escuchar, son cimarrones que viven en el interior, son de provincia, orientales, del monte, a más de 30 kilómetros de la capital del Caribe. Para poder actuar en Santiago tienen que pernoctar en casas de sus amigos, y por supuesto, de alguna manera compartir sus cuotas de comidas.
Andan siempre con una grabadora para coger sus improvisaciones, dicen, porque son muy intuitivos. Y le agregan el sonido de los batá, a veces del grupo Me Congó, porque han crecido con ellos como amigos. Así buscan su beat, el golpe, bum bum, el tempo de un tema. En otras ocasiones lo hacen desde su propio rapeo o dramatización: “¡Queeé cará!, como mimo yo vine, como yo menvoy, ¡hum!... é pa´ vé si utede tan cuento deso, ¡nojotro!, toitico, toitico... étamo rodea ‘o... ¡hum! y no ‘é de agua… toavia étamo siendo perseguió, ¡cará! ¡eeeeeeé veddá! qué nojotro entoavía etamó econdío de lo perro jibaro y de lo mayorá…”
Algunos reconocen en su tema “Sueño”, las alusiones a Malcom X, a Big Pun, al cacique Hatuey, Tupac Shakur, pero cuando rapean en “Vengo”: “yo vengo del palenque como José Dolores, capitán de cimarrones”, es difícil para muchos identificar con precisión dónde está eso o quién es ese hombre. Todos corean “drume negrita, que yo voy a comprá vieja cunita”, porque el poema es conocido, como mismo repiten en coro un repetido estribillo: “todos los santos bajan de la loma, a bailar bembé, todos los orishas vienen de lo alto, a bailar bembé”.
Si antes aprovechaban y en los Festivales del Caribe se colaban en las guaguas, en los albergues o en los comedores, con la delegación del grupo portador de la Comunidad de Barrancas para poder actuar, ahora los invitan porque ya no son muchachos, ahora son artistas jóvenes conocidos.
Aprovechan el tiempo que les deja esa primera actuación y terminan con un tema en el que hablan del “basurero de autoestima y de sentimientos”, y en la que piden “arrímate al basurero de las glorias perdidas”. Y se despiden dejando escapar un grito: “¡Ten cuida´o negrón!”
*Cimarrón: Proyecto hip hop radicado en Palma Soriano, Santiago de Cuba. Sus integrantes son Yasbel Enrique Rivera Garbey/Negro Fino es, director del grupo y líder. También es el máximo creador de la poética. Maikel Despaigne González/ Negro-Negro, líder y oponente de Negro Fino. Y Jans Antonio Chaveco Reyes/Negro de la Fe, en el coro.
**Taller y Proyecto Sociocultural-Medioambiental radicado en Palma Soriano, defensor de la cultura cubano-haitiana.
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