La música me llega a través de la guitarra
22 de julio de 2013
Alejandro Ricardo Serrano Iglesias, pero se hace llamar Ale, tiene 22 años y reside en Altahabana, desde que tiene memoria. Es un chico normal, alto, mestizo, como buen cubano “Para mí la amistad es muy importante y siempre estoy ahí para mis amigos. Soy muy detallista y me enfrento con valor a cada situación de la vida”. Estudió Ingeniería Metalúrgica en la CUJAE, y quien sabe si hubiese sido un buen ingeniero, pero lo dejó todo por lo que realmente le motivaba: la buena música.
“En estos momentos pertenezco al grupo In Vivo, donde hacemos trova fusión principalmente, aunque incursionamos en géneros como reggae, bolero, funky, entre otras. Lo cierto es que nuestra música la realizamos con esfuerzo y corazón, de allí salió el tema que más gusta: ‘Pantomima’”.
La música le llega a los 16 años a través de la guitarra. “Esta ha sido mi mayor dificultad: me di cuenta de mi vocación ya adolescente, y en este mundo lo mejor es empezar de pequeño, pues se tienen más oportunidades, esencialmente al acceder a una formación académica. Por otro lado adquirir los instrumentos no resulta fácil”.
Todo eso se queda atrás cuando entra en el escenario. “Siento un placer de otro mundo. He tenido momentos muy emotivos en mi vida, conocer a mi novia Yunet, con quién llevo cuatro años, o ver nuevamente a mis padres en su regreso de la misión en Venezuela después de estar separados por más de un año, y junto a estas situaciones de veras importantes, se encuentra tocar con Buena Fe, pues admiro mucho lo que hacen y pienso que es una de las bandas cubanas más representativas actualmente”.
Los otros integrantes del grupo empiezan a sumarse a la entrevista. “Lo siento, es que teníamos ensayo” -me dice. ¿Dónde se presentan? “Desgraciadamente no tenemos nada programado. Anteriormente me presenté en el Bertolt Brecht, en la Plaza de Humor en San Antonio de los Baños, en el Pepito’s Bar, en el preuniversitario vocacional Humboldt 7, en el Diablo Tun Tún”.
“Debo agradecerle a personalidades como los integrantes del grupo Buena Fe por permitirme tocar junto a ellos, pero sin dudas a mis padres Tania Iglesias y Raimundo Iriarte, que me han apoyado en todo momento. También a esa persona con quién comparto a diario, mi novia Yunet Arteaga, y a toda su familia, que me han ayudado mucho con esta situación de tener a mis padres lejos. Y no pueden faltar mis amigos, tanto los de la banda como los de afuera, ya que ellos son los verdaderos culpables de que sea un buen guitarrista actualmente”.
“En este mundo realmente pasa de todo -me recuerda sonriendo-. Una vez, cuando me encontraba en otro grupo, nos invitaron a tocar en Alquízar, para llegar allí fuimos desde San Antonio de los Baños con los instrumentos al hombro: batería, dos guitarras y un bajo. Cuando llegamos a Alquízar se suspendió la actividad y nos pasamos toda la noche buscando un nuevo lugar para tocar, por fin nos dimos por vencidos a las dos de la mañana y nos quedamos hasta el otro día en un parque. Por suerte a la siguiente semana tocamos con el grupo Buena Fe en el municipio Güira de Melena”.
“Tengo varias aspiraciones, la principal es formar una familia con mi actual novia, pero en cuanto a la música más que nada, triunfar con lo que hago, pues no me veo haciendo otra cosa que no sea tocar la guitarra”.
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22 de julio de 2013
Alejandro Ricardo Serrano Iglesias, pero se hace llamar Ale, tiene 22 años y reside en Altahabana, desde que tiene memoria. Es un chico normal, alto, mestizo, como buen cubano “Para mí la amistad es muy importante y siempre estoy ahí para mis amigos. Soy muy detallista y me enfrento con valor a cada situación de la vida”. Estudió Ingeniería Metalúrgica en la CUJAE, y quien sabe si hubiese sido un buen ingeniero, pero lo dejó todo por lo que realmente le motivaba: la buena música.
“En estos momentos pertenezco al grupo In Vivo, donde hacemos trova fusión principalmente, aunque incursionamos en géneros como reggae, bolero, funky, entre otras. Lo cierto es que nuestra música la realizamos con esfuerzo y corazón, de allí salió el tema que más gusta: ‘Pantomima’”.
La música le llega a los 16 años a través de la guitarra. “Esta ha sido mi mayor dificultad: me di cuenta de mi vocación ya adolescente, y en este mundo lo mejor es empezar de pequeño, pues se tienen más oportunidades, esencialmente al acceder a una formación académica. Por otro lado adquirir los instrumentos no resulta fácil”.
Todo eso se queda atrás cuando entra en el escenario. “Siento un placer de otro mundo. He tenido momentos muy emotivos en mi vida, conocer a mi novia Yunet, con quién llevo cuatro años, o ver nuevamente a mis padres en su regreso de la misión en Venezuela después de estar separados por más de un año, y junto a estas situaciones de veras importantes, se encuentra tocar con Buena Fe, pues admiro mucho lo que hacen y pienso que es una de las bandas cubanas más representativas actualmente”.
Los otros integrantes del grupo empiezan a sumarse a la entrevista. “Lo siento, es que teníamos ensayo” -me dice. ¿Dónde se presentan? “Desgraciadamente no tenemos nada programado. Anteriormente me presenté en el Bertolt Brecht, en la Plaza de Humor en San Antonio de los Baños, en el Pepito’s Bar, en el preuniversitario vocacional Humboldt 7, en el Diablo Tun Tún”.
“Debo agradecerle a personalidades como los integrantes del grupo Buena Fe por permitirme tocar junto a ellos, pero sin dudas a mis padres Tania Iglesias y Raimundo Iriarte, que me han apoyado en todo momento. También a esa persona con quién comparto a diario, mi novia Yunet Arteaga, y a toda su familia, que me han ayudado mucho con esta situación de tener a mis padres lejos. Y no pueden faltar mis amigos, tanto los de la banda como los de afuera, ya que ellos son los verdaderos culpables de que sea un buen guitarrista actualmente”.
“En este mundo realmente pasa de todo -me recuerda sonriendo-. Una vez, cuando me encontraba en otro grupo, nos invitaron a tocar en Alquízar, para llegar allí fuimos desde San Antonio de los Baños con los instrumentos al hombro: batería, dos guitarras y un bajo. Cuando llegamos a Alquízar se suspendió la actividad y nos pasamos toda la noche buscando un nuevo lugar para tocar, por fin nos dimos por vencidos a las dos de la mañana y nos quedamos hasta el otro día en un parque. Por suerte a la siguiente semana tocamos con el grupo Buena Fe en el municipio Güira de Melena”.
“Tengo varias aspiraciones, la principal es formar una familia con mi actual novia, pero en cuanto a la música más que nada, triunfar con lo que hago, pues no me veo haciendo otra cosa que no sea tocar la guitarra”.
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