Luz, imagen y sonido para la juventud
2 de septiembre de 2013
Un novedoso proyecto bautizado con el nombre de Play irrumpió en el mundo de la cultura alternativa camagüeyana, para conjugar las inquietudes de jóvenes realizadores de productos audiovisuales y los DJ de la música electrónica.
Sus integrantes fundaron la peña TKLA Punto CU, que va más allá de ampliar las opciones de quienes prefieren bailar al ritmo de la música techno, porque suma los tradicionales juegos de luces y la posibilidad de disfrutar de imágenes con temas de gran aceptación juvenil.
La sincronía entre música electrónica y materiales audiovisuales trasmite un discurso único que complementa el espectáculo, más allá de lo meramente rítmico. Permite la unión entre Disc y Video Jockeys, defiende los gustos y tendencias musicales de las nuevas generaciones, sin apartarse del contexto social en el que ambas manifestaciones se conciben.
El artista Armando Fuentes Perna, coordinador de TKLA Punto CU, afirmó que el proyecto tiene el fin de defender la identidad y la cultura camagüeyanas con el discurso de la imagen y la música, pero sobre todo reflejar la verdadera realidad de los jóvenes del territorio sin positivismos banales, ni triunfalismos, para intentar alejarlos del letargo y la inactividad con el reto de contribuir a la construcción de una vida mejor.
La proyección de TKLA Punto CU se centra en un discurso que conserva la belleza de las imágenes reales, aunque a veces no sean tan agraciadas, pero igual de comunicativas y admirables por el mensaje que trasmiten, y las más diversas variantes de interpretación que sugieren.
“Intentamos mirar y cuestionar a la ciudad –afirmó Fuentes– desde sus parques, barrios, callejones, plazas, desde la gente que los llena y los recorre, oxigena, y renueva cada día. Tratamos de llevar a la práctica la máxima de que lo bello y lo feo depende de cómo se descifre por el público y del discurso que a través de esa belleza o fealdad se trasmita”.
El proyecto Play defiende las nuevas tendencias artísticas electrónicas surgidas en las década de los 80 del pasado siglo, en varias regiones del mundo, y que llegaron tarde a Cuba, pero cuentan con representantes de reconocida calidad.
Durante las presentaciones iniciales sólo un reducido número de personas asistieron, pero el impacto de la obra fue tal, que el primero de los locales quedó chico, y las funciones se repetían hasta dos veces al día los fines de semana.
“Podemos hacer muchas cosas interesantes y beneficiosas para ayudar a la juventud a encauzar su visión del mundo que los rodea, y darles mejores posibilidades de expresión artística y social”, asegura Armando Fuentes Perna.
“Lamentablemente –señala– no contamos con la comprensión y la ayuda de todos, y muchos menos de quienes tienen en sus manos la posibilidad de brindarnos apoyo material. Lo que hacemos es a costa de grandes sacrificios y limitaciones, pero aprendimos a sortear las dificultades, y entre los integrantes de la peña y algunos entusiastas, la colaboración es tan estrecha que en ocasiones hemos perdido parte de nuestro escaso patrimonio personal, en aras de que avance el proyecto y podamos montar nuevos espectáculos”.
El proyecto Play y la peña TKLA Punto CU constituyen una verdadera novedad dentro del universo cultural alternativo cubano que llegó para quedarse y triunfar, porque marchan con la vida misma y aportan luz, imagen y sonido para una juventud necesitada de nuevos horizontes, estilos y formas de expresión.
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2 de septiembre de 2013
Un novedoso proyecto bautizado con el nombre de Play irrumpió en el mundo de la cultura alternativa camagüeyana, para conjugar las inquietudes de jóvenes realizadores de productos audiovisuales y los DJ de la música electrónica.
Sus integrantes fundaron la peña TKLA Punto CU, que va más allá de ampliar las opciones de quienes prefieren bailar al ritmo de la música techno, porque suma los tradicionales juegos de luces y la posibilidad de disfrutar de imágenes con temas de gran aceptación juvenil.
La sincronía entre música electrónica y materiales audiovisuales trasmite un discurso único que complementa el espectáculo, más allá de lo meramente rítmico. Permite la unión entre Disc y Video Jockeys, defiende los gustos y tendencias musicales de las nuevas generaciones, sin apartarse del contexto social en el que ambas manifestaciones se conciben.
El artista Armando Fuentes Perna, coordinador de TKLA Punto CU, afirmó que el proyecto tiene el fin de defender la identidad y la cultura camagüeyanas con el discurso de la imagen y la música, pero sobre todo reflejar la verdadera realidad de los jóvenes del territorio sin positivismos banales, ni triunfalismos, para intentar alejarlos del letargo y la inactividad con el reto de contribuir a la construcción de una vida mejor.
La proyección de TKLA Punto CU se centra en un discurso que conserva la belleza de las imágenes reales, aunque a veces no sean tan agraciadas, pero igual de comunicativas y admirables por el mensaje que trasmiten, y las más diversas variantes de interpretación que sugieren.
“Intentamos mirar y cuestionar a la ciudad –afirmó Fuentes– desde sus parques, barrios, callejones, plazas, desde la gente que los llena y los recorre, oxigena, y renueva cada día. Tratamos de llevar a la práctica la máxima de que lo bello y lo feo depende de cómo se descifre por el público y del discurso que a través de esa belleza o fealdad se trasmita”.
El proyecto Play defiende las nuevas tendencias artísticas electrónicas surgidas en las década de los 80 del pasado siglo, en varias regiones del mundo, y que llegaron tarde a Cuba, pero cuentan con representantes de reconocida calidad.
Durante las presentaciones iniciales sólo un reducido número de personas asistieron, pero el impacto de la obra fue tal, que el primero de los locales quedó chico, y las funciones se repetían hasta dos veces al día los fines de semana.
“Podemos hacer muchas cosas interesantes y beneficiosas para ayudar a la juventud a encauzar su visión del mundo que los rodea, y darles mejores posibilidades de expresión artística y social”, asegura Armando Fuentes Perna.
“Lamentablemente –señala– no contamos con la comprensión y la ayuda de todos, y muchos menos de quienes tienen en sus manos la posibilidad de brindarnos apoyo material. Lo que hacemos es a costa de grandes sacrificios y limitaciones, pero aprendimos a sortear las dificultades, y entre los integrantes de la peña y algunos entusiastas, la colaboración es tan estrecha que en ocasiones hemos perdido parte de nuestro escaso patrimonio personal, en aras de que avance el proyecto y podamos montar nuevos espectáculos”.
El proyecto Play y la peña TKLA Punto CU constituyen una verdadera novedad dentro del universo cultural alternativo cubano que llegó para quedarse y triunfar, porque marchan con la vida misma y aportan luz, imagen y sonido para una juventud necesitada de nuevos horizontes, estilos y formas de expresión.
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