Los que tocan en los barrios están fuera del hit parade...



Lugar: 116 y 7ma, Romerillo

Horario: 6:00 p.m. a 8:00 p.m.

Actuaron (por orden de presentación):
• Vecinos de Romerillo
• Etian Brebajeman desde Alamar Micro X
• Yimi Konclaze desde La Habana Vieja
• David (Bboy), ganador de “Creciendo con el hip hop”

Sucesos: El pretexto de la actividad fue el Día de la Cultura Nacional. Se instalaron equipos de amplificación de sonido y un escenario. Inicialmente se presentaron seis vecinos con las conocidas y re-conocidas canciones de la “década prodigiosa” (¿por qué le llamarán así?) y un reggaetón de “la propia inspiración” de unos de los audaces. Seguidamente, subió Etian Brebajeman con su canción “Momentos duros” del CD Poco bonito (primer lugar en el concurso de “Puños Arriba”), con reflexiones sobre los errores de su vida, secundada por un reggae y una samba para la relajación y el entretenimiento. Brebajeman nunca abandona un escenario sin una descarga de freestyle y eso que siempre advierte que improvisar es complicado. En esta ocasión usó el nombre de los asistentes como “pie forzado” para dar riendas sueltas a sus rimas y tejer historias donde los chicos del Romerillo eran los protagonistas.

Yimi Konclaze cerró la jornada intercalando mensajes instructivos y explicaciones sobre lo que significa el “invisibilizado rap cubano”. Tampoco faltó otro de los elementos del hip hop: el Bboy, con David, el niño que ganara este año la edición de “Creciendo en el hip hop”. Se podía leer en el rostro de los participantes el agradecimiento por aquel momento tan diferente de lo que se encuentra en la radio y la televisión.

Etian, Brebajeman: “La oportunidad que tiene todo tipo de artista, no solamente raperos, sino todo tipo de artistas de que su obra se vea representada en los barrios con actividades como esta no es más que justamente, la que se necesita para tener un mundo lo más cercano a la paz y a la relajación humana, producto a que actividades de hip hop o de géneros musicales los cuales contienen un mensaje sano a la hora de utilizar la palabra, no más que a quien escucha le dan un crecimiento y al que va a divertirse un entretenimiento. Si en mis textos yo abordo temáticas que engendren cierta violencia en las masas, no estoy haciendo música curativa. Es lo que pasa con el rap que yo hago y con el de la mayoría de las personas que hacen rap en Cuba, o sea, a mi manera de ver las cosas”.

“El hip hop en Cuba no tiene promoción. Es un irrespeto. El hip hop no sólo habla de política, hay muchos temas que aborda, pero no nos promocionan porque no queremos dar a cambio la libertad de decir lo que pensamos”.

“¿Qué sería un mundo sin música? ¿Te imaginas un mundo sin sonido? Qué aburrido, qué triste, qué irreal… la música crea un balance. Hay muchas canciones que aconsejan, que te dan un camino a seguir…a veces, te montas en un carro, taxi, generalmente ‘almendrón’, y la primera canción que sueltan es romántica y ahí está tal vez tu problema, la canción secunda la acción del hombre, por eso es que justamente, más canciones menos guerras”.

Las peñas son lugares de socialización, momento para construir, o reparar, vaya a saber, el interior y el exterior del individuo, o sea, al hombre y su sociedad. No se puede separar al hombre de su contexto, las acciones son mutuas, pero se puede enriquecer para dotar al humano de sus capacidades más poéticas y sublimes: pensar y amar. Lo que se escuchó esa noche de domingo “no está pegado en ningún lado, pero da qué hablar y qué hacer”.

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