I.A. más que música
11 de noviembre de 2013
Un grupo que se hace llamar I.A., siglas que corresponden a los nombres de Iliam Suárez y Alexis de la O, puede al menos, despertar la atención de aquellos que tengan un mínimo de curiosidad musical. Ciertamente detrás de ese nombre aparecen dos jóvenes artistas que han sabido ingeniárselas para reivindicar con imaginación y talento, una concepción estilística según la cual las corrientes más lúdicas de la música electrónica no están separadas de su costado más inteligente, innovador y reflexivo.
Sácame del Atari es el título del primer disco de este dúo, grabado de forma independiente. En un principio, quizás, su nombre pudiera parecer ingenuo para algunos cuyos ojos estén poco acostumbrados a las propuestas más transgresoras, más sugerentes y más experimentales de la cultura dance. Sin embargo, la estructura de las canciones que entregaron en un concierto del grupo, se encargó de confirmar que Iliam y Alexis se toman las cosas bien en serio.
Los textos, adaptados al presente, giran en torno a la órbita de la relación del ser humano con las nuevas tecnologías y los medios de difusión, hablan de forma satírica de la frivolidad de ciertos productos de la cultura de masas, y se decantan por una lectura del arte como instrumento para generar nuevas miradas sobre el mundo y modificarlo. En cualquier caso, se trata de una propuesta emotiva y lúcida que es capaz por igual de mandar a bailar a todo el público, que de mover el pensamiento de manera sagaz hacia asuntos realmente trascendentes.
Existen, y me atrevo a decirlo, algunos detractores de la música hecha con el soporte de las nuevas tecnologías que prefieren estamparle los adjetivos de simplista y vacía, sin embargo esta agrupación dinamita estos juicios apostando por retomar la llamada canción pensante desde la música electrónica. Este disco promueve una intención reflexiva, pues como dicen sus integrantes hay que decir más, con mayor economía de palabras y esta es la apuesta de I.A. No buscan reincidir sobre lo mismo, sino que impactan su entorno inmediato, el nuestro y el de su música, con nuevas lecturas estéticas en las que cada aporte visual o sonoro estimula el análisis.
Sus conciertos son espectáculos tan sugerentes donde convergen la creatividad sonora de ambos jóvenes, el arte performático, y un sagaz diseño visual y luminotécnico que impacta sobre superficies poco habituales. En la entrevista me comentaron que hay público que en sus presentaciones no pueden resistirse y se las ingenian para liberar energía, a la vez que sus neuronas se ponen a pensar a tal ritmo.
Al referirse a una de sus canciones, se decidieron por “Imperio del Light” y al preguntarles cuál es ese imperio me respondieron: “este imperio es la imitación de la cúpula comercial de la música internacional que se expande y que se pone en práctica en Cuba de un modo muy ingenuo y carente de las estrategias que justamente convierten a estas “estrellas” mundiales en iconos, y que en Cuba sólo representan la parte más banal y menos interesante de este fenómeno. Desprovistos de imaginación y conocimientos de arte en general, nuestras pobres ‘estrellas’ se quedan sólo con la reproducción del mundo fetichista, vano y vacío, y perpetúan los clichés, los estereotipos y el mal gusto”.
Esta agrupación además de sus creaciones musicales, ha incursionado en el audiovisual. Su debut como grupo fue en los Premios Lucas 2010, al ser nominados con su video clip “En la Radio”, en las categorías de Artista Novel, Efectos Visuales y Video de Música Electrónica. También con su clip “Electrobacteriando”, que de hecho fue un encargo propuesto por la Sociedad Física de Cuba acerca de un logro científico, volvieron a ser nominados en Efectos Visuales y Video de Música Electrónica. Este año cuentan con un clip llamado “Life Itself is Pure Disco” que se incluye dentro de su segundo disco grabado I.A. vs. I.A. Remezclas Sácame del Atari, y álbum candidato como Mejor de Música Electrónica en el Cubadisco 2013.
En su currículo cuenta que son parte del Comité Organizativo del Festival Proelectrónica, organizado por la Institución Cultural PM Records, especialmente por su Oficina Proposiciones y que cuenta además, con una amplia red de colaboración. Por eso al referirse a este magno evento de la música electrónica hecha en Cuba, no temen defenderlo, pues es como una vitrina donde se muestra lo mejor de la música electrónica creada por cubanos. De hecho anunciaron la celebración de su cuarta edición en abril del venidero año.
Les hago una última pregunta: ¿cómo definen a I.A.? Y respondieron con gran seguridad: “I.A. es un batido de tuercas. Te gusta o no te gusta, no hay términos medios. Tampoco hay ningún escándalo en eso, porque I.A. más que música es un modo de expresión. No catártico, porque ya supera la protesta adolescente. Y mira, lo lindo del proyecto es que no lo hacen jóvenes que quieren pegarse, sino adultos artistas que buscan comunicarse. No quisiéramos espantar, pero ‘sería un buen intento’, se burlan en serio. A fin de cuentas I.A. nació de vendavales, ‘exactamente en medio de un ciclón’”.
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11 de noviembre de 2013
Un grupo que se hace llamar I.A., siglas que corresponden a los nombres de Iliam Suárez y Alexis de la O, puede al menos, despertar la atención de aquellos que tengan un mínimo de curiosidad musical. Ciertamente detrás de ese nombre aparecen dos jóvenes artistas que han sabido ingeniárselas para reivindicar con imaginación y talento, una concepción estilística según la cual las corrientes más lúdicas de la música electrónica no están separadas de su costado más inteligente, innovador y reflexivo.
Sácame del Atari es el título del primer disco de este dúo, grabado de forma independiente. En un principio, quizás, su nombre pudiera parecer ingenuo para algunos cuyos ojos estén poco acostumbrados a las propuestas más transgresoras, más sugerentes y más experimentales de la cultura dance. Sin embargo, la estructura de las canciones que entregaron en un concierto del grupo, se encargó de confirmar que Iliam y Alexis se toman las cosas bien en serio.
Los textos, adaptados al presente, giran en torno a la órbita de la relación del ser humano con las nuevas tecnologías y los medios de difusión, hablan de forma satírica de la frivolidad de ciertos productos de la cultura de masas, y se decantan por una lectura del arte como instrumento para generar nuevas miradas sobre el mundo y modificarlo. En cualquier caso, se trata de una propuesta emotiva y lúcida que es capaz por igual de mandar a bailar a todo el público, que de mover el pensamiento de manera sagaz hacia asuntos realmente trascendentes.
Existen, y me atrevo a decirlo, algunos detractores de la música hecha con el soporte de las nuevas tecnologías que prefieren estamparle los adjetivos de simplista y vacía, sin embargo esta agrupación dinamita estos juicios apostando por retomar la llamada canción pensante desde la música electrónica. Este disco promueve una intención reflexiva, pues como dicen sus integrantes hay que decir más, con mayor economía de palabras y esta es la apuesta de I.A. No buscan reincidir sobre lo mismo, sino que impactan su entorno inmediato, el nuestro y el de su música, con nuevas lecturas estéticas en las que cada aporte visual o sonoro estimula el análisis.
Sus conciertos son espectáculos tan sugerentes donde convergen la creatividad sonora de ambos jóvenes, el arte performático, y un sagaz diseño visual y luminotécnico que impacta sobre superficies poco habituales. En la entrevista me comentaron que hay público que en sus presentaciones no pueden resistirse y se las ingenian para liberar energía, a la vez que sus neuronas se ponen a pensar a tal ritmo.
Al referirse a una de sus canciones, se decidieron por “Imperio del Light” y al preguntarles cuál es ese imperio me respondieron: “este imperio es la imitación de la cúpula comercial de la música internacional que se expande y que se pone en práctica en Cuba de un modo muy ingenuo y carente de las estrategias que justamente convierten a estas “estrellas” mundiales en iconos, y que en Cuba sólo representan la parte más banal y menos interesante de este fenómeno. Desprovistos de imaginación y conocimientos de arte en general, nuestras pobres ‘estrellas’ se quedan sólo con la reproducción del mundo fetichista, vano y vacío, y perpetúan los clichés, los estereotipos y el mal gusto”.
Esta agrupación además de sus creaciones musicales, ha incursionado en el audiovisual. Su debut como grupo fue en los Premios Lucas 2010, al ser nominados con su video clip “En la Radio”, en las categorías de Artista Novel, Efectos Visuales y Video de Música Electrónica. También con su clip “Electrobacteriando”, que de hecho fue un encargo propuesto por la Sociedad Física de Cuba acerca de un logro científico, volvieron a ser nominados en Efectos Visuales y Video de Música Electrónica. Este año cuentan con un clip llamado “Life Itself is Pure Disco” que se incluye dentro de su segundo disco grabado I.A. vs. I.A. Remezclas Sácame del Atari, y álbum candidato como Mejor de Música Electrónica en el Cubadisco 2013.
En su currículo cuenta que son parte del Comité Organizativo del Festival Proelectrónica, organizado por la Institución Cultural PM Records, especialmente por su Oficina Proposiciones y que cuenta además, con una amplia red de colaboración. Por eso al referirse a este magno evento de la música electrónica hecha en Cuba, no temen defenderlo, pues es como una vitrina donde se muestra lo mejor de la música electrónica creada por cubanos. De hecho anunciaron la celebración de su cuarta edición en abril del venidero año.
Les hago una última pregunta: ¿cómo definen a I.A.? Y respondieron con gran seguridad: “I.A. es un batido de tuercas. Te gusta o no te gusta, no hay términos medios. Tampoco hay ningún escándalo en eso, porque I.A. más que música es un modo de expresión. No catártico, porque ya supera la protesta adolescente. Y mira, lo lindo del proyecto es que no lo hacen jóvenes que quieren pegarse, sino adultos artistas que buscan comunicarse. No quisiéramos espantar, pero ‘sería un buen intento’, se burlan en serio. A fin de cuentas I.A. nació de vendavales, ‘exactamente en medio de un ciclón’”.
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