Video underground para música underground



El mes de mayo promete para el audiovisual underground, si es que así puede llamársele. Porque el espacio del que hablo no es para todos, es para los realizadores “de la calle”, aquellos que también hacen vídeo clip y otros audiovisuales desde lo que llaman “el anonimato” (paradójico, porque siempre sale con el nombre de quien lo realiza por desconocido, poco familiar o nada mediático que nos suene).

En fin, Vídeo Non Pro es un espacio que nació en Las Tunas el pasado 2013, y ha dado el chance a quienes carecen de formación profesional o estudios académicos del medio audiovisual, para que muestren lo que casi siempre se rechaza en otros escenarios. Es la convocatoria a reunir a quienes con bajos recursos, y movidos por el empirismo y la vocación de productores de vídeo, han hecho sus “pininos” con la tecnología convencional o emergente (dígase cámara fotográfica digital o teléfonos celulares).

Convertido en un conglomerado de expresiones diversas, el Vídeo Non Pro sacó a la luz lo más latente del hip hop relegado o marginado, el cual buscando ser escuchado de cualquier modo y perpetuado en algún formato duradero, llegó como vídeo hasta esos realizadores de lo suburbano.

O sea que no es sólo para cineastas frustrados, también la música encuentra refugio en la representación audiovisual, aun cuando esté condicionada por los códigos de quienes graban y editan dichos videos.

No es mucho el tiempo que se dedica al evento en sí porque bien se sabe de todo el entorno de racionalidad con que se mueven actualmente las actividades en Cuba, cuestiones económicas ineludibles. Pero el encuentro es importante porque aporta mucho y propone una agenda interesante de tan sólo un día. Se le llama Jornada y encierra en el programa: muestra, debate y conferencia especializada.

Participan jóvenes de los ocho municipios de la provincia que viajan hasta la cabecera provincial y se reúnen en la Casa del Joven Creador. En realidad, este es el final del proceso, pues con anterioridad se reciben las obras de acuerdo con la fecha de admisión reflejada en la convocatoria del evento. Realizadores profesionales pertenecientes a la Sección de Audiovisuales de la Asociación Hermanos Saíz valoran la calidad de los materiales y organizan una muestra que se lleva a debate.

Para este año, los organizadores aspiran a contar con más participantes tanto en el espacio teórico final, como en la propia entrega de obras. Y es que además de los “videastas”, los músicos aprovechan la promoción.

Es válido referir, incluso llamó la atención en la pasada primera edición, que varios de los vídeos clip pertenecían a raperos ya conocidos en escenarios más prominentes y hasta sindicados en la Agencia Cubana de Rap. Pero ello no cambia la realidad de que su música no es considerada de la élite, representan en su mayoría el dolor cotidiano que no se quiere encarar, o denuncia lo que muchos prefieren dejar bajo el tapete, además de que a muchos realizadores profesionales del vídeo clip les resulta grotesca esta conjugación de letra - ritmo - vivencia.

Sin dudas, Vídeo Non Pro, no apunta a lo más exquisito de la creación audiovisual, pero da la oportunidad de moldear o refinar el empirismo con que se interpreta, por ejemplo, en los casos anteriormente señalados, la música con las imágenes, símbolos y efectos más adecuados.

Desde cualquier rincón con una computadora se puede trabajar la fuerza del vídeo. Y si es para mostrar lo que nadie más se atreve o lo que algunos marginan culturalmente, es preciso hacerse de herramientas eficaces que sólo se obtienen con superación y conocimientos, dos cosas que también se ofrecen gratis en la Jornada tunera Vídeo Non Pro.

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