La Nena, rap sin licencia
25 de agosto de 2014
La carpa estaba abarrotada de gente. La euforia avizoraba la apertura de un evento importante. Las luces y la nitidez del audio le daban comienzo a un espectáculo poco acostumbrado por los seguidores del hip hop cubano. Comenzaba la Batalla de los Gallos, del año 2008, el suceso más esperado por los cultores del freestyle.
Los competidores iniciaron su performance, cada contrincante oía el pie forzado y en pocos minutos las rimas fueron protagonistas de un verdadero show. En el primer round, una mujer sorprendió al público, la única mujer en competencia. Ella fue Emma Elena Driggs Zamora, La Nena. A cuatro años de ese suceso, PMU tiene el placer de entrevistar a una de las voces femeninas del hip hop cubano.
Tenía poco más de 12 años cuando el sonido del bombo y la caja llegaron a su vida. Sus amigos de entonces formaban parte de la cultura hip hop y sin propósito le mostraron el camino para descubrir lo que más tarde ella llamaría con mucho sentido de pertenencia: mi género. Y es que lo hizo suyo desde que supo de su existencia, primero como público, más tarde y poco a poco, como artista.
Adoptó La Nena como nombre artístico debido a su apariencia infantil, era literalmente, La Nena del hip hop cubano. Su primer escenario fue La Casa de Cultura de Centro Habana y fue ahí donde pasó sus primeras pruebas de fuego. “El primer grupo donde canté fue Oro Negro, el segundo el Clan de Barriada donde yo era la única mujer, era un reto pero me gustaba la idea. Más tarde fundé Dos por Encima, una mezcla especial de flow underground y estilo R&B”.
Dos por Encima fue un paso superior en su carrera. Comenzó a presentarse en diferentes clubes como el Karachi, y en peñas establecidas como la de Los Aldeanos, en Club Barbaram. Y aunque el proyecto no pudo avanzar pues a las dos integrantes la maternidad les tocó la puerta a la par, fueron buenos tiempos para subir un escalón y traspasar la frontera de un hobby a un compromiso.
Pero la llegada del nuevo miembro de la familia no fue excusa para abandonar la música, sólo fue un receso para alimentar la creatividad, crecer como persona y un pretexto para otra canción. “El hip hop es una parte importante de mi vida, es un género donde liberas tus expresiones, lo que no te sale directamente tú lo puedes decir rimado. Muchas etapas de mi vida yo las he hecho en un tema, son hechos reales. Por ejemplo, cuando di a luz estuve ingresada, todos los días yo escribía algo, lo que pasé desde el momento en que llegué al hospital hasta el momento que tuve a mi hijo en brazos, el tema se llama ‘Nació mi hijo’".
En su aval cuenta con un fonograma realizado en el año 2011, Un solo pensamiento. Ahora le ocupa la grabación de su segundo disco, Nueva Pincelada, del cual ya están listos seis temas, la mitad de dicha producción discográfica.
Quienes la conocemos sabemos que tiene un timbre que la hace peculiar. Basta ver una vez su performance para saber que aptitud e imagen son sus cualidades distintivas. “Una de las cosas que me diferencia es mi metal de voz grueso, con eso sobra para decir: ella es La Nena. Además, intento marcar la diferencia a la hora de vestirme, de peinarme y sugerir en vivo. Mi sello son trenzas y tacones”.
No sólo su imagen y flow la distinguen, es fiel representante y exponente femenina de la compleja habilidad de pensar y rimar a la vez. “No recuerdo exactamente cuando sucedió. Al principio tenía problemas en sincronizar con la música, me di cuenta que podía rapear en el 4x4, eso es una habilidad más difícil que rimar en un minuto, me fui especializando y es lo que uso para hacer freestyle”.
Navegar en las dificultades es cuestión inherente para la mayoría de los mortales, mucho más si eres mujer, negra y rapera. Sentir que aras en el mar, ver como “las amistades”" se alejan porque no estás haciendo algo “apropiado para una dama”; perder más dinero del que ganas; ir con tu hijo en brazos a un estudio de grabación para no desaprovechar la oportunidad; vivir las desventajas de ser Eva y no Adán; experimentar cambios inesperados en la presión arterial porque todo, absolutamente todo lo que necesitas para tu promoción cuesta dinero y definitivamente no lo tienes. Aun así la esperanza de ser profesional la mantiene en pie. Entre altas y bajas, La Nena persiste porque se siente merecedora de un reconocimiento mayor y porque además, no lo puede negar, lleva el hip hop en la sangre.
Comentarios Dejar un comentario
25 de agosto de 2014
La carpa estaba abarrotada de gente. La euforia avizoraba la apertura de un evento importante. Las luces y la nitidez del audio le daban comienzo a un espectáculo poco acostumbrado por los seguidores del hip hop cubano. Comenzaba la Batalla de los Gallos, del año 2008, el suceso más esperado por los cultores del freestyle.
Los competidores iniciaron su performance, cada contrincante oía el pie forzado y en pocos minutos las rimas fueron protagonistas de un verdadero show. En el primer round, una mujer sorprendió al público, la única mujer en competencia. Ella fue Emma Elena Driggs Zamora, La Nena. A cuatro años de ese suceso, PMU tiene el placer de entrevistar a una de las voces femeninas del hip hop cubano.
Tenía poco más de 12 años cuando el sonido del bombo y la caja llegaron a su vida. Sus amigos de entonces formaban parte de la cultura hip hop y sin propósito le mostraron el camino para descubrir lo que más tarde ella llamaría con mucho sentido de pertenencia: mi género. Y es que lo hizo suyo desde que supo de su existencia, primero como público, más tarde y poco a poco, como artista.
Adoptó La Nena como nombre artístico debido a su apariencia infantil, era literalmente, La Nena del hip hop cubano. Su primer escenario fue La Casa de Cultura de Centro Habana y fue ahí donde pasó sus primeras pruebas de fuego. “El primer grupo donde canté fue Oro Negro, el segundo el Clan de Barriada donde yo era la única mujer, era un reto pero me gustaba la idea. Más tarde fundé Dos por Encima, una mezcla especial de flow underground y estilo R&B”.
Dos por Encima fue un paso superior en su carrera. Comenzó a presentarse en diferentes clubes como el Karachi, y en peñas establecidas como la de Los Aldeanos, en Club Barbaram. Y aunque el proyecto no pudo avanzar pues a las dos integrantes la maternidad les tocó la puerta a la par, fueron buenos tiempos para subir un escalón y traspasar la frontera de un hobby a un compromiso.
Pero la llegada del nuevo miembro de la familia no fue excusa para abandonar la música, sólo fue un receso para alimentar la creatividad, crecer como persona y un pretexto para otra canción. “El hip hop es una parte importante de mi vida, es un género donde liberas tus expresiones, lo que no te sale directamente tú lo puedes decir rimado. Muchas etapas de mi vida yo las he hecho en un tema, son hechos reales. Por ejemplo, cuando di a luz estuve ingresada, todos los días yo escribía algo, lo que pasé desde el momento en que llegué al hospital hasta el momento que tuve a mi hijo en brazos, el tema se llama ‘Nació mi hijo’".
En su aval cuenta con un fonograma realizado en el año 2011, Un solo pensamiento. Ahora le ocupa la grabación de su segundo disco, Nueva Pincelada, del cual ya están listos seis temas, la mitad de dicha producción discográfica.
Quienes la conocemos sabemos que tiene un timbre que la hace peculiar. Basta ver una vez su performance para saber que aptitud e imagen son sus cualidades distintivas. “Una de las cosas que me diferencia es mi metal de voz grueso, con eso sobra para decir: ella es La Nena. Además, intento marcar la diferencia a la hora de vestirme, de peinarme y sugerir en vivo. Mi sello son trenzas y tacones”.
No sólo su imagen y flow la distinguen, es fiel representante y exponente femenina de la compleja habilidad de pensar y rimar a la vez. “No recuerdo exactamente cuando sucedió. Al principio tenía problemas en sincronizar con la música, me di cuenta que podía rapear en el 4x4, eso es una habilidad más difícil que rimar en un minuto, me fui especializando y es lo que uso para hacer freestyle”.
Navegar en las dificultades es cuestión inherente para la mayoría de los mortales, mucho más si eres mujer, negra y rapera. Sentir que aras en el mar, ver como “las amistades”" se alejan porque no estás haciendo algo “apropiado para una dama”; perder más dinero del que ganas; ir con tu hijo en brazos a un estudio de grabación para no desaprovechar la oportunidad; vivir las desventajas de ser Eva y no Adán; experimentar cambios inesperados en la presión arterial porque todo, absolutamente todo lo que necesitas para tu promoción cuesta dinero y definitivamente no lo tienes. Aun así la esperanza de ser profesional la mantiene en pie. Entre altas y bajas, La Nena persiste porque se siente merecedora de un reconocimiento mayor y porque además, no lo puede negar, lleva el hip hop en la sangre.
Comentarios Dejar un comentario
- No hay comentarios en este momento.