Gran espectáculo en el salón Minerva de Cienfuegos



El salón Minerva, más que un espacio físico, ha sido por más de una centuria, un club que aglutina a numerosas personas interesadas en la cultura. Cuando se fundó en 1899, esta asociación formaba parte de las llamadas “sociedades de color” y su interés fundamental era insertar a los negros en la sociedad cubana de la época, darles instrucción general y eliminar poco a poco las arraigadas manifestaciones de discriminación que persistían en la Isla. Con la creación de una escuela y el desarrollo de espectáculos culturales aglutinó a ese estamento social hasta 1959.

Desde ese año hasta la fecha, el club Minerva de Cienfuegos ha subsistido de manera bastante independiente a las entidades estatales. Hoy reúne en su seno a blancos y negros. Los asociados eligen a su directiva y planifican sus actividades, así como también preparan sus espectáculos. Uno de sus objetivos fundamentales es entretener y conservar las tradiciones culturales de los cubanos, fundamentalmente las musicales. Por eso cada viernes, los asiduos del lugar disfrutan de las noches del bolero que como género musical ha evolucionado y se ha enriquecido en Cuba desde mediados del siglo XIX hasta la fecha.

Justamente en una de estas noches especiales PMU se acercó hasta allí y pudimos observar un verdadero espectáculo. El pasado 10 de octubre el salón se llenó de personas, la mayoría con más de cuarenta años de edad, que fueron a disfrutar de un evento preparado por ellos mismos y que tuvo como anfitriona a la solista cienfueguera Kirenia Pérez.

Entre los numerosos invitados pudimos disfrutar de artistas profesionales y otros aficionados del patio. Jorge Gutiérrez anunciado como “La Voz Antológica del Bolero”, Carlos Fernández “El Señor del Bolero”, Humberto Pérez conocido como “El Caballero del Bolero”, Yoandy Puerta y Fran Patrije compartieron escenario con artistas aficionados como Bárbara García Estrada, Zamora y Jesús Martínez “Pascualito”.

Como es tradición en la ejecución del género, los principales instrumentos con que se acompañaron fueron la guitarra y la percusión menor, con algunas intervenciones del piano. “El Guajiro del Laberinto” como todos llaman a Dagoberto Quesada, tuvo a su cargo las cuerdas. Mientras Ramoncito y Luis de Armas estaban en la percusión y el piano, respectivamente. Kirenia por su parte además de regalarnos su bella voz, se encargó de presentar a cada uno de sus invitados y también aprovechó la ocasión para cantar con su mamá Bárbara, quien de hecho fue la principal organizadora del evento.

De la conversación con Bárbara sobre la actividad salió esta breve entrevista que reproducimos.

PMU: ¿Cuál fue el objetivo del evento y por qué lo preparó precisamente usted?

Bárbara: Bueno, lo primero es que nadie puede querer más que yo que el trabajo de mi hija salga a la luz. Ella es una artista que aunque es joven, tiene ya varios años de experiencia en la música y pese a ello las entidades culturales de la provincia no prestan apoyo a su desarrollo artístico. De ahí que hice la propuesta en el salón Minerva y los asociados estuvieron de acuerdo y así empezó todo.

PMU: ¿El evento tuvo alguna promoción en la televisión o la radio? ¿Cómo hizo para convidar a tantos músicos y espectadores?

Bárbara: La verdad es que la promoción funcionó de adentro hacia afuera. Los miembros de Minerva invitamos a nuestros amigos y familiares, y ellos a su vez a otros amigos. A los músicos los contacté personalmente, por lo menos a la mayoría de ellos. Otros llegaron por medio de otros asociados y del administrador del local que ocupamos, Orlando Cabrera Moreira, que siempre se compromete con las actividades que realizamos. La verdad, te digo, no vinieron todos los que invité, pero los más importantes estuvieron.

Acerca de los resultados de la noche Bárbara manifestó su satisfacción con el desarrollo del espectáculo y refirió que en esos momentos ya estaban preparando un nuevo evento relacionado también con el bolero. Se trata de la Peña Elena Burke, que tiene alrededor de 15 años de existencia y justamente el 24 de octubre tendrá lugar “por todo lo alto”. Explicaba además, que ya están haciendo la colecta entre los asociados para invitar a algún bolerista habanero que amenice la noche.

Lo mejor de todo esto es que cualquiera puede acercarse a este lugar y disfrutar de todas las actividades que preparan con entrada gratis. Por eso el esfuerzo que realizan los miembros de Minerva para mantener el espacio con que cuentan y el rescate que emprenden de las tradiciones musicales cubanas, es considerado por quien suscribe, como una iniciativa además de bella, digna de admirar.

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