Sueños grandes, grandes conquistas
3 de noviembre de 2014
Son muchos los grupos cubanos que entregan la música popular bailable para el disfrute, como muchos son los ejemplos a citar de estos expertos artistas que se ganaron un espacio en los hogares y tradiciones cubanas. Pero antes de darse a conocer, construyeron primero un largo camino parecido al que sueña El Musicalísimo, quien busca incursionar en el sabroso mundo de la timba, “ritmo que salpica hasta llenar de alegría”. Inspirado por estrellas como La Charanga Habanera y Los Cuatro, Hansel Crespo afirma: “Musicalísimo porque lo veo como una palabra que encierra el concepto de experimentar la buena combinación entre letra, ritmo e instrumentos”.
Con sólo 18 años, su figura y su físico son los encargados de proyectarlo: bien alto y de cuerpo atlético y aunque aparentemente insensible, su forma de ser no lo acredita. Se considera muy alegre, tímido en ocasiones, desprecia la hipocresía y piensa es un compositor beneficiado por el buen gusto, amplia imaginación y sobre todo, por la capacidad de escribir canciones una y otra vez sin agotar su creatividad. “En la secundaria empecé a componer con un matiz que variaba entre las baladas-pop y la buena timba. Luego pasé un tiempo sin escribir absolutamente nada, hasta volver a retomarlo definitivamente con una clara decisión: componer como solista este increíble ritmo que es la timba cubana”.
Aunque es el único autor de sus canciones, muestra preferencias por algunas de estas, evidenciado en la selección que realiza en sus espectáculos cuando las escoge de manera muy detallada. “Siempre en un show de corta duración están conmigo mis ‘especiales’. Así llamo al conjunto de mis tres canciones preferidas por sus características: ‘Yo no te pido’, ‘No dudes’ y ‘Yo te canto’. Se destacan porque son las letras que más cariño contienen, son hechos, historias con las que muchos se pueden identificar, sobre todo ‘No dudes’. Esta es algo personal”.
En su historia sentimental rondan estas situaciones: malas experiencias, bonitos recuerdos, marcas irrepetibles, resumidos escenarios de su vida que elige darlos a conocer en elegante forma de comunicación que es la música. “Conocí a la persona que todos esperamos, pasaron cosas típicas, no precisamente las que nos hacen feliz y actualmente soy soltero. Siento que no debo prestarle tanta atención a este interés personal, porque realmente en lo que llega esa chica, mi compromiso es con la música”.
Los más célebres músicos cuentan reveses para cantar, es de las cosas que los convierte en humanos: no ser perfectos. Así mismo este muchacho ha encontrado estorbos e inconvenientes que ha sabido sortear en las distintas etapas de su vida cuando “un concierto no salga bien tiene sus consecuencias, pero por el contrario deberíamos premiar a todos los que hacen posible estos encuentros, no echarse a correr con el premio. Luego de lograr presentaciones sin papeles y encontrar personas dispuestas a ayudar, que tu propio representante te abandone y que encima se quede con todo, ya saben de lo que dan ganas”.
“Pero las malas experiencias se apartan y se trazan nuevas metas”. Algo para admirar de este triunfador que con colaboraciones especiales es apoyado constantemente, tanto que se anima cada día en crear y defender sueños como: “pertenecer a la Charanga, Los Van Van u otra orquesta emblemática, sería una escuela. Y por supuesto, lo más importante es que mi música trascienda”.
Con pasos firmes agradece el apoyo de los conocidos y de quienes a lo largo de su carrera, le apoyarán. “A mis contrarios les deseo larga vida sólo para que me vean disfrutar la mía”.
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3 de noviembre de 2014
Son muchos los grupos cubanos que entregan la música popular bailable para el disfrute, como muchos son los ejemplos a citar de estos expertos artistas que se ganaron un espacio en los hogares y tradiciones cubanas. Pero antes de darse a conocer, construyeron primero un largo camino parecido al que sueña El Musicalísimo, quien busca incursionar en el sabroso mundo de la timba, “ritmo que salpica hasta llenar de alegría”. Inspirado por estrellas como La Charanga Habanera y Los Cuatro, Hansel Crespo afirma: “Musicalísimo porque lo veo como una palabra que encierra el concepto de experimentar la buena combinación entre letra, ritmo e instrumentos”.
Con sólo 18 años, su figura y su físico son los encargados de proyectarlo: bien alto y de cuerpo atlético y aunque aparentemente insensible, su forma de ser no lo acredita. Se considera muy alegre, tímido en ocasiones, desprecia la hipocresía y piensa es un compositor beneficiado por el buen gusto, amplia imaginación y sobre todo, por la capacidad de escribir canciones una y otra vez sin agotar su creatividad. “En la secundaria empecé a componer con un matiz que variaba entre las baladas-pop y la buena timba. Luego pasé un tiempo sin escribir absolutamente nada, hasta volver a retomarlo definitivamente con una clara decisión: componer como solista este increíble ritmo que es la timba cubana”.
Aunque es el único autor de sus canciones, muestra preferencias por algunas de estas, evidenciado en la selección que realiza en sus espectáculos cuando las escoge de manera muy detallada. “Siempre en un show de corta duración están conmigo mis ‘especiales’. Así llamo al conjunto de mis tres canciones preferidas por sus características: ‘Yo no te pido’, ‘No dudes’ y ‘Yo te canto’. Se destacan porque son las letras que más cariño contienen, son hechos, historias con las que muchos se pueden identificar, sobre todo ‘No dudes’. Esta es algo personal”.
En su historia sentimental rondan estas situaciones: malas experiencias, bonitos recuerdos, marcas irrepetibles, resumidos escenarios de su vida que elige darlos a conocer en elegante forma de comunicación que es la música. “Conocí a la persona que todos esperamos, pasaron cosas típicas, no precisamente las que nos hacen feliz y actualmente soy soltero. Siento que no debo prestarle tanta atención a este interés personal, porque realmente en lo que llega esa chica, mi compromiso es con la música”.
Los más célebres músicos cuentan reveses para cantar, es de las cosas que los convierte en humanos: no ser perfectos. Así mismo este muchacho ha encontrado estorbos e inconvenientes que ha sabido sortear en las distintas etapas de su vida cuando “un concierto no salga bien tiene sus consecuencias, pero por el contrario deberíamos premiar a todos los que hacen posible estos encuentros, no echarse a correr con el premio. Luego de lograr presentaciones sin papeles y encontrar personas dispuestas a ayudar, que tu propio representante te abandone y que encima se quede con todo, ya saben de lo que dan ganas”.
“Pero las malas experiencias se apartan y se trazan nuevas metas”. Algo para admirar de este triunfador que con colaboraciones especiales es apoyado constantemente, tanto que se anima cada día en crear y defender sueños como: “pertenecer a la Charanga, Los Van Van u otra orquesta emblemática, sería una escuela. Y por supuesto, lo más importante es que mi música trascienda”.
Con pasos firmes agradece el apoyo de los conocidos y de quienes a lo largo de su carrera, le apoyarán. “A mis contrarios les deseo larga vida sólo para que me vean disfrutar la mía”.
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