Movimiento desaparece cuando por fortuna existe PMU (Parte II)
10 de noviembre de 2014
Como pudimos constatar en la primera parte de este artículo, la revista Movimiento fue única de su tipo en nuestro país por su condición de estar dedicada específicamente al hip hop como cultura. PMU es también una revista única en su tipo, que no exige parámetro burocrático alguno para dar a conocer la cultura musical que se mueve en Cuba, y que alberga todo tipo de género y artistas underground haciéndolos sentir como en casa.
Géneros tan olvidados por casi todos los medios de comunicación masiva como el reggae, estilos tan censurados como el hip hop, artistas tan reprimidos y prohibidos como Los Aldeanos y Raudel Escuadrón Patriota, son promocionados en PMU y para el mundo entero sin más requisito que la condición de ser underground.
PMU es una revista que desde su fundación en diciembre de 2012, viene recogiendo no sólo el quehacer del arte underground en la Isla, sino las aspiraciones de los artistas, sus planes futuros, su recorrido musical, sus trabajos discográficos, así como la promoción de las presentaciones de los mismos en espacios públicos.
La escena musical underground para PMU “se refiere al movimiento artístico que abarca cualquier género musical realizado por artistas independientes, que no cuentan con apoyo de organizaciones culturales, ni de la industria comercial musical, ni de ningún medio estatal y en el que los artistas le dan más importancia a la expresión libre de la creatividad, que al interés de producir composiciones típicas de la música comercial”.
PMU es además, “un nuevo proyecto internacional que promueve y publicita las más recientes actividades y creaciones de los artistas locales cubanos de la escena musical underground. Un proyecto socio-cultural-independiente, empeñado en otorgarles un espacio nacional e internacional a los creadores y artistas musicales underground de la isla”.
No responde a ningún objetivo político, idea oficial o intento de comercializar la obra de artistas cubanos. Es objetiva y funcionalmente, un grupo de promotores de la obra de artistas que no tienen respaldo para producir su obra con una inmensa necesidad de divulgar sus trabajos.
PMU como revista digital está abierta al servicio de todos los géneros y estilos musicales. No pide a los artistas remuneración alguna por el servicio promocional que presta.
Desde sus inicios y desde el punto de vista musical, PMU ha sostenido un relato crítico sobre temas que se consideran aún heréticos en Cuba, como el racismo, el machismo, la homofobia, la marginalidad, la situación sociocultural, el civismo o la hipocresía política, el amor en todas sus versiones presentes en las interpretaciones de los artistas y que han sido revelados de manera periodística y profesional a través de cada uno de sus colaboradores.
Con la desaparición de la revista Movimiento, PMU se convierte en el mejor aliado del músico y la música underground cubanos, una de las aspiraciones de nuestra revista y nos alegramos de ello. Pero ojo, no se vea PMU como el sustituto de Movimiento, sino como una vía de promoción llena de posibilidades, como un cálido refugio para todos aquellos creadores que defienden al arte por encima de todo, como otro amparo que los estimule a continuar creando.
Lamentamos profundamente el final tan absurdo de una revista que al igual que PMU, tenía entre sus objetivos mostrar el quehacer de un género underground como el hip hop, tan pisoteado y frenado en la Isla por sus características de escasos recursos productivos, críticas sociales y grupos resistentes. Sólo me resta tomarme la atribución y el derecho de darle la bienvenida raperos de Cuba, a PMU.
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10 de noviembre de 2014
Como pudimos constatar en la primera parte de este artículo, la revista Movimiento fue única de su tipo en nuestro país por su condición de estar dedicada específicamente al hip hop como cultura. PMU es también una revista única en su tipo, que no exige parámetro burocrático alguno para dar a conocer la cultura musical que se mueve en Cuba, y que alberga todo tipo de género y artistas underground haciéndolos sentir como en casa.
Géneros tan olvidados por casi todos los medios de comunicación masiva como el reggae, estilos tan censurados como el hip hop, artistas tan reprimidos y prohibidos como Los Aldeanos y Raudel Escuadrón Patriota, son promocionados en PMU y para el mundo entero sin más requisito que la condición de ser underground.
PMU es una revista que desde su fundación en diciembre de 2012, viene recogiendo no sólo el quehacer del arte underground en la Isla, sino las aspiraciones de los artistas, sus planes futuros, su recorrido musical, sus trabajos discográficos, así como la promoción de las presentaciones de los mismos en espacios públicos.
La escena musical underground para PMU “se refiere al movimiento artístico que abarca cualquier género musical realizado por artistas independientes, que no cuentan con apoyo de organizaciones culturales, ni de la industria comercial musical, ni de ningún medio estatal y en el que los artistas le dan más importancia a la expresión libre de la creatividad, que al interés de producir composiciones típicas de la música comercial”.
PMU es además, “un nuevo proyecto internacional que promueve y publicita las más recientes actividades y creaciones de los artistas locales cubanos de la escena musical underground. Un proyecto socio-cultural-independiente, empeñado en otorgarles un espacio nacional e internacional a los creadores y artistas musicales underground de la isla”.
No responde a ningún objetivo político, idea oficial o intento de comercializar la obra de artistas cubanos. Es objetiva y funcionalmente, un grupo de promotores de la obra de artistas que no tienen respaldo para producir su obra con una inmensa necesidad de divulgar sus trabajos.
PMU como revista digital está abierta al servicio de todos los géneros y estilos musicales. No pide a los artistas remuneración alguna por el servicio promocional que presta.
Desde sus inicios y desde el punto de vista musical, PMU ha sostenido un relato crítico sobre temas que se consideran aún heréticos en Cuba, como el racismo, el machismo, la homofobia, la marginalidad, la situación sociocultural, el civismo o la hipocresía política, el amor en todas sus versiones presentes en las interpretaciones de los artistas y que han sido revelados de manera periodística y profesional a través de cada uno de sus colaboradores.
Con la desaparición de la revista Movimiento, PMU se convierte en el mejor aliado del músico y la música underground cubanos, una de las aspiraciones de nuestra revista y nos alegramos de ello. Pero ojo, no se vea PMU como el sustituto de Movimiento, sino como una vía de promoción llena de posibilidades, como un cálido refugio para todos aquellos creadores que defienden al arte por encima de todo, como otro amparo que los estimule a continuar creando.
Lamentamos profundamente el final tan absurdo de una revista que al igual que PMU, tenía entre sus objetivos mostrar el quehacer de un género underground como el hip hop, tan pisoteado y frenado en la Isla por sus características de escasos recursos productivos, críticas sociales y grupos resistentes. Sólo me resta tomarme la atribución y el derecho de darle la bienvenida raperos de Cuba, a PMU.
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