Bakosó, una sonoridad diferente (Parte II)
2 de febrero de 2015
El fenómeno del bakosó no se limitó a fusionar primitivamente los elementos. Se fue popularizando como pólvora y en poco tiempo ya los productores musicales no estaban solos en la contienda. Como suele suceder con todo lo que pega fuerte y más en Santiago, poco a poco fue creciendo una avalancha de seguidores, cantantes, grupos de bailes estableciendo pasos específicos para cada tema, hasta una pequeña productora underground de vídeo llamada Área Verde Bakosó, dirigida por Sergio El Inca.
Y es precisamente en ese punto y por la creación de esta productora que este fenómeno adquiere el nombre de bakosó y sobre el significado de la palabra Sergio el Inca nos expresó: “Aunque no se tiene certeza del origen, es muy utilizada en un sector de la población santiaguera para referirse a la libertad del cuerpo y el espíritu, alegría, fiesta, jolgorio. Por eso le nombré así a los vídeos de este tipo de música, pues es una música muy alegre e invita a bailar todo el tiempo”.
“La circulación de estos videos apoyó a que la gente empezara a identificar el fenómeno, a conocer a los artistas y reafirmar el nombre”, continuó Sergio El Inca.
Otros de los exponentes de estilo musical es Ozkaro MC, un representante de la vieja escuela de hip hop santiaguero que hoy usa a su favor todos los elementos aprendidos por largos años en la dura tarea de hacer rap cubano.
“Llora como lloré yo” es uno de los hits de Ozkaro MC que más corean los santiagueros. Es un tema perfecto para entender el bakosó. Es un encuentro con sus raíces donde el sonido de la clave cubana es un aspecto fundamental.
A propósito del tema su autor nos comentó: “A mí se me ocurrió esto de la clave porque me di cuenta que todos los muchachos salen de las fiestas marcando la clave cubana y encima de esa clave van coreando cualquier tema, el que este ‘pegao’, ya sea bolero, salsa, disco, reggae. Utilice esa fórmula experimentando un sonido por aquí, otro por allá y salió. Y estoy contento porque con eso baila todo el mundo. Los más puros bailan su pasillo con un deje más de conga como si estuvieran arrollando porque ahí están los tambores y los más jóvenes bailan su estilo de kuduro atrevidamente, pero con elementos cubanos”.
Recientemente Ozkaro MC pudo realizar unos de sus sueños, grabar este tema con la Conga Santiaguera, en los estudios Siboney de la EGREM, de Santiago de Cuba.
A esa lista de soñadores y hacedores de nuestra cultura urbana se suman nombres como Los Sansibélicos, DJ Electro y DJ Lucky , son sólo algunos de los que trabajan duro para mantener la Cuba caribeña y cuya complejidad convida a vivir la experiencia a través de las vivencias de los protagonistas.
Uno de los antes mencionados, DJ Lucky, es un joven santiaguero productor de música urbana. Hace un tiempo se trasladó a La Habana trayendo consigo la idiosincrasia santiaguera, posicionándose como uno de los productores preferidos en la escena rapera y reguetonera de Cuba, y aportando un sello distintivo a las producciones del conocido estudio Zapata El Fido.
DJ Lucky alejado de su tierra natal, pero no su yo interno, actualmente está trabajando en la producción discográfica El Kudurazo. Una intención válida por graficar en un disco el impacto de este género que nos viene de la madre África y que al parecer, sólo Santiago lo siente.
Aún es muy pronto, falta mucho trabajo para que bakosó pueda penetrar el mainstream, pues el público cubano está adaptado a que las cosas buenas, lo que más vale y brilla, proviene de la capital y, lo que no entre en ese circuito: no funciona. De ahí que para conquistar las tierras del Rey Salomón se necesita de un entramado musical: productores musicales, sponsor, artistas, que por su fortaleza ganen “beat a beat” un espacio que pueda satisfacer al público nacional.
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2 de febrero de 2015
El fenómeno del bakosó no se limitó a fusionar primitivamente los elementos. Se fue popularizando como pólvora y en poco tiempo ya los productores musicales no estaban solos en la contienda. Como suele suceder con todo lo que pega fuerte y más en Santiago, poco a poco fue creciendo una avalancha de seguidores, cantantes, grupos de bailes estableciendo pasos específicos para cada tema, hasta una pequeña productora underground de vídeo llamada Área Verde Bakosó, dirigida por Sergio El Inca. Y es precisamente en ese punto y por la creación de esta productora que este fenómeno adquiere el nombre de bakosó y sobre el significado de la palabra Sergio el Inca nos expresó: “Aunque no se tiene certeza del origen, es muy utilizada en un sector de la población santiaguera para referirse a la libertad del cuerpo y el espíritu, alegría, fiesta, jolgorio. Por eso le nombré así a los vídeos de este tipo de música, pues es una música muy alegre e invita a bailar todo el tiempo”.
“La circulación de estos videos apoyó a que la gente empezara a identificar el fenómeno, a conocer a los artistas y reafirmar el nombre”, continuó Sergio El Inca.
Otros de los exponentes de estilo musical es Ozkaro MC, un representante de la vieja escuela de hip hop santiaguero que hoy usa a su favor todos los elementos aprendidos por largos años en la dura tarea de hacer rap cubano.
“Llora como lloré yo” es uno de los hits de Ozkaro MC que más corean los santiagueros. Es un tema perfecto para entender el bakosó. Es un encuentro con sus raíces donde el sonido de la clave cubana es un aspecto fundamental.
A propósito del tema su autor nos comentó: “A mí se me ocurrió esto de la clave porque me di cuenta que todos los muchachos salen de las fiestas marcando la clave cubana y encima de esa clave van coreando cualquier tema, el que este ‘pegao’, ya sea bolero, salsa, disco, reggae. Utilice esa fórmula experimentando un sonido por aquí, otro por allá y salió. Y estoy contento porque con eso baila todo el mundo. Los más puros bailan su pasillo con un deje más de conga como si estuvieran arrollando porque ahí están los tambores y los más jóvenes bailan su estilo de kuduro atrevidamente, pero con elementos cubanos”.
Recientemente Ozkaro MC pudo realizar unos de sus sueños, grabar este tema con la Conga Santiaguera, en los estudios Siboney de la EGREM, de Santiago de Cuba.
A esa lista de soñadores y hacedores de nuestra cultura urbana se suman nombres como Los Sansibélicos, DJ Electro y DJ Lucky , son sólo algunos de los que trabajan duro para mantener la Cuba caribeña y cuya complejidad convida a vivir la experiencia a través de las vivencias de los protagonistas.
Uno de los antes mencionados, DJ Lucky, es un joven santiaguero productor de música urbana. Hace un tiempo se trasladó a La Habana trayendo consigo la idiosincrasia santiaguera, posicionándose como uno de los productores preferidos en la escena rapera y reguetonera de Cuba, y aportando un sello distintivo a las producciones del conocido estudio Zapata El Fido.
DJ Lucky alejado de su tierra natal, pero no su yo interno, actualmente está trabajando en la producción discográfica El Kudurazo. Una intención válida por graficar en un disco el impacto de este género que nos viene de la madre África y que al parecer, sólo Santiago lo siente.
Aún es muy pronto, falta mucho trabajo para que bakosó pueda penetrar el mainstream, pues el público cubano está adaptado a que las cosas buenas, lo que más vale y brilla, proviene de la capital y, lo que no entre en ese circuito: no funciona. De ahí que para conquistar las tierras del Rey Salomón se necesita de un entramado musical: productores musicales, sponsor, artistas, que por su fortaleza ganen “beat a beat” un espacio que pueda satisfacer al público nacional.
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