¿DJ o no?



Cada vez que vemos a un DJ junto a todo su equipamiento: sus mezcladoras, platos, audífonos Beats muy de moda por estos días, en medio de un mar de personas que lo vitorean, coreando sus canciones, aplaudiendo cada mezcla, cada efecto, pensamos en lo bueno que sería estar ahí en una playa, discoteca o club. Posiblemente a muchos les guste imaginarse en algún vídeo clip de David Guetta, Afrojack o Skrillex, pero para una minoría el sueño es otro: estar en el lugar del DJ.

Ser DJ es una profesión que no sólo es divertida para aquellos que aman la música, es un oficio que necesita talento, oído musical, entrenamiento constante, estar al tanto de las tendencias internacionales y sobre todo, un equipamiento que no es para nada barato o fácil de adquirir en Cuba. Aún así, hay muchos que han logrado iniciarse en el mundo de los DJ, aunque la gran mayoría son sólo “pincha discos”, sí hay muchos que hacen el trabajo completo y crean sus propios temas musicales, como es el caso de DJ Jongy.

Como cualquier profesión, es común encontrar personas que no tuvieron más remedio que formar parte de ella porque no encuentran otra cosa mejor, pero los hay que han vivido con el sueño atorado hasta que encuentran las maneras de encausarlo para poder transmitir emociones a través de la música que tocan. Este es el caso de Oscar Pérez, un joven promotor cultural y músico que ha descubierto el modo y el lugar de desatar su talento como DJ.

Todo comenzó hace algunos años cuando surgió en Las Tunas un proyecto que muchos recuerdan por el nombre de “Por amor al arte”, y era un espacio para promocionar lo mejor y más actual de la música electrónica. Aquello que empezó como un hobby para algunos jóvenes artistas, músicos en su mayoría, se fue tornando serio y las secciones y propuestas de cada uno frente a la PC para pinchar la música de su preferencia, fueron tomando personalidad. Primeramente, una lista de reproducción en cualquier reproductor de Windows y después todos asumieron el Virtual DJ, programa para mezclar que usan hasta los más afamados DJ del momento. Con el tiempo fueron quedando pocos, muy pocos, y entre aquellos que se mantenían resaltaba Oscar quien había descubierto su gran pasión por el mundo de los disc jockey.

“Definitivamente desde ese momento fue que decidí que trataría por todos los medios no dejar de hacer eso que tanto me gustaba. No me importaba como, pero tenía que seguir. Cuando Raulín se fue hubo un período muerto en la peña de música electrónica, la gente se dispersó, pero logré encaminar todo de nuevo. Espero que se mantenga porque lo que hemos logrado es digno de admirar”. Estas fueron las palabras de este DJ sobre el tema.

Algún tiempo después, el concurrido espacio “Por amor al arte” desapareció junto a su principal promotor y patrocinador Raúl Garrido “Raulín”, cuando este viajó primero a España y luego a los Estados Unidos. Por tal motivo y con el fuerte sentimiento de no dejar perder el espacio y con él sus sueños, es que Oscar DJ Jongy decide crear el proyecto Esquinas, no sólo para amenizar las noches de los sábados del patio de la Casa del Joven Creador en Las Tunas, sino para propiciar asesoramiento y formación a todos aquellos jóvenes que decidieran unirse a su sueño.

“Hemos logrado traer DJ de Camagüey y Holguín para que den talleres en Las Tunas. Hoy contamos con un número importante de seguidores y colaboradores fieles que hacen posible la existencia del movimiento de DJ en Las Tunas. Hoy, algo muy importante para mí, es que tengo mi propia laptop, de manera que puedo organizar mis sesiones de música y mis temas con tiempo. Ya no tengo que pedir nada prestado y esto ha sido gracias a personas que comparten mis sueños y me apoyan”, comenta Oscar.

Es posible que DJ Jongy no domine la técnica de la mezcla a la perfección y muchas veces sólo se limite a pinchar un disco tras otro, pero sabe perfectamente cual es el próximo tema a poner dejando en un segundo plano la calidad de la mezcla, haciendo tan sorprendente la sesión que el público se olvida por un momento de la técnica o el descuadre si llega a darse el caso. De todas formas, el constante estudio y la práctica hacen al maestro y seguramente en algún momento sorprenderá al oyente bailador más exigente.

Atrás


Comentarios   Dejar un comentario
No hay comentarios en este momento.