Helgrind está para grandes cosas
23 de febrero de 2015
El metal europeo continúa inspirando a los músicos cubanos, particularmente el death metal melódico o sonido de Gotemburgo, como también se le conoce, y el viking metal. Una de las bandas que abrazó estos géneros es la capitalina Helgrind, pero con la particularidad de abordar exclusivamente la temática vikinga mediante relatos épicos, batallas, mitología y fantasías. Su música está fuertemente influenciada por las legendarias bandas Amon Amarth, Unleashed, Bathory y Falkenbach.
Su origen se remonta a tan sólo la idea de concebir una banda por parte de dos jóvenes capitalinos sin experiencia previa: Daniel López Lameiro (bajista) y Jordy Fuentes Serrano (guitarrista). Tal iniciativa evidencia una vez más que el querer hacer es una fuerza capaz de conseguirlo todo, porque con la adición de Ernesto Riol Betancourt (vocalista), Celia Rodríguez Luis (teclista) y Pablo Robbio Borrego (guitarra) se fraguó un colectivo que desde su mismo debut demostró ser competente. El único punto vulnerable era la ausencia de un sexto integrante que asumiera la batería porque es sabido que la percusión secuenciada no siempre juega bien su rol durante las actuaciones en directo.
Ese inconveniente se resolvió con el ingreso de Damián Tyr (baterista) y se completó una nómina que parece capacitada para dejar su impronta dentro del panorama metalero cubano. Destacar que tanto Pablo como Damián están aportado una cuota importante de seguridad y cohesión, ya que cuentan con la pericia adquirida durante su paso por la banda de black metal Abaddon. Desde entonces las expectativas han sido altas y el público espera impaciente la salida de un fonograma oficial.
Un asunto poco comprendido es lo referente al nombre de la banda ya que he encontrado personas que no le atribuyen ningún significado y se limitan a decir que es una invención. Debo decir que sólo en esto último tienen razón, ya que Helgrind se traduce como “Las Puertas de la Muerte”, pero en el idioma antiguo que inventó el distinguido escritor norteamericano Christopher Paolini para su saga fantástica de El Legado. Un mundo lleno de seres mágicos, dragones, elfos y humanos que guarda estrecha relación con la cultura nórdica que veneraban los vikingos. Por tal motivo el haber tomado su nombre de ahí fue una decisión acertada a mi modo de ver.
Otro asunto que debo aclarar es que la banda no hace puro viking metal como algunos creen y sí la combinación de death metal melódico y el viking metal que mencioné al inicio. El viking metal emplea tiempos relajados sin abandonar los blast beats característicos del black. Para que tengan una idea, deben darle una escucha a la última etapa de Bathory, Enlaved, Einherjer y Falkenbach. Sucede que bandas de la escudería del death metal como Amon Amarth y Unleashed, también abordan los tópicos vikingos, pero no por ello cambian de género.
Retomando lo concerniente a los fonogramas, creo prudente mencionar que la banda tiene canciones como para sacar un disco. Títulos como “Wins of War”, “The Throne of Bone and Ice”, “Time to Conquer”, “I Am my Fate”, “Forsaken” y “Profained by the Ligth of the Moon” atesoran buena calidad compositiva e interpretativa. Su música potente, melódica y majestuosa nos cautiva rápidamente, eso es irrefutable.
Si la banda mantiene una alineación estable y sigue trabajando como hasta ahora, no dudo que pase a formar parte de las abanderadas del metal underground nacional dentro de poco. Madurar lleva su tiempo, pero cuando hay buena cohesión y creatividad en un colectivo no se puede apostar menos que a la victoria. Personalmente creo que Helgrind está para grandes cosas.
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23 de febrero de 2015
El metal europeo continúa inspirando a los músicos cubanos, particularmente el death metal melódico o sonido de Gotemburgo, como también se le conoce, y el viking metal. Una de las bandas que abrazó estos géneros es la capitalina Helgrind, pero con la particularidad de abordar exclusivamente la temática vikinga mediante relatos épicos, batallas, mitología y fantasías. Su música está fuertemente influenciada por las legendarias bandas Amon Amarth, Unleashed, Bathory y Falkenbach. Su origen se remonta a tan sólo la idea de concebir una banda por parte de dos jóvenes capitalinos sin experiencia previa: Daniel López Lameiro (bajista) y Jordy Fuentes Serrano (guitarrista). Tal iniciativa evidencia una vez más que el querer hacer es una fuerza capaz de conseguirlo todo, porque con la adición de Ernesto Riol Betancourt (vocalista), Celia Rodríguez Luis (teclista) y Pablo Robbio Borrego (guitarra) se fraguó un colectivo que desde su mismo debut demostró ser competente. El único punto vulnerable era la ausencia de un sexto integrante que asumiera la batería porque es sabido que la percusión secuenciada no siempre juega bien su rol durante las actuaciones en directo.
Ese inconveniente se resolvió con el ingreso de Damián Tyr (baterista) y se completó una nómina que parece capacitada para dejar su impronta dentro del panorama metalero cubano. Destacar que tanto Pablo como Damián están aportado una cuota importante de seguridad y cohesión, ya que cuentan con la pericia adquirida durante su paso por la banda de black metal Abaddon. Desde entonces las expectativas han sido altas y el público espera impaciente la salida de un fonograma oficial.
Un asunto poco comprendido es lo referente al nombre de la banda ya que he encontrado personas que no le atribuyen ningún significado y se limitan a decir que es una invención. Debo decir que sólo en esto último tienen razón, ya que Helgrind se traduce como “Las Puertas de la Muerte”, pero en el idioma antiguo que inventó el distinguido escritor norteamericano Christopher Paolini para su saga fantástica de El Legado. Un mundo lleno de seres mágicos, dragones, elfos y humanos que guarda estrecha relación con la cultura nórdica que veneraban los vikingos. Por tal motivo el haber tomado su nombre de ahí fue una decisión acertada a mi modo de ver.
Otro asunto que debo aclarar es que la banda no hace puro viking metal como algunos creen y sí la combinación de death metal melódico y el viking metal que mencioné al inicio. El viking metal emplea tiempos relajados sin abandonar los blast beats característicos del black. Para que tengan una idea, deben darle una escucha a la última etapa de Bathory, Enlaved, Einherjer y Falkenbach. Sucede que bandas de la escudería del death metal como Amon Amarth y Unleashed, también abordan los tópicos vikingos, pero no por ello cambian de género.
Retomando lo concerniente a los fonogramas, creo prudente mencionar que la banda tiene canciones como para sacar un disco. Títulos como “Wins of War”, “The Throne of Bone and Ice”, “Time to Conquer”, “I Am my Fate”, “Forsaken” y “Profained by the Ligth of the Moon” atesoran buena calidad compositiva e interpretativa. Su música potente, melódica y majestuosa nos cautiva rápidamente, eso es irrefutable.
Si la banda mantiene una alineación estable y sigue trabajando como hasta ahora, no dudo que pase a formar parte de las abanderadas del metal underground nacional dentro de poco. Madurar lleva su tiempo, pero cuando hay buena cohesión y creatividad en un colectivo no se puede apostar menos que a la victoria. Personalmente creo que Helgrind está para grandes cosas.
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