La complejidad de las letras underground



Cierre del año 2014, la música underground cubana da un salto cuantitativo y ¿por qué no?, también cualitativo. Los grupos y solistas llamados independientes, tienden a marcar nuevas tendencias para los jóvenes y no tan jóvenes en una sociedad necesitada de esperanza.

Quedan atrás décadas dominadas/manipuladas por una referencia unipartidaria, se crean nuevas pautas musicales llenas de fe, esperanza y corazonadas. Grupos como Los Aldeanos hacen lo impensable: critican abiertamente al sistema político cubano “ sin pelos en la lengua” . Los jóvenes se atreven cada día más, ¿pero a cambio de qué?

Soy de los que piensa que más allá de criticar destructivamente, las críticas deben llevar una estrategia, una orientación, una idea. No se puede derribar un castillo con piedras pequeñas por muy valiente que sean los que las lanzan. Entonces, ¿por qué no hacer letras reflexivas orientadas a cualquier público con ansias de proyectar ideas independentistas?

Quisiera citar una frase de un viejo amigo que siempre dice: “ No es lo que tú dices, sino como lo dices” . Cuánta razón en estas sabias palabras, a veces creernos valientes nos ciega para proyectar ideas que pudieran tener un alcance mucho más amplio de lo esperado. No es lo mismo decir: “ Todo lo que haces es una basura, eres un HP” , a decir: “ Te estás equivocando, creo que debes reflexionar y no ser tan cruel con tus acciones” .

Echando a un lado la valentía, no puedo dejar de señalar la chabacanería, la falta de respeto, el lenguaje obsceno y mal elaborado que crean y marcan pautas en un pequeño público con ansias de sangre. Esto de cierta manera, impide llegar su mensaje a un público mucho más global y también con ansias de oír letras frescas, independentistas, atrevidas, pero al mismo tiempo, letras inteligentes y con cierta cordura que enmarcan una crítica menos destructiva y más constructiva, y ¿por qué no?, educativa.

Con este texto no quiero dejar de reconocer la valentía de estos pequeños grupos que han dado un giro radical en la forma de hacer música y de enmarcar criterios. Quisiera reconocer su heroicidad, pero no por ello sin dejar pasar por alto los errores garrafales que hacen hincapié total o parcial en su actual reconocimiento en la sociedad, en llegar a un público mucho más amplio y que sus ideas no queden perdidas en el olvido, ya que la esencia de su mensaje es importante. Porque, ¿qué logramos con gritar bruscamente a cuatro paredes lo que pensamos? Si con tacto e inteligencia podemos proyectar nuestras ideas en un horizonte mucho más amplio.

Cambiar conceptos, persuadir en la moda, hacer reflexionar sobre lo bien o mal hecho, argumentar la necesidad de cambiar lo que tenga que ser cambiado y sobre todo, poder llegar a cada rincón de nuestra ciudad/país con un mensaje atractivo, sinfónico y lleno de esperanza para aquellos que lo necesitan.

¿Complicado? ¿Engorroso? Quizás, pero ¿no creen que sería una buena alternativa?.

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