Así quiero morir



Adara Fonseca Montes de Oca es una chica común de Luyano, de esas que andan siempre en chancletas con muchos pulsos y demasiadas “gangarrias”. De las que lucen sus propias producciones, de las que compran la tela y elaboran su propio vestuario. Una chica sencilla, humilde, pero muy emprendedora y decidida. Una dulce joven rebelde de 22 años que trabaja como técnica de recursos humanos en una empresa financiera del turismo.

Al cumplir su vigésimo segundo año de vida, recién concluye el Servicio Social. Siempre ha vivido por su obra. Es una chica leída y muy bien instruida, de las que siempre anda con un bolso o mochila tejida y algún que otro libro le hace de compañero de viaje. Ama mucho la naturaleza y los espacios tranquilos. La música subida de decibeles para que ningún ruido exterior perturbe su paz interior. Esta chica es un crack, una poetisa envidiable: la Mozart de los poemas, la reencarnación de Coelho en el sexo opuesto.

PMU: ¿Cuéntanos como descubres tu talento?

Adara: Desde la primaria siempre llevaba conmigo una libreta de versos, me sabía todos y cada uno. Desde muy pequeña mis padres me compraban muchos libros y marcaba lo que más me gustaba. Mis amigos me buscaban para que les hiciera una carta o algo parecido a su enamorada/o. Siempre coleccionaba frases célebres y me encantaba corregirlas y adaptarlas a mi realidad. A los 16 años comencé a escribir mis preferidas en las paredes de mi cuarto.

PMU: ¿Cuándo empiezas a desarrollarlo en serio?

Adara: En el Técnico Medio ya tenía varios libros leídos, pero me leí por sexta ocasión el libro “Le Petit Prince” (El Pequeño Príncipe, traducido al español). Y me encarné muchísimo en las vivencias de aquel chico y a partir de ahí le di muchísima importancia a mis sueños. Me dije que sería más responsable para conmigo misma y que lucharía por encontrar mi propia verdad. He ahí justo cuando nace lo que soy hoy.

PMU: ¿Qué podrías contarnos de tu obra?

Adara: Es una obra totalmente desconocida, jamás nadie ha leído mis escritos. Debo tener un total de 60 y tantos escritos entre poemas, canciones, notas, cartas y reflexiones. Nunca me he planteado en mostrárselas a nadie, son totalmente mías y no tengo pensado publicarlas. Un amigo músico y poeta que está censurado, un día me dijo para publicarlo a través de otra amistad suya que vive en el exterior y es quien le publica sus artículos y documentos. Me negué rotundamente. Mi obra es mía y un día la haré pública, pero sólo seré yo quien lo haga, y lo haré a través de los medios tradicionales.

PMU: ¿Por qué tanta resistencia a la publicación?

Adara: Nadie jamás publicará mis cosas con su nombre. Me niego a formar parte de ningún aparato o control externo o interno. No tengo nada que ver con ningún sistema, me da igual el socialismo, el capitalismo o cualquiera… tantos ismos, y al final es la misma cosa. Mi obra va dedicada a aquellos que como yo han liberado sus sueños del filtro de censura del pensamiento, a aquellos que vuelan sin necesidad de alas.

PMU: ¿Cómo te ves en el futuro?

Adara: Seré una chica, no tan chica, rodeada de música y cuentos infantiles, de niños y libros. Quiero escribir aventuras y canciones para jóvenes-adolescentes y para otros no tan jóvenes. Estaré en muchas obras benéfica-sociales, me veo polinizando el porvenir, disipando mi obra… haciendo sueños, creando ilusiones… así quiero morir.

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