Criterios…



Actualmente en Cuba, los exponentes del hip hop underground se encuentran obligados a pasar por momentos difíciles y se pudiera decir, también desagradables. Sólo el hecho de no contar con los espacios suficientes para exponer el trabajo que hacen, le da mucho más valor a la labor de estos artistas, pero también debilita, cada vez más, el deseo que tienen de luchar por levantar su cultura.

En nuestro país, el rap underground ha tenido la necesidad de transitar por muchas etapas, como sucede con la mayoría de las cosas. La censura ha sido el principal catalizador de estos altibajos, pues ha provocado que cada vez sean menos los espacios para el disfrute de este género musical, o modo de vida como muchos le llaman. Otro factor fundamental ha sido la marcha de grandes raperos del país en busca de mejoras económicas y mayor libertad para dedicarse a su carrera.

Muchos afirman que el hip hop en la isla está por desaparecer, otros no apoyan este criterio y afirman en cualquier lugar y delante de quien sea que la cultura sigue viva y creciendo. En mi caso, me inclino por aquellos que apuestan por defender la cultura a toda costa, sin importar los obstáculos que siempre entorpecen el desarrollo y avance del género hip hop.

En la actualidad, los artistas que se dedican completamente a componer, cantar y defender el rap a tiempo completo son la minoría, y bien pudiera decirse que ninguno. Por lo general, los raperos cubanos no reciben ingresos por la música que hacen, ni por las actividades que realizan. Son muy pocos los artistas del género que son profesionales y menos aún los que logran cobrar por sus actuaciones. De este pequeño grupo, no creo que ninguno pueda vivir de su música, ya que la censura en los locales cada vez es mayor y hace difícil mantener una peña por largo tiempo.

Son muchos los que han tenido que optar por un cambio en su música tras la búsqueda de mejor remuneración y el incremento de locales para presentarse. El mayor ejemplo está en la gran cantidad de reguetoneros que hace algunos años eran defensores del hip hop. Aun así, pienso que los raperos de hoy deben seguir buscando alternativas para vencer esta batalla desigual que mantienen con las instituciones que rigen la cultura en Cuba. Bárbaro El Urbano Vargas es un ejemplo de búsqueda de nuevas opciones, su paso por espacios como El Delirio Habanero, el Brecht, El Diablo Tun Tun, el bar La Figura y otros, dan fe de ello. No obstante, lo que más valoro en el quehacer de este artista es que no ha cambiado su discurso, muy por el contrario, creo que cada vez se hace más fuerte.

Sea rap underground del fuerte, como el que hace Escuadrón Patriota, El Prófugo, El Padrino, Bárbaro El Urbano Vargas, La Alianza y otros, o rap con menos protesta y cito a Papa Goza, Carlitos P&P, Ruta 11, La Javá A3vida, Con100cia, todos son hip hop y defienden a su manera la permanencia de esta cultura en nuestros barrios.

Algunos se centran en los problemas sociales actuales, en el racismo, las desigualdades de todo tipo, y otros en el machismo y los derechos de la mujer. También muchos cuentan en las vivencias que tienen cada día en las calles, como las chismosas de los barrios, la canasta básica, y otros temas.

Pienso haber abarcado muchos de los criterios que logré recopilar de quienes siguen la propuesta que nos brinda el hip hop underground cubano. Espero sean conscientes de que cada persona tiene su propio criterio, pero lo importante es que a pesar de esto seguimos contando con reales exponentes y seguidores del rap underground cubano.

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