Raperos, opiniones, sueños y algo más
18 de mayo de 2015
La cobertura periodística de un evento como el recién finalizado Festival de Rap Trakean2, en la ciudad de Camagüey, deja a veces insatisfacciones profesionales debido a la premura de escribir las reseñas de presentaciones y otros hechos para entregar los materiales lo más rápido posible a los editores. Sin embargo, en la agenda quedan numerosos apuntes de encuentros casuales, conversaciones informales, y hasta a veces no tanto, de los reporteros con los artistas. Notas que al revisarlas no alcanzan para escribir una entrevista con todas las de la ley, pero que contienen elementos y opiniones valiosas de los participantes y que merecen se les dedique un espacio para compartir con los lectores.
Tal es el caso, por ejemplo, del rapero santiaguero Omar Planos Cordoví, quien aseguró a PMU que asume su participación cada año en el Trakean2 como un reto personal y profesional por la calidad de los artistas que participan en representación de todo el país.
A Planos le preocupa mucho “que los medios de difusión cubanos no le presten la atención que merece este género, aunque tienen las puertas abiertas para que estudien, investiguen de qué se trata este movimiento que es un árbol de profundas raíces. Quisiera que no nos miraran mal. El rap cubano, comprometido con nuestro tiempo, los invita a acercarse a nosotros”.
Por su parte, el camagüeyano Dj Omar considera que “la responsabilidad de que aún existan prejuicios no sólo recae en los medios. Increíblemente, nadie en Cuba hace nada para proteger al hip hop y la historia sigue por el mismo camino, pero los artistas trabajan, aunque no estén los espacios, ni la divulgación”.
“Ello provoca inestabilidad en no pocos artistas y hace que pierdan credibilidad y público, al que irrespetamos cuando por esas razones suspendemos las presentaciones. Muchos piensan que sin respaldo institucional estamos perdidos, pero seguimos haciendo música aunque nos falte promoción, información y difusión. De poco sirve que escribamos temas contemporáneos, que retraten lo que ocurre en el país, si no lo confrontamos con la gente”.
Michel Puerta Marrero, uno de los integrantes de la agrupación de rap Con100cia, de Ciego de Ávila, dijo: “es la segunda vez que asistimos y no pensamos dejar de hacerlo por la oportunidad de compartir experiencias con otros raperos de todo el país. Hemos aprendido a organizarnos y ya fundamos una peña, los últimos jueves de cada mes. Es un espacio que ayuda al crecimiento del movimiento underground en una provincia donde apenas era reconocido”.
“Este Festival también nos permite compararnos con otros y modificar para bien lo que hacemos. Ahora fusionamos reggae con ritmos cubanos y usamos algunos otros instrumentos musicales en temas que han tenido tremenda aceptación porque abordan sin adornos las realidades cotidianas como ‘La verdad se dice en cualquier lado’, que también da título al disco que estamos produciendo, e incluye otra canciones como ‘No se entiende’, ‘Espejuelos para Cupido’ y ‘Vamos a casarnos’, que abordan cuestiones sociales y llaman a la conciencia de la gente”.
También Reinier Morejón Hernández, MC El Prosa, de la provincia de Artemisa, aseguró hallarse como en familia y reconoció la importancia del Trakean2 para la unidad del movimiento underground, así como también su contribución a mantener líneas estables de trabajo y ser más profesionales.
“El rap cubano, -enfatiza El Prosa-, es el mejor en Iberoamérica por su fuerte contenido y por su poesía, que es la más hermosa. Sin embargo, las instituciones culturales no acaban de tomar en serio el arte que realizamos, a pesar de la calidad demostrada. Otra razón es que nosotros mismos nos hemos ido cerrando las puertas, porque perdimos de vista que en un país como el nuestro se debe hacer rap para todos. Es una arista que no tenemos en cuenta”.
En la séptima edición del Trakean2 brilló como nunca antes la presencia femenina con la participación de las capitalinas Yanay Mejías Hernández (La Fina) y Judit Moreno Alvarez (La Javá A3vida), quienes pusieron la pista supercaliente. Ellas desearon destacar su proyecto comunitario que recorre el país en busca de talentos femeninos para el rap y Yanay enfatizó, “voy por mis medios a las comunidades, a los lugares más recónditos. llevo libros para conformar una especie de bibliotecas ambulantes en las casas, organizamos conciertos, hacemos charlas sobre violencia de género, racismo, discriminación en general, y le damos la oportunidad a todos de expresarse y así, a veces encontramos nuevos talentos”.
Ambas coincidieron en afirmar que participar en un festival como el Trakean2 “convida a superarnos cada día y explorar los más diversos temas, aunque siempre tratamos de que cada presentación sea un espectáculo. Lo fundamental ahora es la unión entre los raperos y ponernos de acuerdo, es cierto que un artista triunfa en la misma medida que trabaje sin preocuparle las trabas, en que se esfuerce y entregue su arte con amor y profesionalidad. Sin embargo, ojalá que todas las instituciones de la cultura funcionaran a favor del rap”.
Ese es el sentir de los raperos cubanos, jóvenes que entregan arte comprometido con mucho amor, sin importar sacrificios ni esfuerzos en bien de una sociedad que lo agradece, aunque los supuestos pilares institucionales que deben sostener su cobija los ignoren.
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18 de mayo de 2015
La cobertura periodística de un evento como el recién finalizado Festival de Rap Trakean2, en la ciudad de Camagüey, deja a veces insatisfacciones profesionales debido a la premura de escribir las reseñas de presentaciones y otros hechos para entregar los materiales lo más rápido posible a los editores. Sin embargo, en la agenda quedan numerosos apuntes de encuentros casuales, conversaciones informales, y hasta a veces no tanto, de los reporteros con los artistas. Notas que al revisarlas no alcanzan para escribir una entrevista con todas las de la ley, pero que contienen elementos y opiniones valiosas de los participantes y que merecen se les dedique un espacio para compartir con los lectores. Tal es el caso, por ejemplo, del rapero santiaguero Omar Planos Cordoví, quien aseguró a PMU que asume su participación cada año en el Trakean2 como un reto personal y profesional por la calidad de los artistas que participan en representación de todo el país.
A Planos le preocupa mucho “que los medios de difusión cubanos no le presten la atención que merece este género, aunque tienen las puertas abiertas para que estudien, investiguen de qué se trata este movimiento que es un árbol de profundas raíces. Quisiera que no nos miraran mal. El rap cubano, comprometido con nuestro tiempo, los invita a acercarse a nosotros”.
Por su parte, el camagüeyano Dj Omar considera que “la responsabilidad de que aún existan prejuicios no sólo recae en los medios. Increíblemente, nadie en Cuba hace nada para proteger al hip hop y la historia sigue por el mismo camino, pero los artistas trabajan, aunque no estén los espacios, ni la divulgación”.
“Ello provoca inestabilidad en no pocos artistas y hace que pierdan credibilidad y público, al que irrespetamos cuando por esas razones suspendemos las presentaciones. Muchos piensan que sin respaldo institucional estamos perdidos, pero seguimos haciendo música aunque nos falte promoción, información y difusión. De poco sirve que escribamos temas contemporáneos, que retraten lo que ocurre en el país, si no lo confrontamos con la gente”.
Michel Puerta Marrero, uno de los integrantes de la agrupación de rap Con100cia, de Ciego de Ávila, dijo: “es la segunda vez que asistimos y no pensamos dejar de hacerlo por la oportunidad de compartir experiencias con otros raperos de todo el país. Hemos aprendido a organizarnos y ya fundamos una peña, los últimos jueves de cada mes. Es un espacio que ayuda al crecimiento del movimiento underground en una provincia donde apenas era reconocido”.
“Este Festival también nos permite compararnos con otros y modificar para bien lo que hacemos. Ahora fusionamos reggae con ritmos cubanos y usamos algunos otros instrumentos musicales en temas que han tenido tremenda aceptación porque abordan sin adornos las realidades cotidianas como ‘La verdad se dice en cualquier lado’, que también da título al disco que estamos produciendo, e incluye otra canciones como ‘No se entiende’, ‘Espejuelos para Cupido’ y ‘Vamos a casarnos’, que abordan cuestiones sociales y llaman a la conciencia de la gente”.
También Reinier Morejón Hernández, MC El Prosa, de la provincia de Artemisa, aseguró hallarse como en familia y reconoció la importancia del Trakean2 para la unidad del movimiento underground, así como también su contribución a mantener líneas estables de trabajo y ser más profesionales.
“El rap cubano, -enfatiza El Prosa-, es el mejor en Iberoamérica por su fuerte contenido y por su poesía, que es la más hermosa. Sin embargo, las instituciones culturales no acaban de tomar en serio el arte que realizamos, a pesar de la calidad demostrada. Otra razón es que nosotros mismos nos hemos ido cerrando las puertas, porque perdimos de vista que en un país como el nuestro se debe hacer rap para todos. Es una arista que no tenemos en cuenta”.
En la séptima edición del Trakean2 brilló como nunca antes la presencia femenina con la participación de las capitalinas Yanay Mejías Hernández (La Fina) y Judit Moreno Alvarez (La Javá A3vida), quienes pusieron la pista supercaliente. Ellas desearon destacar su proyecto comunitario que recorre el país en busca de talentos femeninos para el rap y Yanay enfatizó, “voy por mis medios a las comunidades, a los lugares más recónditos. llevo libros para conformar una especie de bibliotecas ambulantes en las casas, organizamos conciertos, hacemos charlas sobre violencia de género, racismo, discriminación en general, y le damos la oportunidad a todos de expresarse y así, a veces encontramos nuevos talentos”.
Ambas coincidieron en afirmar que participar en un festival como el Trakean2 “convida a superarnos cada día y explorar los más diversos temas, aunque siempre tratamos de que cada presentación sea un espectáculo. Lo fundamental ahora es la unión entre los raperos y ponernos de acuerdo, es cierto que un artista triunfa en la misma medida que trabaje sin preocuparle las trabas, en que se esfuerce y entregue su arte con amor y profesionalidad. Sin embargo, ojalá que todas las instituciones de la cultura funcionaran a favor del rap”.
Ese es el sentir de los raperos cubanos, jóvenes que entregan arte comprometido con mucho amor, sin importar sacrificios ni esfuerzos en bien de una sociedad que lo agradece, aunque los supuestos pilares institucionales que deben sostener su cobija los ignoren.
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