Desbrozando ironías: un especial con Unlight Domain (Parte I)
13 de julio de 2015
Durante varios años, cuando leía el fanzine Scriptorium, encontré referencias a la trayectoria de la banda matancera de black metal, Unlight Domain. Sin embargo, el silencio que ha seguido a la agrupación en la prensa escrita cubana e incluso en la televisiva de unos años a esta parte, no se corresponde con los acontecimientos que han sucedido en su desarrollo, y uno de ellos es su profesionalización.
Así ha resultado con numerosas bandas cubanas que hacen rock. El reconocimiento al trabajo serio y permanente de los hacedores de este género que puede traducirse en la categoría de “profesional” no se expande a otras aristas, yo diría más importantes, como la promoción y apoyo a la hora de grabar sus discos. Por esa razón, y otras más complejas y particulares, muchas de estas agrupaciones continúan formando parte del universo musical underground cubano y PMU se encarga de actualizar su devenir.
En pos de esa idea, y a través de unos amigos en común, logramos contactar a los muchachos de Unlight Domain, quienes amable e inteligentemente respondieron a nuestras preguntas. Por la importancia de sus observaciones acerca de varias problemáticas relacionadas con el mundo del metal y el suyo propio, entregamos la entrevista en dos partes. Aquí les va la primera.
PMU: Tengo entendido que surgieron en 2005 y que sus integrantes han variado en estos años. Inicialmente eran Iván Leonard guitarrista y director; Jordany Pérez en la batería; el cantante José Blanco y en el bajo Liúber Sobrino. Luego en 2008, sale Jordany y entra Andry Hernández, y en 2011 Liúber se va para España y entra Camilo Vera. ¿Sigue siendo esta última la alineación de la banda desde el 2011 hasta hoy?
Unlight Domain: No, hemos tenido otro cambio, en el 2014 Andry viajó a Brasil y fue sustituido por Yassel Gómez, un joven y talentoso baterista de la ciudad de Matanzas que ha logrado integrarse de forma muy natural a la maquinaria de Unlight Domain.
PMU: ¿De todas sus producciones, específicamente los CDs Descensus Averni y Ruins of Creation, del 2008 y el 2013 respectivamente, expresan de alguna forma estos cambios de integrantes en el grupo? Si es así, ¿en qué medida?
Unlight Domain: Cada nuevo músico aporta siempre algo personal al quehacer de una banda, pero creemos que las diferencias musicales entre los dos álbumes se deben al crecimiento y maduración del grupo. Sobre todo si tenemos en cuenta que la mayoría de la música en ambos discos fue escrita por Iván Leonard.
En los inicios, las influencias musicales eran más marcadas y reconocibles, pero ya desde el lanzamiento del segundo demo la banda comienza a desarrollar un estilo propio, musicalmente más complejo, que ha ido madurando y desarrollándose en cada nueva grabación, hasta lograr un sonido y una manera de hacer propias sin alejarse de la esencia del black metal.
PMU: En el álbum Ruins of Creation abordan un eje temático: la autodestrucción del hombre y la necesidad de encontrar nuevos caminos. ¿Continúa siendo esa la tónica de Unlight…?
Unlight Domain: El metal siempre ha sido un género donde sus creadores encuentran el medio ideal para plasmar su rabia, preocupaciones, miedos o esperanza. Solo se necesita una mirada a nuestro alrededor para ver lo que el ser humano le está haciendo al planeta y así mismo, y quisimos reflejar de alguna forma ese camino torcido por los que hoy avanza el hombre y por lo tanto, la urgencia de encontrar otras maneras de hacer las cosas. Unlight Domain nunca ha sido una banda vegana, pero sí ha tocado estos temas en varias de sus canciones.
PMU: Evidentemente la originalidad los acompaña y por eso tienen en su haber numerosas nominaciones a sus discos, tanto en Cuerda Viva como en el certamen CubaDisco, y un Split grabado por un sello mexicano, sin embargo, todos sus fonogramas han sido producidos y grabados por ustedes mismos de forma independiente. ¿Qué opinión merece que hasta ahora y con la trayectoria musical de la banda, no tienen ningún CD producido por discográficas cubanas instituidas?
Unlight Domain: Es justo mencionar aquí, que en el 2008 la casa discográfica Bismusic produjo el álbum Rock Vivo, una compilación de canciones de las mejores bandas de rock y metal del país, y el tema “From The Shadows” del segundo demo de Unlight Domain fue seleccionado para formar parte de esta producción.
Sin embargo, las disqueras cubanas nunca han mostrado mucho interés por los grupos que cultivan el metal. Es cierto que dos o tres bandas han grabado algún disco en estas disqueras, pero siguen siendo casos aislados, nada que tenga que ver con una política o estrategia sobre este género. Si sumas la caída del mercado del disco a nivel internacional y la inexistencia de uno interno, no creemos que esa situación vaya a cambiar. Por lo tanto el camino que queda es el de “do it yourself”, o hazlo tú mismo. El hecho de que ya exista esta categoría en el Cubadisco es todo un logro, un reconocimiento de que el metal ha logrado cierta presencia y forma parte del quehacer cultural del país.
Indiscutiblemente así es, pero también hay otras lecturas. Con tantos años de desarrollo del metal en Cuba, y teniendo en cuenta la calidad de muchas de las bandas domésticas, quien suscribe considera demasiado exiguas las producciones discográficas que, con todas las de la ley, ha logrado el género por el camino de la institucionalización. Incluso la aprobación de esta categoría en el Cubadisco podría interpretarse como una gran ironía, “sigue haciéndolo como puedas”.
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13 de julio de 2015
Durante varios años, cuando leía el fanzine Scriptorium, encontré referencias a la trayectoria de la banda matancera de black metal, Unlight Domain. Sin embargo, el silencio que ha seguido a la agrupación en la prensa escrita cubana e incluso en la televisiva de unos años a esta parte, no se corresponde con los acontecimientos que han sucedido en su desarrollo, y uno de ellos es su profesionalización. Así ha resultado con numerosas bandas cubanas que hacen rock. El reconocimiento al trabajo serio y permanente de los hacedores de este género que puede traducirse en la categoría de “profesional” no se expande a otras aristas, yo diría más importantes, como la promoción y apoyo a la hora de grabar sus discos. Por esa razón, y otras más complejas y particulares, muchas de estas agrupaciones continúan formando parte del universo musical underground cubano y PMU se encarga de actualizar su devenir.
En pos de esa idea, y a través de unos amigos en común, logramos contactar a los muchachos de Unlight Domain, quienes amable e inteligentemente respondieron a nuestras preguntas. Por la importancia de sus observaciones acerca de varias problemáticas relacionadas con el mundo del metal y el suyo propio, entregamos la entrevista en dos partes. Aquí les va la primera.
PMU: Tengo entendido que surgieron en 2005 y que sus integrantes han variado en estos años. Inicialmente eran Iván Leonard guitarrista y director; Jordany Pérez en la batería; el cantante José Blanco y en el bajo Liúber Sobrino. Luego en 2008, sale Jordany y entra Andry Hernández, y en 2011 Liúber se va para España y entra Camilo Vera. ¿Sigue siendo esta última la alineación de la banda desde el 2011 hasta hoy?
Unlight Domain: No, hemos tenido otro cambio, en el 2014 Andry viajó a Brasil y fue sustituido por Yassel Gómez, un joven y talentoso baterista de la ciudad de Matanzas que ha logrado integrarse de forma muy natural a la maquinaria de Unlight Domain.
PMU: ¿De todas sus producciones, específicamente los CDs Descensus Averni y Ruins of Creation, del 2008 y el 2013 respectivamente, expresan de alguna forma estos cambios de integrantes en el grupo? Si es así, ¿en qué medida?
Unlight Domain: Cada nuevo músico aporta siempre algo personal al quehacer de una banda, pero creemos que las diferencias musicales entre los dos álbumes se deben al crecimiento y maduración del grupo. Sobre todo si tenemos en cuenta que la mayoría de la música en ambos discos fue escrita por Iván Leonard.
En los inicios, las influencias musicales eran más marcadas y reconocibles, pero ya desde el lanzamiento del segundo demo la banda comienza a desarrollar un estilo propio, musicalmente más complejo, que ha ido madurando y desarrollándose en cada nueva grabación, hasta lograr un sonido y una manera de hacer propias sin alejarse de la esencia del black metal.
PMU: En el álbum Ruins of Creation abordan un eje temático: la autodestrucción del hombre y la necesidad de encontrar nuevos caminos. ¿Continúa siendo esa la tónica de Unlight…?
Unlight Domain: El metal siempre ha sido un género donde sus creadores encuentran el medio ideal para plasmar su rabia, preocupaciones, miedos o esperanza. Solo se necesita una mirada a nuestro alrededor para ver lo que el ser humano le está haciendo al planeta y así mismo, y quisimos reflejar de alguna forma ese camino torcido por los que hoy avanza el hombre y por lo tanto, la urgencia de encontrar otras maneras de hacer las cosas. Unlight Domain nunca ha sido una banda vegana, pero sí ha tocado estos temas en varias de sus canciones.
PMU: Evidentemente la originalidad los acompaña y por eso tienen en su haber numerosas nominaciones a sus discos, tanto en Cuerda Viva como en el certamen CubaDisco, y un Split grabado por un sello mexicano, sin embargo, todos sus fonogramas han sido producidos y grabados por ustedes mismos de forma independiente. ¿Qué opinión merece que hasta ahora y con la trayectoria musical de la banda, no tienen ningún CD producido por discográficas cubanas instituidas?
Unlight Domain: Es justo mencionar aquí, que en el 2008 la casa discográfica Bismusic produjo el álbum Rock Vivo, una compilación de canciones de las mejores bandas de rock y metal del país, y el tema “From The Shadows” del segundo demo de Unlight Domain fue seleccionado para formar parte de esta producción.
Sin embargo, las disqueras cubanas nunca han mostrado mucho interés por los grupos que cultivan el metal. Es cierto que dos o tres bandas han grabado algún disco en estas disqueras, pero siguen siendo casos aislados, nada que tenga que ver con una política o estrategia sobre este género. Si sumas la caída del mercado del disco a nivel internacional y la inexistencia de uno interno, no creemos que esa situación vaya a cambiar. Por lo tanto el camino que queda es el de “do it yourself”, o hazlo tú mismo. El hecho de que ya exista esta categoría en el Cubadisco es todo un logro, un reconocimiento de que el metal ha logrado cierta presencia y forma parte del quehacer cultural del país.
Indiscutiblemente así es, pero también hay otras lecturas. Con tantos años de desarrollo del metal en Cuba, y teniendo en cuenta la calidad de muchas de las bandas domésticas, quien suscribe considera demasiado exiguas las producciones discográficas que, con todas las de la ley, ha logrado el género por el camino de la institucionalización. Incluso la aprobación de esta categoría en el Cubadisco podría interpretarse como una gran ironía, “sigue haciéndolo como puedas”.
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