El rescate de la moña en Cuba
24 de agosto de 2015
Alexis Ferrer es dueño de un gimnasio en el Sevillano y al mismo tiempo, hace de entrenador para ganarse la vida. Muchos son los clientes que día a día llegan para contratar sus servicios, pues la calidad impera en el mismo. Pero pocos desconocen que su verdadera pasión en la vida es “la moña” y que allá en los 80 y 90 perteneció a uno de los pocos clubes de moña que existieron en Cuba a través de la historia.
Al indagar sobre la situación actual de este género musical en el país, me contestó sin vacilar: “Actualmente el movimiento está en decadencia total, todos quieren escuchar reguetón y música light. A mí en lo particular esto me molesta bastante, la moña es un ritmo que cogió mucha fuerza en los 90 y de momento decayó totalmente, como te decía por causa del mercadeo de otros ritmos que yo considero que están muy por debajo”.
A pesar de ya no contar con un club oficial de moñeros, Alexis todos los viernes al cerrar su gimnasio se reúne con cuatro de sus amigos más legendarios en aras de recordar viejos tiempos donde oían y tarareaban una y otro vez, temas de grupos como 2Pac, MC Hammer, Keith Sweat, entre otros. “Creo que esos tiempos no volverán. en ese entonces, el movimiento tenía tanta fuerza que incluso, una vez al mes viajábamos a provincia a reunirnos con otros clubes. Incluso, hacíamos poninas para ayudar a muchachos jóvenes que empezaban en este mundo y hasta dábamos talleres de canto. Es lamentable, pero todo esto se ha perdido”.
Al preguntarle sobre las causas objetivas de la pérdida de estos clubes, argumento: “¿Qué tú crees? El Periodo Especial. Esto le dio un cambio radical a las personas, ya no podíamos darnos el lujo de estar cantando cuando no teníamos comida, cuando no teníamos luz, cuando no teníamos dinero, cuando ni siquiera agua fría había debido a los apagones. La gente se fue enfocando en las necesidades más básicas y aunque siempre quedamos unos pocos que no renunciábamos al ritmo, muchos lo fueron dejando y todo se fue desintegrando”.
Pero según dice, no todo está perdido, existen en la actualidad intentos de rescate hacia este ritmo, pero igual algunos han fracasado. “Bueno, hemos hecho en la actualidad muchas gestiones por levantar cabeza, pero como todo, hay tropiezos y dificultades. Uno de los mejores intentos que tuvimos y fracasó, fue cuando abrieron los cines 3D. Aquí por el barrio teníamos un movimiento creado pues habíamos cuadrado con el dueño para que una hora al día sacara temas de moña, pero nada, cuando mejor iba la cosa, sacaron ‘la magistral’ ley acerca de que se prohibirán los mismos. De todas formas, nosotros no nos rendimos, creemos que lo podemos lograr”.
Al ver el entusiasmo de Alexis, al cual le brillan los ojos cuando habla de este tipo de música, no podía faltar darle algunos consejos de publicidad para sus futuros proyectos, tales como promoción a través de SMS, publicidad en el Paquete Semanal, en Internet… a lo cual argumentó: “La verdad, hemos pensando en eso, pero siempre a una baja escala. No hemos hecho gran hincapié en la publicidad. También hay que tener en cuenta algo, para hacer ese tipo de cosas hay que contar con bastante dinero. Pues por ejemplo, para enviar mil mensajes al móvil hay que pagar diez CUC, y nosotros al menos, necesitamos enviar veinte mil. Lo cual es bien complicado para nosotros, ya que el proyecto no da ganancias, ni es su objetivo. En Internet hay que contratar un publicista, un diseñador, un programador para que nos haga la Web, y todo eso hay que pagarlo, y caro. ¿Entonces?, Como ves, la cosa es complicada”.
En el momento que me disponía a hacerle una nueva pregunta, me interrumpe diciendo: “Ah, disculpa que te corte, pero ni hablar de los medios oficiales de difusión masiva. Tengo a mis sobrinos que quieren hacer o están haciendo, una pequeña fusión de géneros, es decir, balada con moña. Ya tienen dos o tres temas y hace unos meses fueron a la radio para incluir sus temas en las listas, ¿Tienes idea de cuánto le pidieron por ‘detrás de la manga’ para subir sus temas? ¡Más de mil pesos cubanos por cada salida de un tema! Es decir, que si el tema salía diez veces a la semana en una emisora que no la oye ni Dios, tenía que pagar diez mil pesos. Vaya, que es una burla por todas partes, porque si dejamos que ellos mismos elijan los temas, que nunca lo hacen porque todo es vendido, lo que pusieran sería reguetón o musiquita extranjera de bajo costo”.
Al preguntarle si en lo personal había intentado algo más que no fuera los cines 3D, argumentó: “Pues claro, siempre intento algo más. De hecho, en mi gimnasio lo que pongo casi todo el tiempo son videos de moña y te digo algo, a la gente les encanta. Incluso, jovencitas de diecisiete años que nunca habían oído el género se quedan encantadas con temas de hace veinte años. Entonces, no es que la moña no guste, es que no se oye, es que no se le da la correcta publicidad, es que no hay ninguna institución oficial, al menos que yo conozca, que haga una labor de rescate”.
Para Alexis esa una tarea ardua, el rescate de este tipo de ritmo. Por encima de la piel se le puede notar el amor que siente al respecto. Su trabajo quizás no ha sido del todo satisfactorio debido a muchas circunstancias que se le ha ido presentando, pero su ímpetu y su condición de luchador, a la larga darán al traste con conseguir sus objetivos. Objetivos que aunque no sean muchos los interesados en el rescate, sí existen unos cuantos que le ponen empeño y dinámica. Solo el tiempo dirá la última palabra.
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24 de agosto de 2015
Alexis Ferrer es dueño de un gimnasio en el Sevillano y al mismo tiempo, hace de entrenador para ganarse la vida. Muchos son los clientes que día a día llegan para contratar sus servicios, pues la calidad impera en el mismo. Pero pocos desconocen que su verdadera pasión en la vida es “la moña” y que allá en los 80 y 90 perteneció a uno de los pocos clubes de moña que existieron en Cuba a través de la historia.
Al indagar sobre la situación actual de este género musical en el país, me contestó sin vacilar: “Actualmente el movimiento está en decadencia total, todos quieren escuchar reguetón y música light. A mí en lo particular esto me molesta bastante, la moña es un ritmo que cogió mucha fuerza en los 90 y de momento decayó totalmente, como te decía por causa del mercadeo de otros ritmos que yo considero que están muy por debajo”.
A pesar de ya no contar con un club oficial de moñeros, Alexis todos los viernes al cerrar su gimnasio se reúne con cuatro de sus amigos más legendarios en aras de recordar viejos tiempos donde oían y tarareaban una y otro vez, temas de grupos como 2Pac, MC Hammer, Keith Sweat, entre otros. “Creo que esos tiempos no volverán. en ese entonces, el movimiento tenía tanta fuerza que incluso, una vez al mes viajábamos a provincia a reunirnos con otros clubes. Incluso, hacíamos poninas para ayudar a muchachos jóvenes que empezaban en este mundo y hasta dábamos talleres de canto. Es lamentable, pero todo esto se ha perdido”.
Al preguntarle sobre las causas objetivas de la pérdida de estos clubes, argumento: “¿Qué tú crees? El Periodo Especial. Esto le dio un cambio radical a las personas, ya no podíamos darnos el lujo de estar cantando cuando no teníamos comida, cuando no teníamos luz, cuando no teníamos dinero, cuando ni siquiera agua fría había debido a los apagones. La gente se fue enfocando en las necesidades más básicas y aunque siempre quedamos unos pocos que no renunciábamos al ritmo, muchos lo fueron dejando y todo se fue desintegrando”.
Pero según dice, no todo está perdido, existen en la actualidad intentos de rescate hacia este ritmo, pero igual algunos han fracasado. “Bueno, hemos hecho en la actualidad muchas gestiones por levantar cabeza, pero como todo, hay tropiezos y dificultades. Uno de los mejores intentos que tuvimos y fracasó, fue cuando abrieron los cines 3D. Aquí por el barrio teníamos un movimiento creado pues habíamos cuadrado con el dueño para que una hora al día sacara temas de moña, pero nada, cuando mejor iba la cosa, sacaron ‘la magistral’ ley acerca de que se prohibirán los mismos. De todas formas, nosotros no nos rendimos, creemos que lo podemos lograr”.
Al ver el entusiasmo de Alexis, al cual le brillan los ojos cuando habla de este tipo de música, no podía faltar darle algunos consejos de publicidad para sus futuros proyectos, tales como promoción a través de SMS, publicidad en el Paquete Semanal, en Internet… a lo cual argumentó: “La verdad, hemos pensando en eso, pero siempre a una baja escala. No hemos hecho gran hincapié en la publicidad. También hay que tener en cuenta algo, para hacer ese tipo de cosas hay que contar con bastante dinero. Pues por ejemplo, para enviar mil mensajes al móvil hay que pagar diez CUC, y nosotros al menos, necesitamos enviar veinte mil. Lo cual es bien complicado para nosotros, ya que el proyecto no da ganancias, ni es su objetivo. En Internet hay que contratar un publicista, un diseñador, un programador para que nos haga la Web, y todo eso hay que pagarlo, y caro. ¿Entonces?, Como ves, la cosa es complicada”.
En el momento que me disponía a hacerle una nueva pregunta, me interrumpe diciendo: “Ah, disculpa que te corte, pero ni hablar de los medios oficiales de difusión masiva. Tengo a mis sobrinos que quieren hacer o están haciendo, una pequeña fusión de géneros, es decir, balada con moña. Ya tienen dos o tres temas y hace unos meses fueron a la radio para incluir sus temas en las listas, ¿Tienes idea de cuánto le pidieron por ‘detrás de la manga’ para subir sus temas? ¡Más de mil pesos cubanos por cada salida de un tema! Es decir, que si el tema salía diez veces a la semana en una emisora que no la oye ni Dios, tenía que pagar diez mil pesos. Vaya, que es una burla por todas partes, porque si dejamos que ellos mismos elijan los temas, que nunca lo hacen porque todo es vendido, lo que pusieran sería reguetón o musiquita extranjera de bajo costo”.
Al preguntarle si en lo personal había intentado algo más que no fuera los cines 3D, argumentó: “Pues claro, siempre intento algo más. De hecho, en mi gimnasio lo que pongo casi todo el tiempo son videos de moña y te digo algo, a la gente les encanta. Incluso, jovencitas de diecisiete años que nunca habían oído el género se quedan encantadas con temas de hace veinte años. Entonces, no es que la moña no guste, es que no se oye, es que no se le da la correcta publicidad, es que no hay ninguna institución oficial, al menos que yo conozca, que haga una labor de rescate”.
Para Alexis esa una tarea ardua, el rescate de este tipo de ritmo. Por encima de la piel se le puede notar el amor que siente al respecto. Su trabajo quizás no ha sido del todo satisfactorio debido a muchas circunstancias que se le ha ido presentando, pero su ímpetu y su condición de luchador, a la larga darán al traste con conseguir sus objetivos. Objetivos que aunque no sean muchos los interesados en el rescate, sí existen unos cuantos que le ponen empeño y dinámica. Solo el tiempo dirá la última palabra.
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