Para “focosocializar” a las mujeres… Festival Pinar Hip Hop próximamente. (Parte II)
31 de agosto de 2015
Enseguida se enterará por qué es novedoso el XIII Pinar HIP HOP. Denis Pérez Acanda, organizador del evento y director del grupo Los Compinches, nos comentó sobre las intenciones y las expectativas del evento que incluye talleres, conferencias y participación de muchas raperas de toda Cuba.
PMU: ¿Por qué está dedicado a las mujeres?
Denis: “Antes teníamos raperas mujeres, y hoy queda una sola rapera. Es una freaky que le gusta el rap y es una onda diferente, su grupo se llama Sin Nombre. Buscamos que haya mujeres que se vinculen al movimiento. En esta ocasión queremos traer no solo artistas de La Habana, sino todas (en el sentido de la mayor cantidad posible) las raperas de Cuba. Nos interesa algo diferente de lo de La Habana. Traemos raperas de Santiago de Cuba, Camagüey… Queremos una cosa que impacte, que sea “foco-social”. ¿Te cuadra mi dialecto? (El dialecto de Los Compinches vincula localismos a manera de traducciones del lenguaje académico).
Las sedes serán en El Mercado del Calero y La Conchita. Experimentamos con una historia de una jornada de hip hop que se hizo, luces, efectos, un escenario móvil. El viernes y sábado será ahí, y el domingo lo hacemos en La Conchita a partir de las 6:00 de la tarde”.
Sí, parece curioso que en una plaza de hip hop tan fuerte como Pinar del Río solo haya una única mujer rapera. Pienso que aunque no lo pretendan, materialmente el hip hop no ha escapado y se vuelve como la institucionalidad (entiéndase entramado de leyes, ideales, estructura, costumbres, tradiciones) que lo controlan (aunque sea solo verticalmente a manera de imposición): machista, sexista con carácter exclusionista. Abrir estos expedientes de inclusión en festivales (a lo grande, quiero decir) puede ser la manera de incentivar el progreso al respecto, abriendo caminos no solo para las artistas (que por definición son las exploradoras de incógnitas), sino para las mujeres en general, a la construcción de lo que es ser mujer, a sus capacidades para decidir y expresarse, para iniciar, muchas veces alejadas de su persona individual. Hay que alentar la innovación a través de la tradición, no estamos vacíos, no partimos de cero, pero no debe pararse la creación.
PMU: ¿Pensaron convertir este espacio comercial en un encuentro cultural?
Denis: “De alguna manera, pero la verdadera razón es que La Conchita es un barrio muy agradecido, es un barrio de bailadores de breakdance, y el Calero, donde lo vamos a hacer los primeros días, también es un barrio de bailadores e incluso, hay par de chamacos que tienen un piquete de baile. Siempre ha habido contrapunteo entre el Calero y la Conchita. Quiero desplazar un poco el Festival, estar en los dos lugares, incorporar espectadores y agregar movilidad al evento. Quiero mover el Festival.
El año pasado quedó bueno, con un buen audio, pero siempre te ponen sus tabúes a la hora de hacer un festival en un sitio, como tal siempre hay sus problemas, entonces nos movemos y explotamos el potencial de cada uno”.
Una buena manera de escapar de los impactos restrictivos, de descontextualizar lo comercial, acercando el arte a lugares abiertos, dispuestos para cualquier público, incluso, para aquel que no tiene el tiempo de ir a buscarlo o que teme a las paredes que alejan al “exclusivo, encumbrado” arte de la posibilidad de escrutinio. Aportes estos serán a los laboratorios de “arte útil” (concepción del arte como instrumento de transformación social), “arte conducta” (noción del comportamiento como herramienta de comunicación), “artes aplicadas” (prácticas artísticas vinculadas a otros campos del saber), estética (exploración y práctica sobre la interpelación entre la estética y la ética en proyectos socio-culturales), tan necesarios en esta época de redes. Esperemos que el Pinar Hip Hop devenga una incitación para un arte socialmente comprometido, más inclusivo y contextualizado en su tiempo, efectivo en la sociedad.
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31 de agosto de 2015
Enseguida se enterará por qué es novedoso el XIII Pinar HIP HOP. Denis Pérez Acanda, organizador del evento y director del grupo Los Compinches, nos comentó sobre las intenciones y las expectativas del evento que incluye talleres, conferencias y participación de muchas raperas de toda Cuba.
PMU: ¿Por qué está dedicado a las mujeres?
Denis: “Antes teníamos raperas mujeres, y hoy queda una sola rapera. Es una freaky que le gusta el rap y es una onda diferente, su grupo se llama Sin Nombre. Buscamos que haya mujeres que se vinculen al movimiento. En esta ocasión queremos traer no solo artistas de La Habana, sino todas (en el sentido de la mayor cantidad posible) las raperas de Cuba. Nos interesa algo diferente de lo de La Habana. Traemos raperas de Santiago de Cuba, Camagüey… Queremos una cosa que impacte, que sea “foco-social”. ¿Te cuadra mi dialecto? (El dialecto de Los Compinches vincula localismos a manera de traducciones del lenguaje académico).
Las sedes serán en El Mercado del Calero y La Conchita. Experimentamos con una historia de una jornada de hip hop que se hizo, luces, efectos, un escenario móvil. El viernes y sábado será ahí, y el domingo lo hacemos en La Conchita a partir de las 6:00 de la tarde”.
Sí, parece curioso que en una plaza de hip hop tan fuerte como Pinar del Río solo haya una única mujer rapera. Pienso que aunque no lo pretendan, materialmente el hip hop no ha escapado y se vuelve como la institucionalidad (entiéndase entramado de leyes, ideales, estructura, costumbres, tradiciones) que lo controlan (aunque sea solo verticalmente a manera de imposición): machista, sexista con carácter exclusionista. Abrir estos expedientes de inclusión en festivales (a lo grande, quiero decir) puede ser la manera de incentivar el progreso al respecto, abriendo caminos no solo para las artistas (que por definición son las exploradoras de incógnitas), sino para las mujeres en general, a la construcción de lo que es ser mujer, a sus capacidades para decidir y expresarse, para iniciar, muchas veces alejadas de su persona individual. Hay que alentar la innovación a través de la tradición, no estamos vacíos, no partimos de cero, pero no debe pararse la creación.
PMU: ¿Pensaron convertir este espacio comercial en un encuentro cultural?
Denis: “De alguna manera, pero la verdadera razón es que La Conchita es un barrio muy agradecido, es un barrio de bailadores de breakdance, y el Calero, donde lo vamos a hacer los primeros días, también es un barrio de bailadores e incluso, hay par de chamacos que tienen un piquete de baile. Siempre ha habido contrapunteo entre el Calero y la Conchita. Quiero desplazar un poco el Festival, estar en los dos lugares, incorporar espectadores y agregar movilidad al evento. Quiero mover el Festival.
El año pasado quedó bueno, con un buen audio, pero siempre te ponen sus tabúes a la hora de hacer un festival en un sitio, como tal siempre hay sus problemas, entonces nos movemos y explotamos el potencial de cada uno”.
Una buena manera de escapar de los impactos restrictivos, de descontextualizar lo comercial, acercando el arte a lugares abiertos, dispuestos para cualquier público, incluso, para aquel que no tiene el tiempo de ir a buscarlo o que teme a las paredes que alejan al “exclusivo, encumbrado” arte de la posibilidad de escrutinio. Aportes estos serán a los laboratorios de “arte útil” (concepción del arte como instrumento de transformación social), “arte conducta” (noción del comportamiento como herramienta de comunicación), “artes aplicadas” (prácticas artísticas vinculadas a otros campos del saber), estética (exploración y práctica sobre la interpelación entre la estética y la ética en proyectos socio-culturales), tan necesarios en esta época de redes. Esperemos que el Pinar Hip Hop devenga una incitación para un arte socialmente comprometido, más inclusivo y contextualizado en su tiempo, efectivo en la sociedad.
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