¿Sabe lo que es rap comedy? 1... 2... 3... Probando... (II Parte)
19 de octubre de 2015
Insisto, este artículo es una invitación a escuchar (que distingo de oír) este disco, 1… 2… 3… Probando…, más o menos guiado, pero siempre confiando en su instinto. Así que seguimos con el análisis iniciado en la primera parte de este artículo.
El tema “Nunca se sabe” es “Hip Hop real Hip Hop, this is it, americano, beautiful”. Excelente background sencillo, con justo lo necesario: scratch. Este es el caso en el que los invitados agregan nueva tonalidad en cuanto flow, rima, lírica y energía. El mensaje es lo más fino que se puede ser siendo crudo, es el caso de lo que hay que comer sin cocinar (crudo pues) para aprovechar todas sus vitaminas y buen sabor. Es un estimulante cerebral, ético y espiritual. Atraviesa sin cortar, convence sin intentar, educa sin deslumbrar. Trasciende de inteligente a sabio. “En la luchita, un día detrás del otro…” “Grita: Patria o Muerte… y si es posible: Vencerás…” “Este proyecto no es humano pues habrá que hablar con Dios para que nos eche una mano”. Nos remite a cuando la libertad de conciencia se convierte en autoestima hipertrofiada: “Pueblo elegido, por nosotros mismos, claro”. Aquí se relativiza todo y con esta técnica se revela lo irreductible: nuestra pluralidad, nuestra diversidad, nuestra necesidad de encuentro y síntesis. “Dicen que con estos versos no haré la revolución, dicen… si tienes la necesidad, escribe”.
“La técnica”, y sube la cosa: “hablemos de todo, menos de política”. Aunque tema de relleno, es excelente la idea de que el background sea solo a base de percusión, punto de contacto con el spoken word, con la poesía urbana. Tito se ríe de todo y de todos (incluso de sí mismo), grande este poder. El obstinato se usa al libitium. Pura sinestesia, oyes sonidos viendo imágenes, sientes al serio pero te da risa, oyes rock, pero levantas la mano. “Interlude” de pura dramaturgia. Tito muestra otra de sus facetas, de sus estados de ánimo, se vuelve a presentar, pero de otra manera, tiene flow para eso, y contenido para eso. Tito recomienda estudiar “titología” y yo también. Tito molesta y provoca. Tito aparece y aunque se vaya no desaparece. Tito impresiona, marca.
“Cubano”: el real homenaje a las raíces, pero más conectados con África que con afroCuba. Excelentes coros, derroche de musicalidad. El background es una obra de arte y la letra, otra. Excelente texto. Nos retrata como cubanos, pero a pesar de lo difícil de esto, “hay mucha cola para salir y ninguna para entrar”, tiene un sabor agridulce, nos deja esperanzados, ¿será por la música? No lo sé, pero es de esos temas que te da “cosita”. Hay un juego con frases nuestras, con dichos nuestros, con elementos distintivos de cubanía, y lo más interesante, es que no recurrió al son para musicalmente apoyar este tema, de “11 millones de razones y una sola verdad, 11 millones de lenguas y una sola historia, 11 millones de pasos en una dirección, 11 millones de preguntas y una respuesta”. Excelente la idea de dejar una coda y el cierre, en una palabra: genial. Hay que entregarse a Tito cual gurú del humor más picante (en el sentido que estimula, que sazona, que exalta). Tito es un pillo (posee una juguetona agudeza, indocilidad e impredictibilidad), pero Tito no estafa, Tito regala significado sobreabundante. “¿No hay nada que decir o hay mucho que callar?”
“Eso habría que verlo compay”, coherentemente llega este tema, con un discurso que muestra que si bien estamos ante alguien cubanamente crítico (el tema pasado lo mostró), estamos igualmente, escuchando a alguien 100% cubano que cuestiona todo lo que de afuera pueda venir a dañar nuestra vida, nuestra Cuba. Es, entonces, un tema mambí. Mucho balance. Considero que hay influencias de El Tipo Este, de Obsesión, y, específicamente, del CD Un montón de cosas, y de otros raperos cubanos de la old shcool y de las producciones de Pablo Herrera, un disco que se remonta a la época en que el hip hop cubano tenía voz propia y era el resultado de las emociones, los sentidos…
“Santa Clara (el tour)” es un bello tema, un homenaje a su ciudad, pero desde la realidad, sin postales, sin omitir, sin maquillar y satirizando. Y luego de escucharlo, a ritmo de reggae, te dan ganas de ir a visitarla y reír con cada picaresca descripción. Es una descripción bella de la ciudad, aunque reconoce en la gente su vida. Tiene influencias, por momentos, de Calle 13.
“La perra de mis sueños” es un gran background y los textos geniales. El juego de este hombre, la sátira, es sin dudas, su mejor arma. Lamento que sea un poco ¿sexista?, ¿será provocación? El tema es excelente, brutal, puro rap comedy. Agota todos los recursos para erotizar y burlarse de los clichés mientras pinta la (anti)heroína del amor.
“Tan feo como tan franco” posee un comienzo a capella, recurso poco usado por los raperos en el mundo entero. Tema relleno, brutal, cerrando el disco casi ya. Entonces, Tito deja claro en este tema que no es ni de la vieja escuela, ni de la nueva, sino de otra escuela. Cuestiona a los raperitos que dicen ser underground con arrogancia, y deja claro su compromiso con el rap, con el rap cubano, y su interés, por suerte, por querer elevar este nombre. Ya casi al final cuando has escuchado el disco, cuando te has quedado prendado de este artista, él te explica qué es, por qué es y cómo es. Suerte para éste, cuyo compromiso es el rap, para este que tiene claro que para hacer revolución, no hay que pedir permiso: “puro rap, pa’ apagarte to’ las luces…”. Es un tema para el movimiento, para los raperos de Cuba. ¡Gracias Tito! ¡Tu hip hop se roba el show!
“Hablablabando” es dramatúrgicamente, una secuela porque con el mismo background del tema anterior llega este tema final, donde Tito agradece, se muestra al estilo “lo que usted no vio”. Este es el making of del disco, un making of sonoro, rapeado. Y es cierto, “este disco está salvaje, es una salvajá”. Es para los que aman el hip hop de verdad. Y, seguro, que con este disco, Tito garantiza diez años más de vida artística y se libra de la agricultura. Genial, termina ridiculizando a la “etiqueta” underground. Siempre me deja pensando: ¿se burla o habla directamente?
“Outro” es donde Tito se despide haciendo una interpretación sonora y discursiva del título del disco. “¿Te cuadró? ¡Pon el disco otra vez!”
Este es un artista para enamorarse. Si eres mujer, con cierto sentido groupie porque Tito es tu artista; o si eres un hombre, que puede mirar de frente la genialidad.
Comentarios Dejar un comentario
19 de octubre de 2015
Insisto, este artículo es una invitación a escuchar (que distingo de oír) este disco, 1… 2… 3… Probando…, más o menos guiado, pero siempre confiando en su instinto. Así que seguimos con el análisis iniciado en la primera parte de este artículo.
El tema “Nunca se sabe” es “Hip Hop real Hip Hop, this is it, americano, beautiful”. Excelente background sencillo, con justo lo necesario: scratch. Este es el caso en el que los invitados agregan nueva tonalidad en cuanto flow, rima, lírica y energía. El mensaje es lo más fino que se puede ser siendo crudo, es el caso de lo que hay que comer sin cocinar (crudo pues) para aprovechar todas sus vitaminas y buen sabor. Es un estimulante cerebral, ético y espiritual. Atraviesa sin cortar, convence sin intentar, educa sin deslumbrar. Trasciende de inteligente a sabio. “En la luchita, un día detrás del otro…” “Grita: Patria o Muerte… y si es posible: Vencerás…” “Este proyecto no es humano pues habrá que hablar con Dios para que nos eche una mano”. Nos remite a cuando la libertad de conciencia se convierte en autoestima hipertrofiada: “Pueblo elegido, por nosotros mismos, claro”. Aquí se relativiza todo y con esta técnica se revela lo irreductible: nuestra pluralidad, nuestra diversidad, nuestra necesidad de encuentro y síntesis. “Dicen que con estos versos no haré la revolución, dicen… si tienes la necesidad, escribe”.
“La técnica”, y sube la cosa: “hablemos de todo, menos de política”. Aunque tema de relleno, es excelente la idea de que el background sea solo a base de percusión, punto de contacto con el spoken word, con la poesía urbana. Tito se ríe de todo y de todos (incluso de sí mismo), grande este poder. El obstinato se usa al libitium. Pura sinestesia, oyes sonidos viendo imágenes, sientes al serio pero te da risa, oyes rock, pero levantas la mano. “Interlude” de pura dramaturgia. Tito muestra otra de sus facetas, de sus estados de ánimo, se vuelve a presentar, pero de otra manera, tiene flow para eso, y contenido para eso. Tito recomienda estudiar “titología” y yo también. Tito molesta y provoca. Tito aparece y aunque se vaya no desaparece. Tito impresiona, marca.
“Cubano”: el real homenaje a las raíces, pero más conectados con África que con afroCuba. Excelentes coros, derroche de musicalidad. El background es una obra de arte y la letra, otra. Excelente texto. Nos retrata como cubanos, pero a pesar de lo difícil de esto, “hay mucha cola para salir y ninguna para entrar”, tiene un sabor agridulce, nos deja esperanzados, ¿será por la música? No lo sé, pero es de esos temas que te da “cosita”. Hay un juego con frases nuestras, con dichos nuestros, con elementos distintivos de cubanía, y lo más interesante, es que no recurrió al son para musicalmente apoyar este tema, de “11 millones de razones y una sola verdad, 11 millones de lenguas y una sola historia, 11 millones de pasos en una dirección, 11 millones de preguntas y una respuesta”. Excelente la idea de dejar una coda y el cierre, en una palabra: genial. Hay que entregarse a Tito cual gurú del humor más picante (en el sentido que estimula, que sazona, que exalta). Tito es un pillo (posee una juguetona agudeza, indocilidad e impredictibilidad), pero Tito no estafa, Tito regala significado sobreabundante. “¿No hay nada que decir o hay mucho que callar?”
“Eso habría que verlo compay”, coherentemente llega este tema, con un discurso que muestra que si bien estamos ante alguien cubanamente crítico (el tema pasado lo mostró), estamos igualmente, escuchando a alguien 100% cubano que cuestiona todo lo que de afuera pueda venir a dañar nuestra vida, nuestra Cuba. Es, entonces, un tema mambí. Mucho balance. Considero que hay influencias de El Tipo Este, de Obsesión, y, específicamente, del CD Un montón de cosas, y de otros raperos cubanos de la old shcool y de las producciones de Pablo Herrera, un disco que se remonta a la época en que el hip hop cubano tenía voz propia y era el resultado de las emociones, los sentidos…
“Santa Clara (el tour)” es un bello tema, un homenaje a su ciudad, pero desde la realidad, sin postales, sin omitir, sin maquillar y satirizando. Y luego de escucharlo, a ritmo de reggae, te dan ganas de ir a visitarla y reír con cada picaresca descripción. Es una descripción bella de la ciudad, aunque reconoce en la gente su vida. Tiene influencias, por momentos, de Calle 13.
“La perra de mis sueños” es un gran background y los textos geniales. El juego de este hombre, la sátira, es sin dudas, su mejor arma. Lamento que sea un poco ¿sexista?, ¿será provocación? El tema es excelente, brutal, puro rap comedy. Agota todos los recursos para erotizar y burlarse de los clichés mientras pinta la (anti)heroína del amor.
“Tan feo como tan franco” posee un comienzo a capella, recurso poco usado por los raperos en el mundo entero. Tema relleno, brutal, cerrando el disco casi ya. Entonces, Tito deja claro en este tema que no es ni de la vieja escuela, ni de la nueva, sino de otra escuela. Cuestiona a los raperitos que dicen ser underground con arrogancia, y deja claro su compromiso con el rap, con el rap cubano, y su interés, por suerte, por querer elevar este nombre. Ya casi al final cuando has escuchado el disco, cuando te has quedado prendado de este artista, él te explica qué es, por qué es y cómo es. Suerte para éste, cuyo compromiso es el rap, para este que tiene claro que para hacer revolución, no hay que pedir permiso: “puro rap, pa’ apagarte to’ las luces…”. Es un tema para el movimiento, para los raperos de Cuba. ¡Gracias Tito! ¡Tu hip hop se roba el show!
“Hablablabando” es dramatúrgicamente, una secuela porque con el mismo background del tema anterior llega este tema final, donde Tito agradece, se muestra al estilo “lo que usted no vio”. Este es el making of del disco, un making of sonoro, rapeado. Y es cierto, “este disco está salvaje, es una salvajá”. Es para los que aman el hip hop de verdad. Y, seguro, que con este disco, Tito garantiza diez años más de vida artística y se libra de la agricultura. Genial, termina ridiculizando a la “etiqueta” underground. Siempre me deja pensando: ¿se burla o habla directamente?
“Outro” es donde Tito se despide haciendo una interpretación sonora y discursiva del título del disco. “¿Te cuadró? ¡Pon el disco otra vez!”
Este es un artista para enamorarse. Si eres mujer, con cierto sentido groupie porque Tito es tu artista; o si eres un hombre, que puede mirar de frente la genialidad.
Comentarios Dejar un comentario
- No hay comentarios en este momento.