¡Es Krampus! ...el bueno



Una noche del pasado octubre, el habanero Maxim Rock parecía haberse convertido en un verdadero cuadrilátero de pelea, entre el abrazador calor y la acústica estridencia de la banda roquera Krampus, la cual, desde el psicodélico estrado de humo y luces, mantenía en vilo a todos los presentes. Previamente a esa presentación, PMU tuvo la oportunidad de conversar con Emilio Lázaro Cortez Díaz, líder del grupo.

PMU: Estimamos que sería bueno explicarles a nuestros lectores ¿por qué del nombre de Krampus?

Emilio Lázaro: Krampus es un personaje de la mitología pre-cristiana del norte europeo, que recorría las aldeas exigiendo comida y bebida, so pena de realizar maldades extremas. Ya luego de la conversión al cristianismo, se comenzó a asociarlo como el antagónico de Santa Claus, pues en víspera de navidad regañaba y castigaba a los niños malos. Por analogía, actualmente existen muchos Krampus que hacen de las suyas desde la cúspide del poder, pero también más “niños malos” que se resisten a ser regañados y castigados.

PMU: Cuéntanos sobre el origen de la agrupación y su apego a un rock que parece aferrarse a las tendencias más extremas y emplazadoras del género, obviando la frivolidad y la diversión por la diversión, acercándose más a la música alternativa.

Emilio Lázaro: La banda se fundó hace más de tres años. Seis jóvenes, todos autodidactas, pero fervorosos amantes del rock, decidimos correr suerte en la música. ¿Qué podíamos perder? Desde un principio estábamos persuadidos que el camino a seguir no sería nada fácil, pero también con la convicción de que no haríamos concesiones en las temáticas de nuestras canciones que, desde entonces y hasta ahora, reflejan en gran parte las preocupaciones sociales de los cubanos y, sobre todo, las de los más jóvenes. más que divertir, nuestro objetivo constante ha sido y es, demostrar artísticamente que podemos pensar y actuar por nosotros mismos, sin la tutela de tantos Krampus siempre dispuestos a calificar de “niño malo” a quien se salga de su línea de pensamiento.

Es cierto que, como usted dice, cultivamos un rock agresivo, y yo agregaría que rabioso y denunciador dentro del formato del heavy metal, así como de la fusión de sub-géneros que se han desgajado del mismo. Los integrantes de esta banda nos nucleamos alrededor de un fuerte temperamento grupal, tanto humana como musicalmente. Esa proyección ha sido la manera más convincente de “gritar” nuestras inquietudes, de alertar que ocupamos un lugar en el espacio y que requerimos parte de ese espacio. Cantamos siempre en español para que se nos entienda mejor, para que la comunicación sea más directa con el público. No por ello negamos las influencias que han ejercido sobre nosotros grupos de rock ingleses y norteamericanos.

PMU: ¿Cómo está estructurada la banda?

Emilio Lázaro: Bueno, creo haberle mencionado que somos seis dentro de la estructura estándar de una banda de rock. Michel es nuestro guitarrista líder; Yohan se encarga del bajo; Eliexis es la segunda guitarra; en la batería está César, y Alex como primera voz. Ah, y yo que soy guitarrista acompañante, cantante melódico y director, además de ser el más joven del grupo con mis 19 años. En resumen: tres guitarristas, un bajista, un baterista y un cantante.

PMU: ¿En los tres años de existencia como banda, han grabado algún disco?

Emilio Lázaro: Yo diría que más que grabar, hemos parido un disco, y conste que fue un parto de mucho riesgo. Con la intención de que el costo de producirlo fuera menor, se nos ocurrió instalar en mi propia casa un estudio al que pomposamente llamamos String Records. Pero qué decirle, tuvimos que empezar de cero: pedacito a pedacito y con nuestros propios recursos adquirimos computadora, tarjetas de video y audio, mezcladora, micrófonos direccionales, y otros periféricos y programas, además del acondicionamiento acústico de la habitación. Pero, al fin la criatura vio la luz. Es un CD con una selección de 10 canciones, encabezada por “Ira de Titanes”. A propósito, todas las composiciones que interpretamos son de nuestra autoría.

PMU: ¿En dónde se han presentado?

Emilio Lázaro: Hemos actuado en diversos lugares, pero principalmente en el Maxim Rock, que es un lugar muy significativo para los seguidores del rock en La Habana. Es algo así como una Meca para los músicos roqueros. Pero es una Meca bastante cara para los que como nosotros son, entre comillas, aficionados. Ese estatus impide que seamos remunerados y que, al mismo tiempo, todo el costo de la presentación vaya por nosotros. Dígame si es posible de concebir que de nuestros bolsillos desfondados tengamos que pagar la transportación, el audio, las luces, el humo, el local de ensayo, a cambio solamente del aplauso de un público que ya nos distingue. Es cierto que son las reglas del juego, sin embargo, pienso que el místico Krampus está llevando muy de prisa a los “niños malos”. Es para preguntarse que quién es el malo en esta película.

Para sostenernos en la escena, algunos de nosotros contamos con un trabajo paralelo y con una que otra ayuda familiar. Pero, este ser y no ser, se hace cada día más insostenible dado el consecuente desgaste físico y la descompensación económica. Es el cuento del pelotero “amateur” que jugaba en Cuba por un raquítico sueldo y que, luego de desertar, se desempeña en ligas profesionales en otros países por miles o millones de dólares. Nosotros no tenemos la vista puesta en la profesionalidad como un fin de enriquecimiento, sino como una justa equidad, un justo pago por lo que aportamos a la sociedad, ¿acaso esto último no es un principio del socialismo?

PMU: ¿A qué aspiran concretamente?

Emilio Lázaro: A dos cosas: primeramente, a que la vida nos de la suficiente fuerza de continuar juntos para esperar que tantas irracionales legislaciones se corrijan, y la segunda, llegar a lo más alto del podio musical para quien nos escuche exclame: ¡Es Krampus! ...el bueno.

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Comentarios   Dejar un comentario
Roberto Manso
9 de julio, 2017 6:56 pm (GMT-5:00)
Piénso que krampus es una muy buena banda hace farta que continue su carrera musical y no se desintegre como muchas y que aguanten que en cuba es algo normal pasar ese trabajo pero la agencia maxim rock puede ayudar a dejar de que sean aficionados y ya cobren por concierto para que vean su trabajo realizado y no se pierda el entusiasmo de seguir ....un fan....del Rock Cubano y un seguidor aunque este lejos de mi país lo recuerdo y apoyo siempre ...y siguen chicos van bien me gusta su rock . saludos desde Perú...