Julio Rodríguez: un cantautor pinareño en Trinidad (Parte II)
11 de enero de 2016
Seguimos conversando con Julio Rodríguez, que en esta ocasión nos contó de sus influencias musicales, la existencia de un reducido, pero serio grupo de cantautores en Trinidad, del discurso de las féminas, así como nos reveló una sui géneris definición de cantautor.
PMU: Casi que empezamos por el final. Ahora quisiera que me contaras un poco de tus inicios, pero sobre todo de tus influencias musicales.
Julio: Empiezo en la música por accidente, porque soy instructor de Artes Plásticas, pero mi padrastro tocaba guitarra y entonces, me interesó aprender algunos acordes. Luego, lo retomé en el servicio militar con un amigo que tocaba guitarra y cuando salí del servicio fue que lo pensé más en serio. Hace alrededor de seis años atrás fue que empecé finalmente a componer mis propios temas. Me fui influenciando de Habana Abierta, de los grupos de la trova cubana, de David Torrens, Alejandro Gutiérrez, Amaury Gutiérrez… simplemente, fue paso a paso. Escuchar y luego, tratar de lograr un estilo propio.
En mi obra hay mucha influencia de la música cubana, pero también de la norteamericana y la brasileña, que me llegan muy cerca por la riqueza armónica que tienen a la hora de componer o de tocar cualquier tipo de género. Chico Buarque, Vinícius de Moraes, precursores del bossa nova, BB King, Louis Armstrong, entre otros, están muy presentes en mi música.
PMU: Entonces, no podría catalogársete como trovador, sino más bien cantautor por la variedad de géneros que mezclas. ¿Es así?
Julio: Así es. Más que todo, soy un cantautor que trata de abarcar una amplia gama de géneros y ritmos siempre fusionados con la música cubana, con lo más autóctono. Siempre pensando en el público nacional, pero sería interesante abarcar otros públicos también.
PMU: ¿Cómo definirías a un cantautor?
Julio: Un cantautor es un trasmisor social que toma de sus experiencias, o de las experiencias de sus congéneres, y es capaz de mediante una canción, expresar sentimientos, impresiones acerca de las cosas que lo rodean. Para mí, más que todo, un cantautor es un comunicador social y eso es lo que me interesa tocar en mis canciones, sin dejar de tocar temas como el amor, o disfrutar la vida.
PMU: ¿Hay muchos cantautores o trovadores en Trinidad? ¿Se juntan para hacer música o cada cual hace lo suyo por su parte?
Julio: No hay muchos cantautores en Trinidad. Ahora mismo podría hablarte de cuatro: Erwin, Carlos Rizo, Yaidy y yo, al menos que yo conozca. Hace poco, todos hicimos un concierto en El rincón de Pedrito. Pedrito era un trovador muy famoso de la trova cubana que murió hace como tres años, y como él siempre se presentaba allí, la gente le puso su nombre. Allí todos nos reunimos con un músico muy reconocido, Carlitos Irarragorri, pianista, trecero, bajista y arreglista, que tocó con Celia Cruz, Andy Montañez…, una verdadera gloria de la música cubana. Cada quien cantó como tres canciones, pero fuera de ese concierto, no hay nada establecido para hacerlo periódicamente.
Aunque es muy probable que en este nuevo año comience una peña en la que quiero combinar literatura y música, invitar a artistas de otras ciudades. Por allá por mi ciudad hay unos muchachos, los de Toques del Río, que sería una buena propuesta, y por supuesto, los músicos de aquí que te mencionaba.
PMU: Sería un buen comienzo para el 2016. Y antes de terminar me gustaría que me dieras tus impresiones acerca del discurso de las cantautoras que conoces. ¿Es muy diferente del de los hombres?
Julio: No creo que el discurso de las cantautoras se diferencie del de los hombres. Simplemente, no sé por qué no hay muchas, quizá hay un poco de temor a formar parte de un mundo en el que predominan los hombres, pero creo que el discurso no se diferencia. Incluso, muchas son mejores cantantes y mucho mejores compositoras que algunos cantautores con una carrera trascendental en la música. Simplemente, creo que el problema no es de calidad, sino de cantidad, y no he visto grandes diferencias en el discurso poético o cancionística de una cantautora y un cantautor, pues se tocan los mismos puntos, las mismas preocupaciones sociales.
PMU: Finalmente, ¿qué piensas del trabajo que realiza PMU?
Julio: La idea que mueve a PMU, más que todo, es revolucionaria y renovadora, pues trata de buscar lo más auténtico de la música. Porque ser underground, ser un cantautor sin apoyo de institución alguna, se hace difícil, muy difícil. Además de que es un reto porque trabajamos para un público exigente. El que escucha este tipo de música, por lo general, tiene cierta preparación y por tanto exige más. La preocupación y la promoción por el trabajo que realizamos es una labor bastante revolucionaria y más que todo, súper interesante, pues a las empresas de la música en Cuba no les interesa.
El panorama underground trinitario que nos ha dibujado Julio, habla por sí mismo de la importante y desinteresada labor de los creadores que como él, dedican el poco tiempo libre que les queda a comunicar con música, la Cuba real. Quedamos entonces al tanto de la realización de su primera peña, que deberá suceder en el año que recién comienza.
Leer la serie desde el principio
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11 de enero de 2016
Seguimos conversando con Julio Rodríguez, que en esta ocasión nos contó de sus influencias musicales, la existencia de un reducido, pero serio grupo de cantautores en Trinidad, del discurso de las féminas, así como nos reveló una sui géneris definición de cantautor.
PMU: Casi que empezamos por el final. Ahora quisiera que me contaras un poco de tus inicios, pero sobre todo de tus influencias musicales.
Julio: Empiezo en la música por accidente, porque soy instructor de Artes Plásticas, pero mi padrastro tocaba guitarra y entonces, me interesó aprender algunos acordes. Luego, lo retomé en el servicio militar con un amigo que tocaba guitarra y cuando salí del servicio fue que lo pensé más en serio. Hace alrededor de seis años atrás fue que empecé finalmente a componer mis propios temas. Me fui influenciando de Habana Abierta, de los grupos de la trova cubana, de David Torrens, Alejandro Gutiérrez, Amaury Gutiérrez… simplemente, fue paso a paso. Escuchar y luego, tratar de lograr un estilo propio.
En mi obra hay mucha influencia de la música cubana, pero también de la norteamericana y la brasileña, que me llegan muy cerca por la riqueza armónica que tienen a la hora de componer o de tocar cualquier tipo de género. Chico Buarque, Vinícius de Moraes, precursores del bossa nova, BB King, Louis Armstrong, entre otros, están muy presentes en mi música.
PMU: Entonces, no podría catalogársete como trovador, sino más bien cantautor por la variedad de géneros que mezclas. ¿Es así?
Julio: Así es. Más que todo, soy un cantautor que trata de abarcar una amplia gama de géneros y ritmos siempre fusionados con la música cubana, con lo más autóctono. Siempre pensando en el público nacional, pero sería interesante abarcar otros públicos también.
PMU: ¿Cómo definirías a un cantautor?
Julio: Un cantautor es un trasmisor social que toma de sus experiencias, o de las experiencias de sus congéneres, y es capaz de mediante una canción, expresar sentimientos, impresiones acerca de las cosas que lo rodean. Para mí, más que todo, un cantautor es un comunicador social y eso es lo que me interesa tocar en mis canciones, sin dejar de tocar temas como el amor, o disfrutar la vida.
PMU: ¿Hay muchos cantautores o trovadores en Trinidad? ¿Se juntan para hacer música o cada cual hace lo suyo por su parte?
Julio: No hay muchos cantautores en Trinidad. Ahora mismo podría hablarte de cuatro: Erwin, Carlos Rizo, Yaidy y yo, al menos que yo conozca. Hace poco, todos hicimos un concierto en El rincón de Pedrito. Pedrito era un trovador muy famoso de la trova cubana que murió hace como tres años, y como él siempre se presentaba allí, la gente le puso su nombre. Allí todos nos reunimos con un músico muy reconocido, Carlitos Irarragorri, pianista, trecero, bajista y arreglista, que tocó con Celia Cruz, Andy Montañez…, una verdadera gloria de la música cubana. Cada quien cantó como tres canciones, pero fuera de ese concierto, no hay nada establecido para hacerlo periódicamente.
Aunque es muy probable que en este nuevo año comience una peña en la que quiero combinar literatura y música, invitar a artistas de otras ciudades. Por allá por mi ciudad hay unos muchachos, los de Toques del Río, que sería una buena propuesta, y por supuesto, los músicos de aquí que te mencionaba.
PMU: Sería un buen comienzo para el 2016. Y antes de terminar me gustaría que me dieras tus impresiones acerca del discurso de las cantautoras que conoces. ¿Es muy diferente del de los hombres?
Julio: No creo que el discurso de las cantautoras se diferencie del de los hombres. Simplemente, no sé por qué no hay muchas, quizá hay un poco de temor a formar parte de un mundo en el que predominan los hombres, pero creo que el discurso no se diferencia. Incluso, muchas son mejores cantantes y mucho mejores compositoras que algunos cantautores con una carrera trascendental en la música. Simplemente, creo que el problema no es de calidad, sino de cantidad, y no he visto grandes diferencias en el discurso poético o cancionística de una cantautora y un cantautor, pues se tocan los mismos puntos, las mismas preocupaciones sociales.
PMU: Finalmente, ¿qué piensas del trabajo que realiza PMU?
Julio: La idea que mueve a PMU, más que todo, es revolucionaria y renovadora, pues trata de buscar lo más auténtico de la música. Porque ser underground, ser un cantautor sin apoyo de institución alguna, se hace difícil, muy difícil. Además de que es un reto porque trabajamos para un público exigente. El que escucha este tipo de música, por lo general, tiene cierta preparación y por tanto exige más. La preocupación y la promoción por el trabajo que realizamos es una labor bastante revolucionaria y más que todo, súper interesante, pues a las empresas de la música en Cuba no les interesa.
El panorama underground trinitario que nos ha dibujado Julio, habla por sí mismo de la importante y desinteresada labor de los creadores que como él, dedican el poco tiempo libre que les queda a comunicar con música, la Cuba real. Quedamos entonces al tanto de la realización de su primera peña, que deberá suceder en el año que recién comienza.
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