Una nueva historia en la Fábrica de Arte Cubano



El 7 de abril fui testigo de algo, que por suerte no me perdí, y es que New World hizo de las suyas en el complejo cultural que nunca duerme, la Fábrica de Arte Cubano (FAC). El joven grupo de música alternativa se presentó en la Sala Santiago Feliú (Nave 1) a las 10 de la noche, poniendo a los allí presentes a merced de su energía, y es que más que eso, fue lo que se nos ofreció en el lugar.

Compartí con Yosvel Álvarez, Francisco Lugo “El Incógnito” y Darian Trompeta “DJ Talent” en el camerino, minutos antes de comenzar la presentación y para unos jóvenes con poca experiencia en presentaciones realizadas en lugares como este, puedo decirles que los noté bastante seguros de lo que nos iban a ofrecer. Tengo que ser honesta, ya soy asidua participante de las peñas que este grupo ofrece los segundos miércoles de cada mes, en los Jardines del Mella y he visto varias de sus presentaciones, pero no tenía idea de la revolución que acontecería en la Nave 1 y menos conociendo al público que asiste a la FAC.

Unas cuantas personas merodeaban por el lugar, algunos esperaban de pie, otros sentados con su bebida en la mano e incluso hasta conectados, pero a partir del momento que sonaron las notas de “Escucha mi verdad”, tema con que abrieron el concierto, ya nada sería igual. Durante el tiempo que New World estuvo en el escenario, la calma se mudó de nave abandonando por completo el lugar. A este le siguieron temas como “Tras el cristal del amor”, “Mantente”, “Mi Habana” y “Macarena”, este último versionado en un estilo funky que puso a bailar a más de uno y es que esta agrupación transmite mucho a su público.

Es casi imposible ver una presentación de ellos y no dejarse llevar por su ritmo. Por supuesto, entre las canciones interpretadas no podía faltar un remix de “Santa”, tema de X Alfonso, donde el propio Yosvel participara cuando aún realizaba sus estudios primarios. Todos fueron partícipes de este momento levantando la mano y coreando: “Gente sin lunas y sin soles, gente sin jardín ni flores…”.

Sin duda alguna, a pesar de los nervios o emociones que pudieran haber existido en el momento, New World lo dejó todo en el escenario con este pequeño concierto “sin grietas” (me refiero a la ausencia alabada de problemas con el audio o de otra índole) con el que nos mostraron parte de su trabajo. Luego de esta noche, nos queda la curiosidad de saber qué más pueden mostrarnos estos jóvenes.

Para finalizar la jornada, New World bajó de las tablas no sin antes invitar a todos a disfrutar de su peña habitual en los Jardines del Mella. Los tracks de su primer disco Polisémico se esparcieron en la FAC y solo el tiempo limitado les puso freno, muy a pesar de un público que coreaba: “New World, New World”, y créame, no estoy dándole uso a mi imaginación ni mucho menos, fue bastante real para asombro de muchos, yo incluida, así que para qué negarlo.

Esa noche disfrutamos de una tremenda dosis de música alternativa mezclada lo mismo con funky que con rock, ritmos igual de enérgicos que contundentes, y así era imposible que alguien no moviera el cuerpo de pies a cabeza. Estos chicos se dejaron llevar por el entusiasmo de la presentación y con su estilo musical lograron contagiarnos a todos los presentes.

Es cierto que grupos como New World que defienden la música alternativa pasando por encima de todo género que esté de moda, no son la mayoría. Si además de esto, cuando los escuchas notas el talento que puede haber detrás, entonces queda una leve esperanza de que no todo esté perdido en cuanto a música se refiere.

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