Temblor telúrico en San Juan de los Yeras alcanzó magnitud de 7,2 en la escala de Chico Pro
30 de mayo de 2016
No se alarme usted ante el título del artículo y tampoco crea que PMU ahora dedica sus páginas a escribir sobre catástrofes naturales. Antes de entrar en materia, le aseguro se deleitará con la historia que leerá, cuyo eje central no es otro que el concierto que ofreció el rapero Chico Pro el pasado domingo 15 de mayo, a las cuatro de la tarde, en el centro recreativo El Casino, en San Juan de los Yeras, poblado donde este artista underground trabaja como panadero para ganarse la vida y sustentar a su familia.
Para ubicarle a usted más geográficamente, este terruño pertenece al municipio de Ranchuelo en la provincia de Villa Clara y es por demás, tierra natal de grandes de la cultura cubana como el escritor y poeta Samuel Feijoo.
Muchísima incertidumbre acompañaba al anfitrión del evento, que dicho sea de paso, pretende convertirse un una peña mensual, si no se oponen en el camino aquellos que siempre encuentran alguna brecha negativa en lo que hacen los artistas exponentes de este tipo de arte.
Así mismo, con numerosas dudas estaban también los invitados a participar en el espectáculo. Los raperos de la agrupación K-ba, quienes llegaron desde Santa Clara; Farise Noise y Mandy Yera, igualmente raperos pero procedentes desde La Habana y por supuesto, el público que acudiría al citado lugar. Un grupo de personas totalmente ajenas a este tipo de música y adaptados a lo tradicional, debido a las características inherentes a una población pueblerina y campesina, sin que nadie nos mal interprete.
El archiconocido y degradante reggaetón, la música popular bailable y géneros tradicionales de la música cubana, son generalmente los más bailados y escuchados en este lugar. Sin embargo, qué sorpresa nos llevamos todos los que estábamos allí. Aún no hemos podido explicarnos si fue por curiosidad o por puro gusto que llegaron hasta El Casino cerca de 100 personas ávidas de hip hop.
Todo comenzó cerca de las cinco con treinta minutos de la tarde mientras amenazaba la lluvia, que también se comportó y además, se detuvo para que los sanjuaneros disfrutaran y conocieran del talento de un individuo que ya consideran hijo adoptivo del territorio, y también de sus invitados.
El sitio es amplio. Se agruparon personas sentadas y de pie, mientras que otros curiosos asomaban por las ventanas de estilo colonial que posee el lugar. El escenario algo más que improvisado y rústico, pero mucho más que útil para la pandilla hip hopera que llegó hasta San Juan de los Yeras. Sobre cuatro mesas de aluminio unidas y acomodadas al estilo de una elegante plataforma, actuaron para todos los que allí estuvimos, Chico Pro, K-ba, Farise Noise y Mandy Yera.
Emotivas palabras de Chico Pro para la gente que le conoce y le pregunta a diario a qué hora estará listo el pan. Una breve explicación de lo qué es el hip hop y sus raíces, y un millón de gracias a todos por asistir y acompañarle, fue la antesala de “Con más menos y con menos más”, tema que ridiculiza a aquellos que por su acomodada condición económica creen tenerlo todo y verdaderamente carecen de sentimientos y espiritualidad.
Como suele ocurrir en los mejores espectáculos artísticos, las fallas técnicas dijeron presente desde el principio, pero como de costumbre, Chico Pro utilizó una salida inteligente y jocosa y jaraneó con la cola del pan y la calidad de este, además de improvisar también. Algo que habla mucho de su originalidad, frescura, profesionalidad y le destaca dentro del movimiento underground cubano.
El público alegre, educadísimo, apoyándole sin hipocresía, con puños arriba cada vez que el artista lo solicitaba.
Igualmente ocurrió con K-ba, Farise Noise y Mandy Yera, artistas que a pesar de estar acostumbrados a las presentaciones citadinas, no vacilaron en subir al escenario y dar lo mejor de sí a los sanjuaneros, quienes le acogieron con la hospitalidad característica de los habitantes de las áreas campestres. La química fue tanta, que los raperos participantes en el concierto incitaron al auditórium a sentir el rap que se hace de verdad y desde el corazón, ese rap que habla lo que muchos no quieren oír o no desean admitir.
A cambiar perspectivas y visualidad sobre la música underground y en específico sobre el hip hop, motivó este concierto que a muchos le hizo ver las aristas de un arte que se da a respetar por sí solo y que no lacera en lo más mínimo los valores más intrínsecos de la sociedad cubana, sino todo lo contrario, estimula desde su escenario a las transformaciones sociales en aras del bienestar de la ciudadanía y el planeta.
Poco después, Chico Pro aparecería nuevamente en la escena, pero esta vez para dejar atónitos a todos con la interpretación a capela del tema “Secuelas del caos”, sencillo incluido en la más reciente producción musical de K-tarsis, Versos de Carne y Hueso. El mismo hace alusión a las carencias y vicisitudes vividas por los cubanos durante el Período Especial y por supuesto, como su nombre lo indica, las huellas que dejó en las generaciones posteriores a la segunda mitad de los años 80 del pasado siglo, una etapa en la que hubo penurias económicas y morales de sobra en este país.
Poco más de una hora fue el tiempo concedido para el concierto por el dueño de El Casino y la verdad, la consideración y el respeto siempre ha caracterizado a Chico Pro, quien agradece en sobremanera que se abra esta puerta para él, ante tantas que permanecen cerradas desde hace años.
Para el final, por supuesto lo mejor, eso bien lo sabe un artista como él que lleva más de quince años rapeando a puro corazón. Apelar a la sensibilidad de los presentes interpretando el tema “La distancia”, el cual dedicó a su esposa que le ha acompañado en sus aventuras raperas durante más de 8 años, e incluir también en esta dedicatoria a la gente que le saluda y le sonríe a diario, a su queridísimo abuelo que hoy le mira desde otro lugar y evocar los meses que estuvo fuera del país llevando su rap a tierras venezolanas, hizo que todos aplaudieran hasta la saciedad y se pusieran de pie para escucharle más atentamente.
Mientras, los sanjuaneros que asistieron a la primera edición de la peña de Chico Pro en El Casino de San Juan de los Yeras se acercaron hasta la rústica plataforma para entonar y bailar junto a él “Mi rap”. Luego, subirían al escenario los invitados del evento y así entre abrazos, aplausos y sonrisas se cerró la primera página de lo que aspira ser toda una edición hip hopera, en una tierra donde el rap es hoy una completa novedad.
Ver fotos del evento
Comentarios Dejar un comentario
30 de mayo de 2016
No se alarme usted ante el título del artículo y tampoco crea que PMU ahora dedica sus páginas a escribir sobre catástrofes naturales. Antes de entrar en materia, le aseguro se deleitará con la historia que leerá, cuyo eje central no es otro que el concierto que ofreció el rapero Chico Pro el pasado domingo 15 de mayo, a las cuatro de la tarde, en el centro recreativo El Casino, en San Juan de los Yeras, poblado donde este artista underground trabaja como panadero para ganarse la vida y sustentar a su familia.
Para ubicarle a usted más geográficamente, este terruño pertenece al municipio de Ranchuelo en la provincia de Villa Clara y es por demás, tierra natal de grandes de la cultura cubana como el escritor y poeta Samuel Feijoo.
Muchísima incertidumbre acompañaba al anfitrión del evento, que dicho sea de paso, pretende convertirse un una peña mensual, si no se oponen en el camino aquellos que siempre encuentran alguna brecha negativa en lo que hacen los artistas exponentes de este tipo de arte.
Así mismo, con numerosas dudas estaban también los invitados a participar en el espectáculo. Los raperos de la agrupación K-ba, quienes llegaron desde Santa Clara; Farise Noise y Mandy Yera, igualmente raperos pero procedentes desde La Habana y por supuesto, el público que acudiría al citado lugar. Un grupo de personas totalmente ajenas a este tipo de música y adaptados a lo tradicional, debido a las características inherentes a una población pueblerina y campesina, sin que nadie nos mal interprete.
El archiconocido y degradante reggaetón, la música popular bailable y géneros tradicionales de la música cubana, son generalmente los más bailados y escuchados en este lugar. Sin embargo, qué sorpresa nos llevamos todos los que estábamos allí. Aún no hemos podido explicarnos si fue por curiosidad o por puro gusto que llegaron hasta El Casino cerca de 100 personas ávidas de hip hop.
Todo comenzó cerca de las cinco con treinta minutos de la tarde mientras amenazaba la lluvia, que también se comportó y además, se detuvo para que los sanjuaneros disfrutaran y conocieran del talento de un individuo que ya consideran hijo adoptivo del territorio, y también de sus invitados.
El sitio es amplio. Se agruparon personas sentadas y de pie, mientras que otros curiosos asomaban por las ventanas de estilo colonial que posee el lugar. El escenario algo más que improvisado y rústico, pero mucho más que útil para la pandilla hip hopera que llegó hasta San Juan de los Yeras. Sobre cuatro mesas de aluminio unidas y acomodadas al estilo de una elegante plataforma, actuaron para todos los que allí estuvimos, Chico Pro, K-ba, Farise Noise y Mandy Yera.
Emotivas palabras de Chico Pro para la gente que le conoce y le pregunta a diario a qué hora estará listo el pan. Una breve explicación de lo qué es el hip hop y sus raíces, y un millón de gracias a todos por asistir y acompañarle, fue la antesala de “Con más menos y con menos más”, tema que ridiculiza a aquellos que por su acomodada condición económica creen tenerlo todo y verdaderamente carecen de sentimientos y espiritualidad.
Como suele ocurrir en los mejores espectáculos artísticos, las fallas técnicas dijeron presente desde el principio, pero como de costumbre, Chico Pro utilizó una salida inteligente y jocosa y jaraneó con la cola del pan y la calidad de este, además de improvisar también. Algo que habla mucho de su originalidad, frescura, profesionalidad y le destaca dentro del movimiento underground cubano.
El público alegre, educadísimo, apoyándole sin hipocresía, con puños arriba cada vez que el artista lo solicitaba.
Igualmente ocurrió con K-ba, Farise Noise y Mandy Yera, artistas que a pesar de estar acostumbrados a las presentaciones citadinas, no vacilaron en subir al escenario y dar lo mejor de sí a los sanjuaneros, quienes le acogieron con la hospitalidad característica de los habitantes de las áreas campestres. La química fue tanta, que los raperos participantes en el concierto incitaron al auditórium a sentir el rap que se hace de verdad y desde el corazón, ese rap que habla lo que muchos no quieren oír o no desean admitir.
A cambiar perspectivas y visualidad sobre la música underground y en específico sobre el hip hop, motivó este concierto que a muchos le hizo ver las aristas de un arte que se da a respetar por sí solo y que no lacera en lo más mínimo los valores más intrínsecos de la sociedad cubana, sino todo lo contrario, estimula desde su escenario a las transformaciones sociales en aras del bienestar de la ciudadanía y el planeta.
Poco después, Chico Pro aparecería nuevamente en la escena, pero esta vez para dejar atónitos a todos con la interpretación a capela del tema “Secuelas del caos”, sencillo incluido en la más reciente producción musical de K-tarsis, Versos de Carne y Hueso. El mismo hace alusión a las carencias y vicisitudes vividas por los cubanos durante el Período Especial y por supuesto, como su nombre lo indica, las huellas que dejó en las generaciones posteriores a la segunda mitad de los años 80 del pasado siglo, una etapa en la que hubo penurias económicas y morales de sobra en este país.
Poco más de una hora fue el tiempo concedido para el concierto por el dueño de El Casino y la verdad, la consideración y el respeto siempre ha caracterizado a Chico Pro, quien agradece en sobremanera que se abra esta puerta para él, ante tantas que permanecen cerradas desde hace años.
Para el final, por supuesto lo mejor, eso bien lo sabe un artista como él que lleva más de quince años rapeando a puro corazón. Apelar a la sensibilidad de los presentes interpretando el tema “La distancia”, el cual dedicó a su esposa que le ha acompañado en sus aventuras raperas durante más de 8 años, e incluir también en esta dedicatoria a la gente que le saluda y le sonríe a diario, a su queridísimo abuelo que hoy le mira desde otro lugar y evocar los meses que estuvo fuera del país llevando su rap a tierras venezolanas, hizo que todos aplaudieran hasta la saciedad y se pusieran de pie para escucharle más atentamente.
Mientras, los sanjuaneros que asistieron a la primera edición de la peña de Chico Pro en El Casino de San Juan de los Yeras se acercaron hasta la rústica plataforma para entonar y bailar junto a él “Mi rap”. Luego, subirían al escenario los invitados del evento y así entre abrazos, aplausos y sonrisas se cerró la primera página de lo que aspira ser toda una edición hip hopera, en una tierra donde el rap es hoy una completa novedad.
Ver fotos del evento
Comentarios Dejar un comentario
- No hay comentarios en este momento.