Roxy (II Parte)



Era una niña de Jiguaní que le gustaba cantar y hoy es una joven artista que hace su vida en la ciudad de Santiago de Cuba, compitiendo con las noches de trova, son y el consabido reguetón. Tiene una manera peculiar de “colarse” donde quiera que esté una guitarra, un micrófono y un público dispuesto a escuchar algo diferente. Ella es Roxy, y PMU la sigue presentando.

PMU: Tienes una relación especial con la guitarra, eso se nota.

Roxy: La guitarra es…, cómo te digo, he aprendido a tocar más porque siempre está ahí. Tita…

PMU: ¿Tú le llamas Tita? ¿Has tenido otras? ¿Cuántos nombres han tenido tus guitarras?

Roxy: Sí, a esta guitarra le puse Tita. La primera se llamaba Mía. Por una canción. A la segunda no le puse nombre porque no me dio tiempo al romperse. Si tuve mi propia guitarra, es la que se rompió, la tengo todavía guardada en piezas, debe ser que la extraño. Quiero una electroacústica realmente. ¡El que me quiera regalar una que lo haga!

Y esta de ahora, eléctrica, con la que estoy trabajando, que no es mía, es de mi productor, Rayner Palacios, El Prof3, pero la trabajo yo. Es Tita, es un nombre chulo y está muy bonita. En mi vida había tocado una así, pero me llama la atención. Además, la gente dice que una mujer con una guitarra eléctrica se ve muy sexy, pega conmigo, ¿qué tú crees?

PMU: Dime de tus canciones, ¿cómo compones?

Roxy: Comencé a escribir desde que estaba estudiando la secundaria. Y mi primera canción fue porque me enamoré, estaba un poco cursi, ¡imagínate a esa edad! Pero después descubrí que se me hacía fácil escribir. Y empecé a escribir mucho, mucho, mucho. Lo desarrollé más en décimo grado, todas las canciones que escribía en ese tiempo eran de amor y de desamor, tú sabes, es el Pre, una etapa muy bonita. Cuando estoy pasando por una etapa de depresión, es que me da por escribir. Normalmente me pongo un pie forzado, un tema, y hago una canción.

PMU: Cuando escucho tus canciones, me parece que siempre hablan de amor…

Roxy: Sí, pero también de cosas que me afectan o de cosas que veo. Le hice una canción a un amigo hace mucho tiempo que falleció, pues su pérdida me afectó. Le hecho canciones a mi hermana, cuando discutimos. Ahora le estoy haciendo una canción a mi papá, es un reto muy fuerte. Es el típico padre que quiero con la vida, pero somos idénticos en el carácter, me da todo el dinero del mundo que me haga falta, pero eso no es lo que quiero, soy la hija mayor, pero piensa que soy una niña aún. Piensa que no voy a llegar a ser artista, que la vida de los músicos no es buena, que son todos unos locos…. Precisamente, uno de mis objetivos en la vida con mi música es demostrarle a él que sí se puede. Todavía no he podido encontrar las palabras ni la música adecuada para hacerle una canción a mi papá, de verdad que es un reto.

PMU: ¿Qué género musical prefieres?

Roxy: R&B, y claro, la fusión. Me gusta mucho el jazz fusionado con el blues, como lo que escucho con Amy Winehouse.

PMU: Te calificarías como cantante de…

Roxy: De música alternativa, en general.

PMU: Te gusta el rap, te he visto rapeando, en un free style duro…, fue algo muy emocionante.

Roxy: Sí, me gusta mucho, mucho, me ha ido bien. He tenido bulla de gente apoyándome, cuando una vez gané una batallita de gallos. Claro, que me atrevo demasiado, porque un día me voy a tocar con alguien que me ripie de verdad.

PMU: ¿Qué piensas de los grupos que se separan a los pocos años de formados, no por cuestiones profesionales, sino personales…?

Roxy: Cuando se forma una banda debe haber un comportamiento de familia. Y cada decisión, cada problema que tenga una persona dentro del grupo, todos lo tienen que saber, todos deben ayudarse entre sí, porque supuestamente deberían funcionar todos juntos. Si una pieza del grupo no funciona, no está funcionando completa la agrupación.

PMU: Hoy estás sola…

Roxy: Quizá algunas personas no entienden que mi decisión de estar sola, de estar en un proyecto diferente al que tenía, pero creo ahora estoy bien.

PMU: Planes futuros…

Roxy: Cantar con Danay Suárez. Es uno de mis sueños. Pienso grabar con Guámpara Music, quizá un demo lo más pronto posible, para acolchonar un poco la idea de sacar el video clip de la canción “Si tú me amaras” al aire, y ya tener más cosas producidas, mías solas, espero que funcione.

Esa niña que soñó mucho con llegar a ser una cantante, hoy me da una entrevista con disfonía, ronca, porque no puede aguantar: “Debería cuidarme más la voz y no tocar, pero cuando veo una guitarra me desespero, es imposible que no lo haga, es adictivo”, me cuenta a manera despedida.

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