Red Bull 2016, Perú y El Ciudadano



“En Lima, la capital de Perú, se reunieron algunos de los mejores raperos del planeta para luchar por el prestigioso título de Campeón del Mundo 2016 del Red Bull Batalla De Los Gallos”, así inició el titular de la página, dando a conocer lo que sucedería en este evento. Sin embargo, es desconocido para los cubanos la actividad donde se pone a prueba el talento de tantos amantes del hip hop con sus rimas e improvisaciones. Solo los raperos dedicados conocen de las batallas de gallos auspiciadas por la Red Bull, cada año, y en Cuba se conoce menos aun que vive su mejor “gallo” en Guantánamo y se trata de El Ciudadano.

El Ciudadano compitió en todos los eventos realizados en el país con vistas a participar en Perú 2016 y fue así como obtuvo el galardón de ser el mejor de Cuba. El joven rapero quedó atrapado con la experiencia adquirida en Perú y narra las mismas a PMU:

“2016 cerré por lo alto, con victorias, en el plano personal conocí a mi esposa y tuve mi primer bebé, una hija preciosa, y en lo profesional resulté ser el ganador de la Batalla de Gallos auspiciada por la Red Bull, para participar en Perú, en este evento, en el que aprendí muchas lecciones. Todo estuvo maravillosamente bien organizado, muy buena atención, no hubo fallos. En este sentido debo expresar que hubo discrepancias en cuanto al veredicto del jurado, soy una persona que si pierdo admito que perdí, competí con Valles T de Colombia y previo a la pelea ya hacíamos pesaje en el bus, hotel, habitación, siempre yo ganaba. En el escenario estaba seguro de que yo ganaría, pusieron los pies forzados, yo hablé más que él, tuve mejor coherencia, él me tiró con lo mismo que yo le tiré, todo fue espontáneo, nada preparado, cuando se dieron los resultados casi los 25 mil espectadores quedaron sin aplaudir, sorprendidos. Todo lo cual denotó que la pelea me fue quitada y pienso fue injusto. Oí varios criterios, pero bueno, lo importante es que llegué allí, tuve el placer de estar en el evento, que los cubanos no tienen esas oportunidades.

No imaginé que podía llegar y ahora soy consciente de que soy el mejor de Cuba y estoy entre los 16 raperos mejores del mundo hispanohablantes. Cuba se prepara para mí en el hip hop, la corona ahora la tengo yo y no quiero avasallar a mis colegas, preferiría que fueran varios los cubanos que pudieran participar y así seríamos varios que ostentemos esa categoría, lamentablemente no es así”.

El Ciudadano hace una pausa y sigue narrando: “Para obtener los logros, acá en mi país, no ha sido fácil. Por suerte para mí, ya tenía 4 años obteniendo los premios, ya había ganado en el programa de TV Cuerda Viva y en otros eventos, pero nadie dice nada porque soy de Guantánamo y de solo decirlo es como si no importara, porque se sabe que los guantanameros hemos estado siempre muy marginados. Tuve que ir a Camagüey, Villa Clara, etc., y siempre me tocó competir con el mejor de esa provincia. Al final se hizo la batalla de gallos en Matanzas y el contrincante era el Sicario, nadie me hablaba, en fin, pero gané, y lo mejor es que ganó Guantánamo, la provincia más subestimada, más pisoteada, la que apenas existe”.

“El triunfo me lo debo a mí mismo, sé lo que es sentirse pisoteado y me dije que debía revertir esa situación. Le dedico el título, aunque no lo traje, a mi pequeñita hija, que aunque no tiene capacidad todavía para saber qué sucede, es mi principal fuente de inspiración”.

A pesar de lo sucedido, este rapero asegura que llegó a Cuba con su frente en alto: “Fíjate si es así, que nadie me ha dicho que perdí. Pienso que reconocen lo hecho por mí en la batalla de gallos. El equipo de Red Bull en Cuba me apoya, así me lo hicieron saber. Quiero pensar que cuento con el apoyo de mi Cuba en eso y los que ya me conocen saben que doy para más, muy a pesar de la ignorancia que tengo sobre muchas cosas y las limitaciones con el acceso a Internet.

Dejé buenas relaciones en Perú, salieron muchos y me preguntaron qué podían regalarme y sin decir nada, enseguida me hicieron algunos regalos. Lo más importante es que regresé a mi país y me siento feliz por todo lo que viví. También me quedaron insatisfacciones, ya que pienso que por ser guantanamero y under no me hicieron ninguna entrevista, de ser habanero y/o no underground quizás salía en la televisión, radio, periódico, pero bueno me tocó ser de acá y por eso los resultados quedaron escondidos.

Pensé mal cuando imaginé que, gracias a mis logros, tendría la oportunidad de obtener los documentos que me acrediten como profesional, pero ya me di cuenta que es aun algo imposible para mí y peor para muchos de mis colegas, que ni siquiera tienen participación en algún evento de hip hop de esa categoría. Esos trámites son demasiado difíciles y más para nosotros, es por eso que seguiremos siendo underground”.

El Ciudadano para finalizar nos habló de sus proyectos para este año: “Tengo varios proyectos este 2017, el primero es volver a ganar en la Red Bull. Además, mantengo asunto pendiente con Valles T, ya que le dije en el bus que le habían regalado la pelea y se quedó callado, y quien calla otorga. El otro proyecto es promocionar los dos discos que grabé tan pronto como llegué de Perú. Considero que el día que a alguien le pase por la mente perder, pierde, es por eso que no tengo esa idea, de ahí mis esfuerzos y resultados.

Gracias a PMU porque aunque algo alejado en el tiempo, no es tarde para dar a conocer sobre estos resultados”, concluyó este Ciudadano cubano y de Guantánamo, con nuevas aspiraciones y resultados muy buenos, pero también insatisfecho, preocupado por el futuro del hip hop en la Isla y, además, firme en su vocación cultural y convicciones.

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Comentarios   Dejar un comentario
La Guantanamera
13 de febrero, 2017 12:23 pm (GMT-5:00)
No sabía que teníamos el mejor de Gallo en Guantánamo, de esto no se habló nada hasta ahora, gracias doy yo también a pmu por esta posibilidad.
El ciudadano tiene la razón cuando habla de la posición geográfica y sus marginaciones, pmu ha dado cobertura al movimiento under de gtmo y me siento contenta por ello, gracias de nuevo.