Voces y pinceles arriba de K’Bolá en honor a Bob Marley (Parte I)



Un toque Nyahbinghi, un viajero alemán que escribe poemas en español y ama la música underground, Sandor de Estudiante sin Semilla mostrando su quehacer como solista, Yaser, artista del spoken word, y Contratiempo haciendo su mejor reggae, animaron la noche del 16 de mayo, en una nueva peña del proyecto K’Bolá, en el centro-sur de Cuba. Mejor imposible, dirían algunos.

Dedicada a la memoria del grande del reggae y su filosofía de vida, abrió la agrupación Los Hijos de Israel. Los tambores Nyahbinghi comandados por Rafael y Yoan mientras Marilú y Elisa hacían los coros, colorearon el escenario con sus trajes típicos. También convidaron a Sandor, que se encargó de una especie de maracas y, por primera vez en estas peñas, la hermandad rastafari mostró lo que, la mayoría de las veces, hacen en privado. Más tarde se sumó Yaser, que entregó el tema “Cruzando el desierto” para cerrar el espacio dedicado al toque Nyahbinghi.

La poesía “Tú y yo” con un background de DJ Freaky, fue el segundo tema de spoken word, esta vez mucho más enérgico, y siguió Contratiempo que invitó a Xiomi, integrante del dúo D’Arezzo, quien combinó voces, guitarras y cajón acústico.

Sandor volvió al escenario para compartir con la joven banda de reggae, mientras otra sorpresa esperaba mezclada entre el público. Fue entonces que el aventurero alemán Maurice Meijer tomó el micrófono sin remilgos y declamó uno de sus poemas. Una carga de emociones, que ha ido nutriendo en sus viajes por América Latina, se adueñó de la atmósfera. Con estos versos:

La máquina de escribir es mi instrumento
soy cantante del viento
entre las sombras caminamos, en la
madrugada de siempre
una nueva mañana…

El concierto cerraba con broche de oro, al calor de la interpretación por Sandor de su emblemático tema “Trabaja que trabaja”, perteneciente al disco Diáspora ilegal.

Mientras todo esto sucedía en escena, con pinceles, espátulas, spray o un simple paño, los artistas plásticos que integran el proyecto K’Bolá ofrecieron, de la manera que mejor saben hacerlo, el respeto y la admiración por Bob Marley, inspirados en la igualdad y la paz que una vez fueron protagonistas en la creación musical del grande del reggae.

PMU se encontró con cada artista de este evento y aquí van las impresiones de cada uno, comenzando con Maurice Meijer que habló de la inspiración para sus poemas: “Estoy viajando por Latinoamérica. Antes de saber el español aprendí portugués, viví en Portugal, después viajé por Brasil, Perú, Ecuador, Colombia y, probablemente allá, en Colombia, fue donde aprendí más el español. Me inspira la calle, las personas que veo y encuentro, la naturaleza, momentos bonitos, problemas sociales, muchas cosas. He viajado por el Oriente de Cuba, después me quedé mucho tiempo en La Habana, fui a Pinar del Río, Las Terrazas, me encanta la naturaleza, aquí también fui a El Nicho, me inspiran muchas cosas y así voy escribiendo.

PMU: ¿Cómo llegaste a la peña de K’Bolá?

Maurice Meijer: Me gusta la música alternativa, underground, si algo es diferente, me llama la atención. Los muchachos de la Galería Poco Bonito son mis amigos y me gusta la idea, son todos muy buenas personas, hay una buena energía. Llegué a la peña también porque Sandor, de Estudiante sin Semilla, me conocía de La Habana y cuando conversamos sobre poesía me dijo que sería bueno que yo hoy declamara un poema y así pasó.

Maurice no había titulado su obra y luego de nuestra breve conversación se le ocurrió llamarlo “Caminante del viento”.

A continuación hablamos con Rafael, uno de los expertos en el toque Nyahbinghi.

PMU: ¿En qué consiste el toque Nyahbinghi?

Rafael: Es un toque ancestral que se hacía en las congregaciones para hacer alabanzas al Señor, cobrar fuerza espiritual y despojarse de energías negativas. Nació en Etiopía y se trasladó a Jamaica a través de la trata de esclavos. En Jamaica, uno de los principales asentamientos de rebeldía antiesclavista, empezaron a surgir los primeros núcleos rastafari que hacían los toques, principalmente, en zonas rurales, para evitar el maltrato de que eran víctimas en las zonas urbanas.

PMU: ¿Por qué decidieron llamarse Los Hijos de Israel?

Rafael: La génesis del país Israel está relacionada con el éxodo africano y algunos afirman que los hebreos salieron de la zona de Etiopía, fueron esclavos de los faraones egipcios, atravesaron el desierto de Sinaí y llegaron hasta lo que hoy es Israel, por eso le pusimos ese nombre al grupo.

La agrupación cuando se presenta en actos públicos casi siempre lo hace con cuatro hermanos, pero cuando reciben a los correligionarios de otras provincias activan los demás tambores. Si van al monte, alrededor de una fogata, se pasan la noche entera tocando y todos pueden experimentar con los tambores excepto las mujeres, pues la Orden Nyahbinghi así lo establece desde tiempos ancestrales. Rafael, Yoan, Francisco, Julio, Félix, Marilú y Elisa son los más constantes.

La religiosidad y la música van unidas cuando hablamos de la cultura rastafari. En el camino del mejoramiento humano y la creación surgen amistades entrañables, como Sandor y Melito, integrantes de Estudiante sin Semilla. Sin embargo, ante la partida de Melito a España, Sandor ha tenido que arreglárselas y luchar. Entre cucharada y cucharada de su primera comida del día, Sandor nos habló de esto: “La partida de mi hermano Melito a España fue un proceso difícil, pero bueno, las cosas son de Dios y solo Él sabe las cosas. A la vez pienso que me ha ayudado a verme a mí mismo como artista y a impulsarme en mi carrera en solitario. Me quedé con todas las cosas que Melito me pudo enseñar, cuando partió fue como perder una costilla, pero me senté a pensar en todo lo que me dejó. Me dejó un camino para seguir adelante y es lo que he tratado de hacer. Por ahora, he logrado algunas cosas, terminé los tres temas que le faltaban al disco Diáspora ilegal, ya le realicé dos videos, uno del tema “Trabaja que trabaja” y otro a la canción Despenaliza. Lo presenté en mi casa, en un evento independiente que realizamos unos amigos y yo, en el pasado mes de abril y aquí vine a seguir promocionándolo. Ahora mismo, también, estoy trabajando en la preparación del siguiente disco que se llama Despertar libertad.

Cuando nos disponíamos a dedicarles un especial a los artistas plásticos que realizaron un trabajo admirable, Carlos Infante hizo un llamado de atención, que le aceleró el ritmo a Yaser y a Sandor para que llegaran al patio del Café Teatro Terry, porque Rolo Rivera y su Fábrika Alternativa querían improvisar una descarga con los artistas invitados.

Hasta allá nos fuimos y la noche no podía ser más prometedora. Sin ensayo previo, Sandor subió a la pequeña plataforma seguido de Yaser que nos regaló “Regeneración” y todo quedó a pedir de boca. Solo resta invitarlos a leer la segunda parte de este trabajo que revela el aporte esencial de los artistas plásticos que complementan cada entrega underground de K’Bolá.

Ver fotos del evento

Leer la segunda parte

Atrás


Comentarios   Dejar un comentario
No hay comentarios en este momento.