Yosotros –Hip Hop cubano–, una plataforma para debate sobre el movimiento hiphopero cubano



De la mano del poeta urbano del spoken word Elier Álvarez (El Brujo) surgió esta iniciativa en la conocida red social de Facebook, ante la necesidad de crear espacios de debate para la cultura hiphopera cubana.

Para nadie es un secreto que los escenarios de presentación –que son vitales para los artistas de la música rap–, así como de espacios de expresión y debate sobre el hip hop cubano, siempre han sido complicados por razones bien conocidas, pero en los últimos tiempos, la atomización y dispersión de los raperos, la ineficacia de la Agencia Cubana de Rap, así como el aislamiento de los activistas del hip hop, dan la impresión que el rap cubano va camino a entrar en una peligrosa zona de silencio. Pero que no cunda el pánico, las raperas y raperos continúan trabajando, pero está claro que lo están haciendo desde zonas marginadas, con poca o casi ninguna difusión y, lo más importante, en la actualidad: conexión.

El caso de los simposios del hip hop y rap, eventos teóricos y musicales de alta importancia para la retroalimentación y el desarrollo, es preocupante, ya que su difusión ha adquirido un carácter desértico.

En las redes sociales, el activismo hiphopero cubano es escaso. Aunque existen varias páginas personales, como por ejemplo, las páginas en Facebook de los activistas Elier Álvarez y Alejandro Zamora Montes, por tan solo citar dos casos, a pesar del esfuerzo on-line de estas personas comprometidas, que mantienen latiendo el pulso sobre los debates del rap y el hip hop en Cuba, la resonancia es pobre, de ahí que Yosotros venga a ser una alternativa de nuclear y multiplicar las voces del activismo dentro y fuera de la Isla.

Si de publicaciones se trata, el pronóstico no puede ser más desolador. La revista Movimiento, única de su tipo en Cuba, tuvo su último número en el 2012, y no parece que vaya a resucitar de su muerte, ni tan siquiera como zombi, al estilo de Walking Dead. Otro tanto ocurrió con el interesante proyecto independiente Miselanium. Hasta el momento, solo esta revista digital independiente está llenando ese necesario espacio en las publicaciones sobre rap y hip hop. Si el despegue es favorable, con un buen equipo de trabajo editorial, en un futuro no muy lejano Yosotros podría generar una publicación.

Por otra parte, Alejandro Zamora Montes, en un artículo titulado “El Rap semanal” publicado en la revista independiente Cuba Posible, alerta sobre la inexistencia de rap cubano en el conocido Paquete Semanal. “¿Por qué casi no hay rap en él?”, se pregunta Zamora en el citado texto. Reconoce, no sin dolor, que incluso esta plataforma informal de los medios de comunicación, que brinda enormes posibilidades de promoción y publicidad, ha sido soslayada por los raperos. Si aprende de esta lección, Yosotros puede contemplar la opción del Paquete Semanal, como parte imprescindible de su itinerario de difusión.

Hay que decir que Yosotros comenzó con buen paso. Con apenas tres semanas de formado, ya puede notarse que la sangre del rap y el hip hop comienza a bombear. Promociones, debates, foros, entre otras conocidas posibilidades que brinda la red social de Facebook, constituyen un nuevo escenario para fomentar el activismo, nuevos proyectos, conocer sobre las nuevas creaciones de rap, y también como un puente para reconectar a la vieja escuela del hip hop, contando con personalidades del tema como Pablo Herrera, con las nuevas generaciones que llegan y tienen mucho que aportar. Esperemos que la interacción multivalente que brindan las redes sociales, en particular Facebook, ayude a abrir más puertas en el maltrecho escenario del movimiento hip hop cubano.

Los desafíos son legión. Sabemos que la conexión de internet en Cuba tiene sus altas y sus bajas. La calidad de su estatus actual continúa en la categoría de precariedad. A esto se suman las carencias económicas en la adquisición de medios computacionales. Tampoco podemos olvidar a las jaurías que no desean que ningún proyecto alternativo ocurra y para ello se ocupan sistemáticamente de sembrar la división y el descontento para mantener disgregados y divididos a todos aquellos que ven en el hip hop una filosofía de vida y en el rap, un género musical que sirve de expresión liberadora. Pero ese no es único mal, hay que decirlo: basta de quejas y autocomplacencia. Una nueva puerta en la web se ha abierto, aprovechémosla, démosles vitalidad, para que el rap y el hip hop cubanos vuelvan a recuperar el lugar que merecen en la cultura urbana de nuestro país.

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