Aviso en las redes sociales: K’Bolá tiene un propósito claro
14 de agosto de 2017
“Y todavía hay gente que se sigue equivocando con K’Bolá Project”, iniciaba el comentario que Carlos Infante, principal organizador de este proyecto cienfueguero publicaba en Facebook. Continuaba abajo explicando los sucesos que provocaron su intervención en las redes sociales: “El jueves 30 de junio K’Bolá fue invitado a participar en el Festival de Música Alternativa en la ciudad de Cienfuegos. Gracias al Migue por la deferencia, ya de a poco se va reconociendo nuestro trabajo, aunque a decir verdad, la gente que no está en la ‘cuerda boba’, hace rato nos están descargando. Buenos músicos en el evento aunque Alternativo no sería el adjetivo que utilizaría para describirlo”.
Efectivamente, hace varios años que K’Bolá viene desarrollando de forma independiente y prácticamente sin apoyo institucional, una visión del mundo que han expresado tanto en las obras plásticas de los miembros del proyecto como en la música de los artistas que a lo largo de toda Cuba han ido conociendo e invitando a su espacio. En los últimos meses, solo Miguel Cañella, director del Teatro Tomás Terry, ha abierto las puertas a estos muchachos y a su propuesta alternativa y aclaro, alternativa y underground, contrapuesta a todos los modelos oficialmente establecidos.
El llamado Festival de Música Alternativa, que en su cuarta edición los invitó, ha sido la plataforma de muchos de los músicos que programas oficiales como “Lucas” visualiza constantemente, por tanto, para cualquier buen entendedor, el evento no es, en esencia, lo que dice promover.
De estos temas, en una entrevista que PMU consideró necesaria hacer a Carlos, este ampliaba: “Nos insertaron por una propuesta del director del teatro Tomás Terry, que no es precisamente el director del festival. Por lo que estuve viendo, me parece que los dueños del festival son los integrantes del grupo Karamba. Te lo digo porque en un concierto al que asistí, el vocalista habló de cómo le había presentado el proyecto del festival a Javier el del gobierno y él lo aprobó. Por eso, en medio del concierto agradeció específicamente a Javier. Lo que sucede es que en otras ocasiones las sedes han sido dispersas, esta vez estuvo casi todo concentrado en el teatro o lugares aledaños. Nosotros venimos trabajando en el teatro desde enero y están muy contentos con nosotros, porque somos disciplinados y hasta ahora todo está bien con ellos. A partir de ese mismo trabajo se le ocurrió a Cañella invitarnos y aceptamos”.
El pasado 30 de junio, como bien explica Carlos en su comentario, se había acordado que compartieran el espacio frente al Patio Terry los artistas de K’Bolá y Álvaro DJ, desde las 5 p.m. hasta las 7 p.m. Allí, delante de uno de los carteles promocionales del evento realizados por Tooth Fairy, miembro de K’Bolá, debía empezar DJ Freaky con música de contenido social, al tiempo que los plásticos hacían su action painting. Sin embargo, “eso no fue lo que sucedió, así que si alguien fue a ver a K’Bolá, que pase por la taquilla para que le devuelvan su dinero,” recalcó Carlos en su mensaje.
Entre las principales preocupaciones de K’Bolá, confesadas en la entrevista, está el respeto al público comprometido con el proyecto y que ha sido parte importante en su evolución. “De momento, nosotros dimos promoción a la presencia de K’Bolá ese día, nosotros tenemos un público. La gente que nos sigue se hubiera sentido defraudados y quienquiera que ponga su música, aprovechando ese tipo de público, también se está aprovechando del trabajo que nosotros llevamos haciendo por varios años.”
¿Malentendidos o mala intención? En lugar de la retórica, K’Bolá prefiere los mensajes directos y así lo expresó Carlos Infante en la última parte de su comunicado en las redes: “K’Bolá lleva ya un tiempo en la escena y se ha caracterizado por echar una música de compromiso social y no una ‘musiquita de mueve los pies y sube las manos’ que fue lo que pusieron allí, más que nada por culpa de uno que se hace llamar DJ, el verdadero DJ se sintoniza con el espacio y poncha la música de acuerdo a la vibración que exista, el mal DJ impone su música al público porque tiene un ego que no cabe en un edificio de 18 plantas”.
Pocas veces nos atrevemos a llamar las cosas por su nombre, pero K’Bolá es una excepción de la regla. Se han convertido en un proyecto underground de referencia para toda Cuba, y no son palabras de quien suscribe, sino de muchos artistas que comparten, defienden y siguen enriqueciendo ese discurso sincero. David D’Omni, Con100cia, Pedrito de la AKDmia, Cuentas Claras, El Analista, Chico Pro, El Gatillo, Solda2 Razo, Raudel Escuadrón, y otros muchos conforman la larga lista de músicos que cuentan con K’Bolá, y esa lista sigue creciendo al igual que el respeto hacia su trabajo. Para sus miembros no es admisible equivocación conceptual alguna.
“K’Bolá comenzó por una necesidad de abordar temas de orden social, el racismo, el irrespeto a la mujer, la falta de ética, ese tipo de cosas que nos molestan y quisiéramos hacer algo al respecto. Habíamos hecho otras cosas antes de K’Bolá, pero fue K’Bolá la respuesta a cómo viabilizar todo eso a través de la música y las artes plásticas. O sea, que si la música no tiene ningún sentido ya no tiene nada que ver con K’Bolá y en el caso de la plástica que es un poco más personal, la mayoría de las veces los artistas se inspiran en la música que ponemos o traemos. La música tiene que estar comprometida con su tiempo”. Así concluía Carlos Infante, que habló con nosotros en nombre de todos y cada uno de los miembros y colaboradores de K’Bolá, pero esencialmente se dirigió al público que los han seguido por casi cuatro años de trabajo “bajo las balas”.
Comentarios Dejar un comentario
14 de agosto de 2017
“Y todavía hay gente que se sigue equivocando con K’Bolá Project”, iniciaba el comentario que Carlos Infante, principal organizador de este proyecto cienfueguero publicaba en Facebook. Continuaba abajo explicando los sucesos que provocaron su intervención en las redes sociales: “El jueves 30 de junio K’Bolá fue invitado a participar en el Festival de Música Alternativa en la ciudad de Cienfuegos. Gracias al Migue por la deferencia, ya de a poco se va reconociendo nuestro trabajo, aunque a decir verdad, la gente que no está en la ‘cuerda boba’, hace rato nos están descargando. Buenos músicos en el evento aunque Alternativo no sería el adjetivo que utilizaría para describirlo”.
Efectivamente, hace varios años que K’Bolá viene desarrollando de forma independiente y prácticamente sin apoyo institucional, una visión del mundo que han expresado tanto en las obras plásticas de los miembros del proyecto como en la música de los artistas que a lo largo de toda Cuba han ido conociendo e invitando a su espacio. En los últimos meses, solo Miguel Cañella, director del Teatro Tomás Terry, ha abierto las puertas a estos muchachos y a su propuesta alternativa y aclaro, alternativa y underground, contrapuesta a todos los modelos oficialmente establecidos.
El llamado Festival de Música Alternativa, que en su cuarta edición los invitó, ha sido la plataforma de muchos de los músicos que programas oficiales como “Lucas” visualiza constantemente, por tanto, para cualquier buen entendedor, el evento no es, en esencia, lo que dice promover.
De estos temas, en una entrevista que PMU consideró necesaria hacer a Carlos, este ampliaba: “Nos insertaron por una propuesta del director del teatro Tomás Terry, que no es precisamente el director del festival. Por lo que estuve viendo, me parece que los dueños del festival son los integrantes del grupo Karamba. Te lo digo porque en un concierto al que asistí, el vocalista habló de cómo le había presentado el proyecto del festival a Javier el del gobierno y él lo aprobó. Por eso, en medio del concierto agradeció específicamente a Javier. Lo que sucede es que en otras ocasiones las sedes han sido dispersas, esta vez estuvo casi todo concentrado en el teatro o lugares aledaños. Nosotros venimos trabajando en el teatro desde enero y están muy contentos con nosotros, porque somos disciplinados y hasta ahora todo está bien con ellos. A partir de ese mismo trabajo se le ocurrió a Cañella invitarnos y aceptamos”.
El pasado 30 de junio, como bien explica Carlos en su comentario, se había acordado que compartieran el espacio frente al Patio Terry los artistas de K’Bolá y Álvaro DJ, desde las 5 p.m. hasta las 7 p.m. Allí, delante de uno de los carteles promocionales del evento realizados por Tooth Fairy, miembro de K’Bolá, debía empezar DJ Freaky con música de contenido social, al tiempo que los plásticos hacían su action painting. Sin embargo, “eso no fue lo que sucedió, así que si alguien fue a ver a K’Bolá, que pase por la taquilla para que le devuelvan su dinero,” recalcó Carlos en su mensaje.
Entre las principales preocupaciones de K’Bolá, confesadas en la entrevista, está el respeto al público comprometido con el proyecto y que ha sido parte importante en su evolución. “De momento, nosotros dimos promoción a la presencia de K’Bolá ese día, nosotros tenemos un público. La gente que nos sigue se hubiera sentido defraudados y quienquiera que ponga su música, aprovechando ese tipo de público, también se está aprovechando del trabajo que nosotros llevamos haciendo por varios años.”
¿Malentendidos o mala intención? En lugar de la retórica, K’Bolá prefiere los mensajes directos y así lo expresó Carlos Infante en la última parte de su comunicado en las redes: “K’Bolá lleva ya un tiempo en la escena y se ha caracterizado por echar una música de compromiso social y no una ‘musiquita de mueve los pies y sube las manos’ que fue lo que pusieron allí, más que nada por culpa de uno que se hace llamar DJ, el verdadero DJ se sintoniza con el espacio y poncha la música de acuerdo a la vibración que exista, el mal DJ impone su música al público porque tiene un ego que no cabe en un edificio de 18 plantas”.
Pocas veces nos atrevemos a llamar las cosas por su nombre, pero K’Bolá es una excepción de la regla. Se han convertido en un proyecto underground de referencia para toda Cuba, y no son palabras de quien suscribe, sino de muchos artistas que comparten, defienden y siguen enriqueciendo ese discurso sincero. David D’Omni, Con100cia, Pedrito de la AKDmia, Cuentas Claras, El Analista, Chico Pro, El Gatillo, Solda2 Razo, Raudel Escuadrón, y otros muchos conforman la larga lista de músicos que cuentan con K’Bolá, y esa lista sigue creciendo al igual que el respeto hacia su trabajo. Para sus miembros no es admisible equivocación conceptual alguna.
“K’Bolá comenzó por una necesidad de abordar temas de orden social, el racismo, el irrespeto a la mujer, la falta de ética, ese tipo de cosas que nos molestan y quisiéramos hacer algo al respecto. Habíamos hecho otras cosas antes de K’Bolá, pero fue K’Bolá la respuesta a cómo viabilizar todo eso a través de la música y las artes plásticas. O sea, que si la música no tiene ningún sentido ya no tiene nada que ver con K’Bolá y en el caso de la plástica que es un poco más personal, la mayoría de las veces los artistas se inspiran en la música que ponemos o traemos. La música tiene que estar comprometida con su tiempo”. Así concluía Carlos Infante, que habló con nosotros en nombre de todos y cada uno de los miembros y colaboradores de K’Bolá, pero esencialmente se dirigió al público que los han seguido por casi cuatro años de trabajo “bajo las balas”.
Comentarios Dejar un comentario
- No hay comentarios en este momento.