Rap guantanamero encuentra nuevos espacios



Noche de sábado en el barrio San Justo, ubicado al este de la ciudad de Guantánamo, la Compañía de Danza Babul abre sus puertas al público que, impaciente, espera para entrar. ¡Sorpresa!, ¿qué sucede aquí hoy? Es que esta compañía decidió ayudar a algunos raperos de experiencia para que se presenten y desarrollen sus talentos, esta vez raperos como El Carnal Pochy, Yunier Empi, Artesano de la Rima, Visabierta y El Gemelo del Rap dan inicio al Proyecto La Comandancia, que espera poder continuar cada mes, los últimos sábados, en esta misma zona y llamada por ellos como “del puente pa’llá”. Podrán asistir a estos espacios todos los seguidores del rap en la provincia y visitantes, pero está especialmente dedicado a los pobladores de San Justo, pues poseen pocos lugares donde recrearse y la marginalidad se adueña de muchos.

En esta ocasión, el público es escaso, el audio está deficiente, pues el local no está diseñado para hacer este tipo de espectáculos, con un público donde priman los adolescentes y algunos jóvenes, pero no faltan el amor y la buena voluntad de los raperos.

Comienza la actividad y abre El Artesano de la Rima (Giannis Alcántara González), quien desde hace unos meses atrás comienza a ganar fans, y con ello aparecen algunos que desean dedicarles temas, que lejos de disminuir su autoestima lo elevan al punto más alto de sus mejores cualidades como artista y es así como decidió crear un tema como contrapunteo y logra dejar a todos bocas abiertas con esa interpretación. “Todo cuanto logran algunos fans al intentar oponerse a un rapero conocido y gustado por su propio público es enaltecer esa figura y que se crezca ante las críticas, se supere y perfeccione cada vez más”, fueron algunas de las palabras emitidas por Omar García Pérez, un seguidor del movimiento underground en esta provincia.

El ambiente esa noche comienza a calentarse con la realización de una serie de improvisaciones entre raperos como el Zicario, Artesano de la Rima y Visabierta. Ante el calor de los raperos, el sonidista se asustó, salió de la cabina de audio y susurró al Carnal Pochy algo a su oído, parecía que habría que interrumpir el evento, su desconocimiento lo desconcertó de sobremanera, no se movió del escenario hasta que hubo terminado la presentación del trío, pensó habría alguna pelea entre ellos y él tendría que intervenir, el público se reía, aplaudía, gritaba, chiflaba, hacían ver a los demás que tenían cultura del rap y que eso es normal en estos eventos, así que él no tuvo más que reincorporarse a su trabajo y disfrutar del resto de la actividad.

El Gemelo del Rap (Yasniel Zulueta Figueroa) hizo gala de su talento musical y sentido de la composición, dedicó temas a situaciones de la vida cotidiana, a la vez que sugirió a todos a no perder las esperanzas y a luchar hasta conseguir las metas. No podía faltar unas letras para su madre y el entrañable amor que siente por ella, describió las hazañas que ella hizo para criar a su pareja de gemelos, exhortando también a los oyentes que cuiden a sus madres por su significado. Para terminar su presentación dedicó un tema al amor que siente por su esposa y como lo ha atrapado de manera sin igual, canción que montó hace dos semanas y aún no está grabado el tema.

Yunier Empi (Yunier Carbonell) actualizó a los miembros del público sobre el significado de sus temas musicales y presentó temas ya conocidos dedicados a los vecinos que siempre observan y comentan, critican y blasfeman de los demás, también a los envidiosos y hacedores de maldad, a los afanados por el dinero y las cosas que son capaces de hacer por obtenerlo, acciones que intentan destruir a muchos, a dividir a la familia y amistades y sin saber atentan contra el buen desempeño de las relaciones sociales de la población. Siempre con sus característicos movimientos, su expresividad, carisma y cariño, con una sonrisa en sus labios y buen ánimo, cualidades que en él nunca faltan y todos siempre esperan.

Visabierta (integrada por Lorenzo Sabourin Malvén y Ernesto Planche Moracén) hizo gala de sus composiciones al interpretar temas dedicados a problemas sociales, como vivir de apariencias y estar llenos de problemas a resolver, no tener alimentos para los hijos, casas en mal estado, entre otros.

Reapareció en el escenario Trato de Nota (Abel Alejandro Naranjo Isaac), un joven rapero casi desconocido por la mayoría de los seguidores, se había alejado por cuestiones personales y económicas, decidió reincorporarse luego de mejorar en algunas cuestiones y observar el camino tomado hoy por el rap en Guantánamo.

El Carnal Pochy (Eudys Ramírez Marcillí) es hoy un paradigma en San Justo, su barrio, todo el público se puso de pie, lo esperaban hacía rato y cerró el espectáculo esta vez, pidió aplausos para todos los raperos que se presentaron esa noche, pidió bendiciones de Dios para todos los presentes, amigos y hasta para los enemigos también. Cantó con euforia y agresividad, le pidió a Dios les dé fuerzas a todos los necesitados, huérfanos y demás, para continuar enfrentando los problemas que se presentan a cada uno. Dedicó un tema al amor, pero haciendo rap conciencia, sugiriendo a todos que amen; logró emocionar a los oyentes, todos escuchaban con atención, los hizo reflexionar una vez más y aplausos no faltaron. No por gusto es tan esperado y querido por sus fans.

El segundo tema de la noche fue dedicado a los que siempre tienen esperanzas y/o la necesitan. Se mantuvo la atención de todos. “El haber nacido no es una condena, la esperanza es buena y siempre encuentras quien te quiera”, fue parte de la letra de esa canción. Expresó además que los raperos son marginados y muchos creen que son cualquier tipo de personas, pero entre ellos los hay médicos, ingenieros, licenciados, estudiantes universitarios, y los que no lo son, pues tienen un trabajo decente. Dijo también que los raperos no solo echan cualquier tema, sino que hacen hip hop conciencia y de mucho sentimiento.

El público se mantuvo exaltado con el estribillo tan gustado que compuso El Carnal: “Negronas, negrones, mi gente dice A, mi gente dice One, one, one”. Cada rapero improvisó para cerrar con broche de oro, a modo de descarga. Subió el calor, fueron tomadas fotografías, todos de pie, tarareando, subieron al escenario, algunos tomaron los micrófonos en manos y cantaron junto a los artistas. Increíble el gusto de los fans, su fidelidad, disciplina, alegría, quietud, todo impresionante para los trabajadores de la compañía de danza.

Esperamos que este proyecto pueda tener continuidad y no suceda igual o similar con el proyecto La Corte Oriente, que fue truncado por no existir locales, audios, apoyo, y otras cuestiones logísticas.

¡Gracias a los raperos por su voluntad y amor!

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