Antagon

My Fate

31 de agosto de 2015





Calificación: 4.5 / 5

El metal sinfónico continúa abriéndose paso dentro de la escena cubana para beneplácito del ferviente ejército de seguidores que posee. La capital es su principal enclave, pero en provincias distantes también ha prosperado, como es el caso de Camagüey. Su principal exponente en ese territorio central es Antagon, banda que se ha convertido además, en una de las mejores representantes del género en el país. Después de varios años de constante bregar, parece haber fraguado un escudo con la frase del escritor británico Samuel Johnson: “La confianza en sí mismo es requisito para las grandes conquistas”.

Su intensa labor es una estupenda noticia, porque frecuentemente surgen bandas de vida bastante efímera o que se refugian rápido en géneros comerciales. Incluso, a veces no nos damos cuenta porque cambian de nombre y se alejan totalmente de la sonoridad inicial. Los cambios son algo natural, pero las verdaderas convicciones son una especie de faro que guía el curso de quienes navegan en las agitadas aguas del underground cubano. En este sentido, todo indica que Antagon apuesta todas las cartas a su devoción por el metal sinfónico, pues apenas está comenzando a circular este demo y ya está enfrascada en el proceso creativo de otro similar. Los antecedentes apuntan a que cuando coexiste la creatividad y la voluntad, el éxito se encuentra a la vuelta de la esquina.

Los artífices de este demo fueron la hermosa vocalista Danay Pérez Batista, el vocalista Alberto Delgado Fragoso, el baterista Asniel Armando Pérez Santos, el bajista Ricardo Iglesias Rivera, el teclista Dariel Cordero Gradaille, y el guitarrista y programador orquestal David Viera Barreras. Este último es su director, compositor y principal orfebre del sonido majestuoso y vibrante de esta propuesta.

My Fate, que traducido al español significa Mi Destino, tiene buena calidad en todo los sentidos. Se nota que cuidaron todos los aspectos técnicos concernientes a la grabación y posterior trabajo de producción. Los créditos de todo el proceso creativo son para la banda en general. Agregar que posee un concepto creativo que se nutre en parte de la mitología desarrollada por el célebre escritor John Ronald Reuel Tolkien.

Musicalmente exhibe unas atmósferas orquestales muy logradas, con aire épico y triunfal donde las voces guturales curiosamente no le aportan maleficencia, sino un contenido sobrenatural lejos de los tradicionales códigos del Bien y el Mal. El empleo de la voz limpia convencional es manejado certeramente, aunque los instantes memorables están contenidos en el tema homónimo. Existen algunos pasajes bastante rockeros con elegante recurrencia de teclados y guitarras para elogiar, y que en caso de una actuación en directo, seguro arrancarán vítores al público.

Mientras escucho “The Dwarves of Drunegon” soy transportado a las colosales minas donde los enanos trabajan sin cesar, pero también donde no pueden ser alcanzados por enemigo alguno. Se trata de una enorme fortaleza cavada en la roca sólida en aras de llegar a las profundidades de la tierra en busca de un sinnúmero de riquezas. Sin dudas que es una experiencia altamente gratificante para quienes gustan de la aventura fantástica a través del cúmulo de sensaciones que trasmite la música.

El artwork merece una reseña para él solo, pues me parece estupendo, muy pocas veces he visto un trabajo semejante en nuestra escena. Nada falta y nada sobra, un desempeño redondo como consignan muchos críticos de arte. Su verdadero significado debe estar ligado al concepto, pero me sugiere un abismo interestelar o una maniobra de luces mágicas en la oscuridad de una suntuosa galería. Además, los rótulos son sumamente precisos y originales. Enfatizar que el artwork es siempre una carta de presentación y por tanto ofrecer una buena impresión garantiza la debida atención, aunque claro que después intervienen otros factores. Hay un viejo proverbio anónimo que dice: “no hay una segunda oportunidad de causar una buena primera impresión”.

El desempeño instrumental es competente en los tres temas, que sin rozar la perfección logran conmovernos profundamente. En dependencia del carácter y experiencia, cuando demos play al demo, unos rápidamente optarán por ponerse de pie y otros quedarán sentados como en trance hasta el final. Danay Pérez Batista, sin demostrar ser poseedora de una excelsa tesitura vocal, sale bien parada, o sea, convence ajustándose adecuadamente a sus posibilidades.

Recomiendo escuchar todos los temas, pero a mí en particular me encantó “The Dwarves of Drunegon” y con su aires de marcha triunfal en tempo medio doom metal y “My Fate” con su hábil coqueteo con el hard rock, la destreza instrumental exhibida y la seductora voz femenina que emula el canto de una sirena. Si eres amante del metal sinfónico, no puedes demorar la escucha de My Fate, así que agilízate y consíguelo ya.

Temas:
1. My Fate
2. The Dwarves of Drunegon
3. Gyren

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