Cid
Los arquitectos de conciencia
18 de enero de 2016
Calificación: 4 / 5
Mientras escuchaba detenidamente las canciones que componen el disco titulado Los arquitectos de conciencia, del joven artista Roberto Hernández Lebon, Cid, me venía a la mente un pensamiento ineludible: el impacto global que ha tenido y aún tiene el rap cubano. Me refiero a todo un universo cinematográfico, literario, plástico y musical relacionado con esta cultura de resistencia. Dentro del séptimo arte tenemos filmes clásicos (que todo amante de la moña debiera ver) como “Inventos”, de Eli Jacobs Fantauzzi, “La Fabri_K”, del cubano-americano Lisandro Pérez Rey, “Jóvenes rebeldes”, de Anna Borden y Ryan Fleck, “Cuban Hip Hop: desde el principio”, de Vanessa y Larissa Díaz, “Real 70”, de los realizadores Joaquín Ruiz y José Miragall, “Short Radiography of Hip Hop in Cuba”, de Ricardo Bacallao, “Revolution”, de Maykell Pedrero, “Alamar: Ciudad del Hip Hop”, de Carlos Rafael Betancourt y Oscar Ernesto Ortega, entre otros. Todas estas producciones cinematográficas ponen de relieve narraciones tales como: el cuestionamiento al actual modelo de identidad nacional, abordaje de un nacionalismo negro, la existencia de flagelos como la discriminación racial y racismo, transculturación musical, críticas mordaces a políticas gubernamentales erróneas, la existencia de una creciente división de clases debido a la dolarización de la economía, etc.
Desde la literatura, tenemos revistas y fanzines que han pugnado por establecer una suerte de memoria histórica del hip hop cubano. Estamos hablando de Movimiento, Offline, PMU, Misceláneo, entre otras. El legado del graffiti como elemento plástico de la cultura hip hop también ha dejado su impronta en Cuba. No podemos olvidar que en los duros años 90 y como parte de una campaña propagandística del gobierno cubano, pululaban por toda la capital símbolos y tipografías de tipo cursiva decorativa, o de fantasía, en los muros de la ciudad. Si bien estas expresiones desde el punto de vista artístico y gráfico-comunicativo no podían considerarse graffitis, resultó evidente que fueron una respuesta o apropiación política de la gráfica de la UJC (Unión de Jóvenes Comunistas) para renovar y sustentar lúdicamente su ideología.
El discurso rapero también dejó una rica herencia dentro de la amplia constelación de géneros pertenecientes a la música popular cubana. Recordemos temas como “El rap de la bicicleta”, de Opus 13, “El rap de la muerta”, de José Luis Cortés (El Tosco), “Dale a los pedales”, de Irakere, “Y qué tú quieres que te den”, de Adalberto Álvarez. Cabe mencionar también el rap de alta factura que se desarrolló en la diáspora, como es el caso de Las Krudas, Orishas, Cuban Link, Pitbull, Mellow Man Ace, entre otros. Ahora bien… ¿Dónde radica el poder del rap elaborado en nuestro país? Evidentemente, en su profunda convicción sociológica. Digo esto con total conciencia de que también rockeros, rastas, poperos, trovadores y cuanta tribu urbana exista en la mayor de las Antillas, ha contribuido de modo decisivo al desarrollo de nuestro universo socio-musical contemporáneo, pero es un hecho palpable que las rapera/os cubana/os siempre se han comportado como verdadera/os fustigadora/es y cronistas sociales. Porque es esa la esencia indisoluble del rap: ser una filosofía de vida y empoderamiento para los más oprimidos.
En ese sentido, el joven rapero Roberto Hernández, cual Rodrigo Díaz de Vivar rimador, nos ofrece una visión panorámica de la actual escena rapera cubana mediante el empleo de 12 canciones nada desdeñables. Vale recordar que este chico, con tan solo 20 años, forma parte de ese interesante proyecto artístico-musical nombrado Malcolm Beybe, que funge como elemento revitalizador de rimas urbanas. El tema que da inicio al disco, “Pesadez”, es un beef donde se ponen de manifiesto las cualidades discursivas de una novísima escuela rapera, todo ello aderezado con cierta esencia gangsta y negrista: “No te metas con la Malcolm ni con el rap que diseña, avísale a tu ganga y a tu zona que esto es guerra”.
El track titulado “Quisiera”, es un excelente ejemplo del mejor rap conciencia que se produce en el patio, con textos que hablan de palabras olvidadas y hoy en día malsonantes como: perdón, reconciliación, apoyo, esperanza, dignidad, progreso, entre otras.
“Te necesito” es una pastilla o balada rapera bien estructurada, propio de espíritus sonoros como Tamia, Anselmo Ralph, Craig David, R. Nelly, Keith Sweat y muchos más.
Una de las piezas más bellas de este fonograma es, sin lugar a dudas, “Homenaje”. Por primera vez tropiezo con una canción de corte espiritual, donde son evocados artistas que ya no están en este plano terrenal. Barbarito Grandes Ligas, DJ Bahamas y El Fila, son sólo algunos de los mencionados, quienes se entregaron en cuerpo y alma al desarrollo de la cultura hip hop en nuestro país. Este tema es valioso por su toque de urbanidad generacional, es el respeto por la vieja escuela del rap en boca de un rapero novel.
Por otro lado, en una suerte de antípoda musical, el track titulado “Movimiento” nos habla de fragmentaciones en el seno de la comunidad rapera cubana. La existencia de un eje de poder por parte de raperos veteranos, la decepción de artistas de la nueva escuela debido a fragmentaciones y la inexistencia de un movimiento cohesionado, son tratados en esta canción sin ambigüedades de ningún tipo.
Si de algo se resiente esta producción discográfica, es debido a la ausencia de voces femeninas, ya que la colaboración con cultivadoras del R&B o neo soul, lo hubiese enriquecido mucho más. El otro factor tiene que ver con un argumento que siempre esgrimiré en mis textos: son tiempos de evolución, más que de revolución. El sonido “kum kum pá” es genial y práctico, pero se siente cada vez más la falta de instrumentos reales que acompañen el trabajo rapero en un mundo cada vez más globalizado y competitivo. El flow del Cid es perfecto para tener como apoyatura una banda, a la manera del denominado rap alternativo. No obstante, Los arquitectos de conciencia es un disco variado, dinámico y digno de ocupar un lugar selecto dentro de las colecciones que albergamos con recelo los amantes de sonoridades alternativas cubanas, entre los cuales, humildemente, me incluyo.
Temas:
1. Pesadez
2. Quisiera
3. Te necesito
4. Homenaje
5. Movimiento
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