Other Brain
Don’t Return
14 de noviembre de 2016
Calificación 4,5 / 5
Holguín sigue siendo uno de los principales bastiones del metal underground cubano, por la cantidad y variedad de bandas que atesora. En esta ocasión, les propongo un disco creado por Other Brain, banda que cultiva el metalcore melódico con calidad incuestionable, a pesar de las limitaciones que enfrenta. Su nombre resulta curioso, a primera instancia, ya que, traduciéndolo al español, significa “otro cerebro”.
Don’t Return es un disco independiente, que posee buena factura, en cuanto a sonido, por lo que resulta una verdadera proeza. Todos los instrumentos son perfectamente audibles y, más que eso, con una nitidez notoria. Y aunque en lo adelante describa los puntos fuertes, precisando según el caso, debo decir que la capacidad creativa y técnica de estos músicos es significativa.
Ahora, les describiré cada uno de los temas. Comienza “Sentinel” con un dulce intro a base de teclados, al que luego se suma la guitarra y despliega un sentimiento épico, que verdaderamente conmueve. A pesar de su brevedad, nos transporta en el tiempo, para ser testigos de hazañas sempiternas. Sin demora, se desata la furia a través de una percusión acelerada y potente, riffs contundentes y vocalización colérica. Además, como es típico en el género, se emplean voces limpias en algunos pasajes, y es grato escuchar un solo de guitarra, bien melódico. Para el cierre, vuelve el poderío instrumental, con suficiente poder para desatar un impetuoso mosh pit. Uno de mis favoritos.
Acto seguido, “Depredator” irrumpe bien contundente e iracunda. Unas veces recurre a la velocidad y después, ralentiza, pero sin bajar la intensidad. Las voces están muy bien conseguidas y, en particular, las coléricas, que logran trasmitir un odio revanchista. La percusión es certera y vigorosa, irguiéndose como la columna vertebral del tema. Y, nuevamente, hay un solo de guitarra, que a pesar de ser un tanto breve, consigue llamar la atención por su vivacidad. A estas alturas, confirmamos que el acierto del primer tema no fue casualidad, estamos disfrutando de un disco bien concebido y con suficiente garra para mantenernos muy atentos.
Luego, “Don’t Return” abre con una percusión galopante, riffs intrigantes, a la que suma una vocalización rabiosa. Aquí, percibo cierta influencia del melodic death metal fraguado en Gotemburgo, la capital sueca. Las revoluciones se reducen considerablemente, pero la intriga generada nos envuelve, como una densa niebla de la que no podemos escapar. Muy significativo es el grito desgarrador: “No hay vuelta atráaaaaaas”, tanto, que nos hiela la sangre con su potente carga de tenebrismo.
Después, “Nobody Knows” llega medianamente sosegada, pero con una percusión bien competente y el bajo ofreciendo maravillas, en cuanto a destreza. Un tema un tanto melancólico, por la presencia de voces apagadas que intercalan con las dominantes semiguturales. A medio camino, se torna un tanto plano, pero, por fortuna, arreciaron matices de tecnicismo y potencia, que rescataron el tema. La letra, por su parte, aborda las peripecias por las que atraviesa una persona sumida en la desesperanza. Los siguientes fragmentos lo ejemplifican: “cierro los ojos, ya puedo sentir la voz / veo el vacío…”, y “dame futuro, por favor / yo quiero ser un soñadoooor”.
Más tarde, “Fuck Prostitution” despliega sus alas y un riff adictivo nos conquista rápidamente. Como pueden notar, su título se traduce como “jodida prostitución”, así que, parece una denuncia a este flagelo presente en la sociedad. Un tema que no decae en ritmo, por lo que te mantiene siempre alerta. Logra darnos un chispazo de alto voltaje y no perder la cordura, sino todo lo contrario.
Para el final, “Sacrifice” comienza con un profuso alarido, similar al emitido por un guerrero ancestral, cuando atraviesa a su mayor enemigo empuñando una filosa lanza. El ritmo es medianamente acelerado y muy contagioso. Las guitarras brillan, creando con riffs asesinos, además de un solo ejecutado, con una velocidad y precisión que te deja con la boca abierta. Por si quedaban dudas, la banda vuelve a reafirmar que tiene concepto y una calidad técnica tremenda. Este es uno de mis temas favoritos, sin discusión.
Resumiendo, muy buen disco de Other Brain, que se posiciona como una banda a tener en cuenta dentro de la escena nacional. Si te gusta el metalcore, no demores más la escucha de Don’t Return.
Temas:
1. Sentinel
2. Depredator
3. Don’t Return
4. Nobody Knows
5. Fuck Prostitution
6. Sacrifice
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